Capitulo 17

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El aire fresco de la noche de Future City golpeó la cara de Winter como un balde de agua helada cuando salió. No se había dado cuenta de lo cargado y sofocante que se había vuelto el aire dentro del almacén. El aroma embriagador de las feromonas que distorsionan la mente había llenado completamente el edificio, y se volvió aún más embriagador por los olores añadidos de sudor y sexo. El aire fresco era algo que Winter no se había dado cuenta de que necesitaba. Tuvo que hacer una pausa por un momento y beberlo, llenando lentamente sus pulmones antes de exhalar mientras escuchaba los sonidos de los autos que pasaban distantes. Inmediatamente, se sintió mucho mejor. Era como si le hubieran metido la cabeza en un horno sin siquiera darse cuenta.

El aire limpio era refrescante, pero la claridad que traía iba acompañada de un torrente de sentimientos encontrados. Ahora que Winter podía recordar sus propias acciones con ojos despejados por la lujuria, estaba sorprendida. Sorprendida por lo mala y dominante que había sido, y sorprendida por lo mucho que lo había disfrutado. Independientemente de las excusas que pudiera poner, no se sentía bien al respecto en absoluto. La pregunta que tan fácilmente había descartado en medio de la pasión comenzó a atormentarla y roerla de nuevo: ¿realmente había sido ella? ¿O había sido Karina? ¿Cuánto había sido el control mental de Winter obligándola a humillar a Ningning, y cuánto había sido simplemente usándolo como una excusa para desencadenar su propio sadismo y deseo sexual?

ella no sabía Era imposible saberlo.

Winter tampoco tuvo tiempo de insistir en la pregunta. Eso no era por lo que ella había venido aquí.

Ella había venido aquí por Karina.

Un mero latido después de haber visto a Karina deslizarse por la salida de incendios con una mirada extraña en su rostro, Winter la había seguido. A pesar de su propia urgencia, no estaba exactamente segura de por qué. No era como si Karina fuera a ir muy lejos. Los dos todavía estaban unidos por la cadena dorada de Karina, asegurando que Winter no tuviera más remedio que obedecer todas y cada una de sus órdenes. Aparentemente, era capaz de seguir extendiéndose para mantenerlos conectados, si eso era lo que Karina deseaba. Ya que no había arrastrado a Winter afuera con ella, claramente lo hizo. Winter estaba dispuesta a creer que su cadena podía extenderse mil millas, hasta que se probara lo contrario. El poder de Karina parecía no tener límite.

Sin embargo, eso no debería haberle importado a Winter. Lo que debería haber importado era que Karina la había dejado desatendida. Era la oportunidad perfecta para intentar escapar. Podría haber intentado quitarse la cadena de la muñeca, tender una trampa o intentar despertar a Ningning. Tal vez podría haber encontrado una laguna en las instrucciones de Karina que le hubiera permitido dar pistas al otro supervillano. Winter no había hecho nada de eso. Acababa de correr tras su captor sin pensarlo dos veces.

Maldita sea.

Karina estaba a solo unos pasos de distancia, y una mirada a ella fue todo lo que Winter necesitó para saber que algo andaba muy mal. Después de pasar días juntos, el lenguaje corporal del superhéroe era un libro abierto. Normalmente, ella estaba erguida y orgullosa, luciendo tan odiosamente heroica como en las fotos de prensa. Ahora, se veía alarmantemente hundida, como un viejo castillo en ruinas a punto de desmoronarse. También había algo desesperadamente inquieto en el héroe; respiraba con dificultad y parecía que no podía quedarse quieta. Caminaba de un lado a otro sin rumbo fijo, solo unos pasos de un lado a otro, girando y sacudiendo la cabeza.

No parecía haberse dado cuenta de que Winter la había seguido, lo cual era un regalo milagroso y la excusa perfecta para que Winter se diera la vuelta y volviera a entrar. Pero ella simplemente no podía soportar verla de esa manera.

"Karina", comenzó Winter, extendiendo la mano. "Qué..."

Krina retrocedió, casi como si estuviera asustada. Winter parpadeó.

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