Sempiterno (Daryl Dixon)

Capitulo 1-Campamento Atlanta

Correr,eso es todo lo que puedo hacer en este momento. Mi familia y yo corremos por el bosque a la mayor velocidad que podemos. Aferró a mi bebé a mi lo más que puedo mientras trato de respirar bien para no cansarme tan rápido.

-Paremos aquí,ya no nos persiguen- dice mi hermano mientras se detiene con la respiración agitada.

Dejo caer mi cuerpo contra un árbol aún sujetando a mi bebé, trato de normalizar mi respiración mientras cierro mis ojos. Eso estuvo cerca, demaciado cerca.
Tomo la botella de agua que me ofrece mi hermana y tomo un pequeño trago,hay que cuidar todo hoy en día.

Cuando se la devuelvo,escucho un crujido de hojas cerca nuestro.
Me pongo alerta inmediatamente y pongo la mano en el arma que mi hermano me dio y mantengo en mi cintura.
Veo como toda mi familia se pone en guardia con sus armas en alto mientras yo me quedo detrás de ellos con mis sobrinos y mi bebé.

-Vaya vaya,¿Que tenemos aquí?- la voz de un hombre se escucha cerca de donde estamos,no puedo ver nada,pero la rigidez de la espalda de mi hermano me dice que no le gusta nada esta situación.

-¿Que quieres?- pregunta Bryan.

-¿Yo? Nada viejo,solo socializar un poco- dice con un deje de burla en su voz. No me agrada esto. Por el rabillo del ojo noto movimiento a mi izquierda asique apunto el arma en esa dirección,dejo los niños detrás de mi y el bolso tipo canguro que llevo me ayuda a sostener a mi bebé.
Un hombre joven sale de entre los árboles,viste unos pantalones desgastados,una remera con las cangas cortadas color marrón y sostiene una gran ballesta. Él camina lento hacia nosotros,su vista recorre a todos los presente hasta que sus ojos azules recaen en mi,puedo ver la sorpresa en su rostro cuando ve a mi bebe y a los niños detrás de mi. Puedo notar con la firmeza con la que sostiene su ballesta vacila por un momento hasta que su mirada vuelve a ser fría nuevamente y él recupera su postura.

-Dejalos en paz Merle- me llevo una gran sorpresa cuando su voz ronca causa en mi un pequeño escalofrío, culpo a mi reciente embarazo que mis hormonas estén un poco alborotadas aún.

-Vamos hermano,ellos tienen muchas cosas- dice el hombre al que aún no puedo ver.

-Cosas que tú no vas a tocar,vete al diablo y déjanos en paz-dice mi hermana levantando su arma hacia ellos.

-Ten más cuidado con como me hablas- la voz del hombre cambia a una que me asusta un poco.

-Merle,ya te dije que los...- antes de que ojitos azules pueda terminar de hablar,una voz lo interrumpe.

-¿Que sucede aquí?- un hombre alto,musculoso y con rulos,aparece por la misma dirección que el ballestero,nos inspecciona a todos y su cara demuestra la misma sorpresa que el tipo anterior cuando ve a los niños.

-Encontramos a esta gente,pero parece que no son muy amables- responde el tipo llamado Merle.

-Tu tampoco estás siendo muy amable-responde Bryan de manera cortante. Ya estoy hartandome de esta maldita charla que no va a ningún lugar. Salgo de detrás de mi hermano sin antes darles una mirada de advertencia a mis sobrinos para que se queden dónde están.