Capítulo III Adiós es adiós

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Año 2004, suena Boulevard of Broken dreams de Green day en la radio, Darla, se prepara para ir al colegio. Usa grandes aretes, cadenas metálicas, un maquillaje punk, algo rosa con negro, que por supuesto su madre no entendía, pero aun así la dejaba usarlo pues era la moda del momento y solo era una chica joven. 

Darla, conecta su discman, con su disco favorito de Simple plan y se va caminando a su colegio que por suerte vivía muy cerca. Incomprendida, rebelde, con muchos amigos y siempre la graciosa del salón, así era ella. Pero por dentro ocultaba una realidad, una verdad que pocos conocían. Estaba rota, y no precisamente por amor.

Su padre se fue de casa cuando tenía 10 años, luego de engañar a su madre repetidas veces, la madre tuvo que pedirle que se fuera, porque ya no aguantaba la situación. Esto le afectó mucho a pesar de nunca decirlo, ni siquiera lo mostraba, siempre supo ocultar muy bien su dolor. 

Darla, nunca fue apegada a su padre, pero vamos a ser honestos, el padre en la vida de una niña, es súper importante, como dicen por allí, " el primer amor". Por culpa de esto, se podría decir que tuvo muy malas experiencias con los chicos. No confiaba en ninguno, y la mayoría del tiempo se cerraba cuando ocurría algún problema. 

El miedo que la invadía que la engañaran era terrorífico; luego de ver a su madre sufrir por esta situación, Darla se percataba de ser la que dejaba y no la que le rompían el corazón.

Sin darse cuenta ella saboteaba sus relaciones, se creaba historias, algunas eran reales otras solo estaban en su mente, y así poder para pelear, y dejarlos. Ella no lo sabía, pero esto era un trastorno psicológico, y solo fue 15 años después que lo descubrió.

Pero no todo era tan simple, realmente poseía una intuición innata, podía oler las mentiras a distancia. Esto le ayudaba mucho más a poder desenmascarar cualquier inservible.

Llámese inservible: hombre que no vale la pena en lo absoluto.

La primera vez que Darla se enamoró tenía 17 años, y fue de un chico de su ciudad. Una vez en el parque sintió por primera vez las famosas mariposas en el estómago, lo que hoy por hoy sabe que solamente son nervios o lombrices, y no tiene nada que ver con amor. 

La relación fue corta, duró 3 meses, descubrió una chica que también salía con él,  lo cual hizo que cortaran inmediatamente , pero de una manera un poco ya saben dramática. (No lo habia mencionado pero Darla amaba el drama, decía que era la mejor manera de sentir que estaba viva) Hubo llantos, si, él lloraba por ella, fuera de su casa pidiéndole que la perdonara, Darla para tener solo 17 años no tuvo compasión, y cuando decía ADIÓS, era ADIÓS.

Llegó la graduación y las ganas de irse a la universidad aumentaban, ella solo quería ser la primera mexicana que fuese la mejor en modas, la más reconocida.  Crear su propia línea de ropa, una marca icónica al mejor estilo parisino. Desde niña coleccionaba posters de la torre Eiffel. Soñando despierta imaginando cuando podría conocer esta maravillosa ciudad. 

Cherry BlossomDonde viven las historias. Descúbrelo ahora