Sus ojos se mantenían concentrados en un plato de sopa, era un plato sustancioso gracias a la zanahoria, papas y chicharos, no olvidemos el emplatado que se veía impecable y el olor era fabuloso, amaba esa sopa. Nunca lo diría en voz alta pero apreciaba esa sopa más que cualquier platillo que él hiciera, aún si no era la gran cosa.
Una sonrisa pequeña se formuló en su boca observando cabizbajo el platillo, a lo lejos escuchaba una voz llamándolo por su nombre, pero por alguna razón la estaba ignorando dedicando su atención por completo al platillo.
—¡Bakugou!
—¡Bakugou!
—¡Bakugou!
—¡Katsuki!
Levantó su cara lentamente, su ceño se frunció, odiaba que lo llamarán por su nombre, solo habían tres personas que lo llamaban así y eran las únicas que tenían permitido hacerlo.
Su ceño se relajo cuando la vio frente a él, y ahí estaba, una de las únicas tres personas que podían llamarlo por su nombre, aparte de sus padres. Unos ojos preocupados y brillosos lo observaban, tan profundamente queriendo adivinar lo que pasaba en su mente.
—¿Sucede algo? –su voz era suave pero preocupada.
Katsuki parpadeo un par de veces, observo a su alrededor y de nuevo al plato de sopa, suspiro por la naríz, ¿Por qué estaba tan confundido? Era su casa, el comedor de su casa, comía sopa hecha por su amiga peli rosa y que claro estaba frente a ella. Era su lugar feliz, ¿Por qué dudaba de él?
—Te van a salir arrugas si sigues haciendo esa fea expresión. –advirtio divertido y la otra frunció el ceño, un pequeño e infantil puchero apareció en sus labios.
—¡Eres malo! –lo señaló.
—Si, soy muy malo. —rodeó los ojos– comé antes de que se enfríe.
—Bueno, ¡pero ni si quiera me escuchaste! –el rubio la miro por un momento y la otra suspiro– Sero y yo terminamos.
—¿Qué? –su cara no oculto la sorpresa.
—El suicidio de Kirishima lo afecto bastante, era como su hermano. –una pausa– Era como su hermano, joder lo entiendo. Él fue mi mejor amigo, era mi hermanito. –su voz se quebró y miro al techo recordando el pasado– pero el término rompiendonos.... No tenía excusa para buscar calidez en otras chicas, tampoco la tenía para haberme gritado y reprocharme todo ¡Yo también estoy mal! –las lágrimas por fin cayeron– yo también estoy mal...
—¿Kirishima está...? –su shock lo inmovilizó por completo.
—Sí... ¿Pero que más da? –suspiro y se limpió las lágrimas– si tal vez Sero y yo hubiéramos sido pareja desde la UA podríamos haber estado juntos un poco más... –se secó las lágrimas– ni si quiera te importa Kirishima, ¿Por qué tu rostro se ve así?
La mano de Bakugou se movió de forma involuntaria a su boca y la tapo, el tacto de su diestra sintió algo que no era su boca. Miro su palma y había arena, al instante tocó su cara y desprendió arena, poco a poco su cuerpo se iba quebrando, miro todo su cuerpo y de poco en poco se desplazaba en la silla. Puso las manos en la mesa intentando pararse, pero estás se disolvieron volviéndose arena, miro al frente con desesperación en busca de Mina, pero ella solo lo miraba en silencio; sus ojos reflejaban desprecio.
—Si no me hubiera quedado contigo tanto tiempo seguramente el nunca me habría dejado.
.....
Se sentó abruptamente en la cama, su cuerpo sudaba a mares y su respiración era muy agitada, miro a su alrededor buscando confort y se dio cuenta que estaba en su dormitorio.
ESTÁS LEYENDO
¿Te quedarías si lo intentará? | Kiribaku
RomanceEn un universo en donde Bakugou nunca considero amigo a Kirishima, sin embargo el último mencionado se esforzó para acercarse. Sus esfuerzos no tuvieron frutos ni en lo más mínimo, el peli rubio lo alejo de su vida por completo, hasta tres años desp...