4

70 12 0
                                    

—¡Ni en un millón de años! Olvídalo asquerosa. –arrugo su rostro alejándose otra vez

—¡Ya te lo dije! Necesito revisar en donde inserté un dispositivo USB, ¡te dije que todo estaba planeado!. –dijo ya cansada, habían pasado un poco más de 10 minutos tratándose de acercar al rubio quien mantenía a raya a Shelly.

—¡No estuve desnudo en el futuro como para que me pongan alguna mierda como esa! –gruñó

—¿Ah no? –dijo sorprendida e intento acercarse de nuevo.

—¡Estábamos en un puto bar! –lanzó un peluche hacía ella– ¡no te acerques idiota!

—¡Pensé que te había seducido! –le dijo ofendida.

—¡Una mierda me ibas a seducir! –volvió a lanzarle otro peluche.

—¡Basta de lanzar mis peluches! –se agachó para levantarlos–¿Estás seguro que no hicimos ningún contacto físico?

Katsuki no tardo en recordar que pidió que tomara sus manos y después les dijo que fuera a la refaccionaria antes de mandarlo al pasado.
Miro sus manos al instante y las elevó tratando de encontrar algún coso en ella, pero también llegaba a su mente una pregunta ¿Cómo?.

¿Cómo estaría en su cuerpo un objeto que fue introducido en el futuro? Su cuerpo había cambiado y la ropa que tenía en el bar cambio de cuando volvió a la UA, ¿Cómo tendría un objeto en su cuerpo ajeno al pasado?.

La castaña se acercó a el con cautela y tomo de forma suave sus manos, solo las sostuvo y lo miro a los ojos.

—Deja que te revise, por favor. –habló con suavidad, causando una corriente eléctrica en el cuerpo del rubio.

No dijo nada, pero dejo que lo sostuviera sus manos, hizo un sonido de afirmación y la otra sonrió.

—¡Ah! Es cierto, nunca pregunté tu nombre y bueno... Ya sabes.. –rascó su mejilla.

—Seguro que de tanto hacer cálculos tu diminuto cerebro se derritió. –rodó los ojos y la otra lo miró ofendido– Bakugou Katsuki, tu eres Shelly ¿cierto?

Lo miro con ojos sorprendidos y corrió hasta su escritorio soltando la mano del otro abruptamente, tomó su celular y tecelo algo rápidamente. Cuando finalmente se detuvo parecía que había encontrado lo que tanto había estado buscando, levantó su mirada lo miro y después volvió a mirar el celular, e hizo esto como tres veces más.

—¿Por qué me miras tanto? –la miro mal.

—¡Tu eres el chico revoltoso del festival deportivo! –dijo asombrada y el otro lo miro con molestía.

—Callaté de una buena vez y has lo que tengas que hacer. –revolvió su pelo con frustración.

—¡Literalmente mandé a un héroe al pasado! –cubrió su boca y miro su celular, de un momento a otro dio un chillido– ¡Mandé un héroe al pasado! –no evitó que una sonrisa tenebrosa saliera de su rostro

—Ahg, volviste a hacer esa cara, das mala espina. –la miro con desprecio.

La otra cerro su boca al instante, apretando sus labios y lo miro atenta. Abrió la boca y luego la cerro, pero después volvió abrirla.

—Estabas en un bar y yo me acerque como si fuera una fanática acosadora a ofrecerte viajar al pasado. –su cabeza unió todas las piezas y de pronto sintió caliente el rostro, estaba jodida.

—Bien, no eres tonta, por lo menos te diste cuenta de lo rara que eres. –rodó sus ojos.

—¡Eso no importa! Bueno ya... Mucha conversación, siéntate y déjame revisar tus manos. –señaló el sillón en el que minutos antes estaba sentado.

¿Te quedarías si lo intentará? | Kiribaku Donde viven las historias. Descúbrelo ahora