✱Capítulo 29. Cuando arriesgas pierdes

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Antes de que Danielle condujera hacia la dirección que ella conocía, fuimos al cajero. Zayn y Louis se quedaron en el coche, mientras Danielle y yo manteníamos la esperanza de que no tuviéramos la tarjeta bloqueada.

Ingresé mi tarjeta y presioné los botones. Danielle estaba inquieta, lo pude notar. Iba a preguntarle qué le sucedía, pero ella habló primero.

-¿Qué pasará después de esto? -su pregunta me impresionó un poco. Empecé a canturrear.

-Em... No sé, quisiera poderte decir algo, pero la verdad es que todo esto es tan... extraño -confesé. Danielle se comía las uñas.

El sistema funcionó normal y pude extraer bastante dinero. Celebré y Danielle un poco, pero no parecía tan entusiasmada.

-Mi turno.

No miré hacia la pantalla del cajero para no ver la contraseña de Danielle, así que simplemente perdí la mirada en cualquier otra cosa mientras pensaba en la pregunta de Danielle.

-Luego de esto... Louis será humano... Y obviamente Anne no me permitirá volver a casa -murmuré y luego agregué-: Bueno, no es que tampoco quiera.

«Acceso Denegado» dijo la máquina.

-¿Qué rayos? -Danielle maldijo-. Me han bloqueado la tarjeta a mí -volteó a verme y yo la miré con preocupación.

-Hay que hacer esto rápido: nos quedamos sin tiempo -dije y ella asintió.

Nos subimos al coche. Danielle manejaba, mientras Zayn era su copiloto.

A estos los veía muy amigos desde ayer que se conocieron. No paraban de hablar. Zayn me parecía un chico misterioso y malévolo, pero con Dani parecía humorístico y la verdad es que era gracioso verlos.

Danielle nos comentó que teníamos suerte de que estábamos en la capital del país y éste era el lugar donde se situaba la tal Johannah, pero que no conocía la residencia y eso nos restaba tiempo.

-¿Entonces qué podemos hacer al respecto? -pregunté-. Si ya tenemos el carro, pero nos falta un maldito conductor que conozca el lugar.

-Fácil amigo -Zayn respondió despreocupado-. Danielle, detén el auto.

Danielle obedeció y se estacionó cerca de un parque. Zayn se bajó y todos observábamos lo que tramaba.

Zayn se paró en medio de la calle y todos los carros pasaban a lado de él. Hasta que uno amarillo -un taxi-, se detuvo y Zayn lo miró directamente a los ojos, supongo que para hipnotizarlo.

-¿Qué le estará diciendo? -preguntó Danielle y yo me encogí de hombros.

-Esperen -Louis estaba como concentrado en algo y segundos después dejó de mostrarse así-. Lo hipnotizó para que condujera.

-¿Cómo sabes? -lo miré, frunciendo el ceño.

De pronto, las puertas del piloto y el copiloto se abrieron.

-Eso se llama oído amplificado. Especial de nosotros -me respondió Zayn-. Baja, cariño -le dijo a Danielle y ella asintió sin decir más.

-¿Quién es él? -pregunté al moreno.

-Él es Bob -Zayn sonrió-. Bob, llévanos a Inzki Village -el hombre asintió como robot y puso en marcha el coche.

*****

30 minutos después, Bob nos informó que habíamos llegado a la residencia. Sólo faltaba llegar a la casa. La mala noticia era que no sabíamos dónde carajos quedaba ya que el papel no lo decía. ¿Acaso era mucho pedir que nos pusieran el número en pequeño junto a la dirección?

Uncover {Larry Stylinson}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora