Dramatic Rainbow Friends! 𝑽𝒆𝒓𝒚.

Chaper eighteen/capítulo diez y ocho

Créditos del vídeo de portada: "AlexandraDex"

Candy y Orange se encontraban jugando a la mancha, esta vez era Orange quien tendría que tocar a Bint y Berry para poder dejar de ser el que tendría que perseguirla por todos los lugares, los gritos de alegría, los quejidos al ser empujados accidentalmente en forma de juego y los pisotones saque se escuchaban cada vez que se atrevían a dar pasos por el piso, todo eso despertó a Red, al ya estar despierto miro un reloj que tenía en unas de sus muñecas, era tarde, la hora de almorzar, al científico le pareció raro esto, ya que él solía levantarse temprano, además de que pocas veces solía usar alarma para levantarse a la hora deseada. Bajo por las piedras y fue empujado por un dinosaurio revoleando por parte de Candy, ella reía mientras que el de escamas también lo hacía, Red solo todo los ojos cansado.
- Buenos días. . . -hablo mirando con seriedad a Orange.
Bint y Berry al escuchar la voz y ver a Red cerca de Orange rápidamente agarró del brazo al contrario y lo puso detrás de el, gruñendo, el de ojos saltones se quedó en silencio al ver esa acción, sabía que no era tan unido a Candy, pero desde el principio pensó que serían dos niñas obedientes y tímidas. . . Pero, la parecer, no, eran muy parecidas a Orange, un carácter capaz de desafea a cualquiera si se trataba de una persona desconocida. Agarró su bata y se fue por la puerta, escuchando como poco a poco tales gruñidos se iban alejando o, mejor dicho, silenciando. Llego a el teatro, por allí estaban Blue y Green, ambos estaban abrazándose y dándose cariño, le dio un poco de vergüenza eso, pero más le causó dolor en su pecho, realmente quería estar de esa día con Purple, pero por los de su maldita personalidad y de todos los actos horrendos que había echo, eso no se podría hacer posible por razones obvias. Siguió con su camino, a tal punto de llegar a la puerta de su laboratorio e oficina, tan pronto llego y se sentó escucho cómo alguien tocaba la puerta dos o tres veces, los toques fueron confusos, uno fuerte y dos livianos. Se levanto, con ganas de no hacerlo y se dirigió a la puerta para después agarrar el picaporte darle vuelta e empujar la puerta, la abrió y con la primera persona que se encontró fue con Purple.
- Hola, Red -hablo con su voz robótica y algo entrecortada.
- Purple. . .¿Qué es lo que querés?
- Pasar un poco de tiempo con alguien, no me gusta jugar a esos juegos con Candy y Orange y Blue y Green. . .Están ocupados.
Un silencio los rodeo, Red no le daba mucha importancia a esa sensación silenciosa, desde siempre había trabajado solo y solitario con sus experimentos de maníacos, en cambio, Purple se sentía incómodo con eso, no sabía que decir o hacer, tenía miedo de estropearlo todo, eso era probable según su timidez y lo que tanto le costaba desarrollar una conversación, esa incomodidad duro hasta que el mutante púrpura noto la cara del contrario, había que admitir y reconocer que el científico era una persona seria que siempre seguía sus objetivos sin pensarlo dos veces, también era debes en cuando un poco egoísta, pero la cara del contrario, se notaba frustrada, con nervios y algo que otro tristeza, ahora eso sí era raro, Red, desde que logro conseguir la mutación de él y los demás, aunque le daba curiosidad y quería saber el porque el contrario estaba de esa forma, seguía sin saber si hablar o no, por un lado, quizás valga la pena preguntar para destruir esa incomodidad, pero, cualquier palabra, acción física o otra cosa que haga podría hasta incluso destruir la relación de ambos, se podría decir que hace poco empezaron a aislarse, eso se formó por una pelea estúpida, que dejó confundidos a ambos sobre el amor mutuo que supuestamente se tendrían.
- ¿Red, estás bien? -hablo de una vez por todas.
- Estoy. . .Estoy bien. . .
- ¿Estás seguro. . .? -pregunto reposando su mano en el cachete de Red, esto le causó un pequeño sonrojo al científico-, te ves. . .Un poco "solitario". . .
El de bata blanca se tomó unos segundos para contestar, trago saliva y miro hacia otro lado con algo de vergüenza.
- Bien, estoy triste. . .
- No te preocupes, yo puedo arreglar eso. . .
Purple en ese momento no estaba pensando ni en sus acciones, tan pronto dijo tal frase se acercó a Red lo suficiente como para que sus la labios se tocaran, las pupilas de Red se achicaron, no sabía que hacer, tan pronto se separaron para agarrar aire y el científico seguía en shok, parpadeo un par de veces para después ver el pedazo de saliva que unía sus bocas, ya al ver esto tapo su boca mientras sentía como su corazón latía y su calor corporal era tan notario que ya sudor de su frente empezaba a derramarse, el mutante Púrpura dejo escapar una risa grave, le causó gracia la cara del contrario. . .Realmente lo amaba.
- ¿Estás feliz? -pregunto, sin sacarle la mirada al menor.
- Yo. . .¿Qué acaba de pasar?
El mutante púrpura rio al escuchar eso, no fue una carcajada larga o muy gritona, fue corta y algo silenciosa, pero parecía alzada, Red se sintió vulnerable cuando tal acción ya nombrada escucho, sintió como sus cachetes empezaron a arder como nunca antes ¿Eso era normal? Se pregunto ¡Pero claro que lo es! Solo no estaba acostumbrado a que le pasaran esas cosas. . .Un silencio los rodeo, Purple se sentía tan liberado y Red algo nervioso, tenía que admitir que hacía mucho que no besaba al mayor, incluso le costaba acordarse de la primera vez, hablando de besos, tan pronto como sintió sus labios con los de Purple unidos pudo apreciar como si unas ganas de abalanzarse contra el contrario como si lo atacará.
- Purple. . .
- ¿Phmmm?
- fue suficiente. . . -dijo para después abalanzarse al contrario y besarlo.
Cerro sus ojos mientras ponía sus abrazos en la nuca de Purple, quien dejó los suyos en la espalda del menor para poder sostenerlo, pegaron más sus cuerpos y con un abrir y cerrar de ojos se pudo ver cómo se pegaron la puerta, el mutante púrpura agarró el picaporte mientras seducía con su lengua al científico, era como una fiesta dentro de sus bocas, y sus lenguas eran quienes bailaban pegadas. La puerta se abrió y el mayor paso de poner sus manos en la espalda de Red a dejarlas bajo las piernas, mientras que ellas sobresalían por los costados de sus caderas, Purple camino hasta llegar a la cama de su jefe, tan pronto vio ese acolchado con sábanas tiro al de bata blanca en ese lugar, generando le confusión al científico.
- ¡¿Que te pasa?! -exclamo.
- Tus pantalones -respondió con tranquilidad.
- ¿Qué?
- Sácate los pantalones.
La cara de Red era de esperar, los ojos bien grandes y su cara más roja de lo que era naturalmente.
- Perdón. . .¿Qué dijiste? -pregunto con la voz temblorosa.
- Cielito. . .Solo quiero reforzar nuestra relación -hablo, dadose cuenta de lo que hacía sin explicación alguna-, pero si no queres no.
- ¡No es que no quiera. . .! Es solo que. . . -se tomó unos segundos para terminar su frase-, primero. . .¿Acaso sabes hacer. . .Eso?
- Phmmm. . .¿Qué cosa?
- Sexo.
- ¡Ho! ¡Eso! -exclamo mirando hacia un lado-, de hecho. . .Hace mucho tiempo atrás que quería hacerlo contigo, Red. . . -respondió mordiendo su labio inferior.
El científico trago saliva, realmente no estaba seguro de si quería o no, jamás había imaginado que algo como lo que estaría sufriendo ahora se hiciera realidad, ósea. . .¡Miren a Purple! ¿Les parece que tiene cara de poder cogerse a alguien? ¡Pero claro que no! El tenía cara de que ni siquiera sabía que era un pene. . .¡De seguro él ni siquiera lo sabía!
- Bueno. . .Supongo que ya sabrás el como es. . . -dijo, tranquilizándose poco a poco- , primero déjame a mí empezar. . .
Tan pronto termino esa frase y se saco su bata, desato su corbata y la puso en la nuca del contrario, tironeando de ella lo suficiente como para que el contrario se acercara a su rostro. Tan pronto sus respiraciones cruzaron y un beso se formo, el mutante Purpura al recibirlo cerro sus ojos, cosa que no hizo Red, teniendo los ojos abiertos bajo lentamente su mano hasta el pecho del mayor, acariciándolo por un largo tiempo, eso duro hasta que se separaron para poder respirar, entonces Purple con esa misma mano y con la otra empujo al mutante purpura a la cama.
- ¿Con qué vas a empezar? -pregunto mirando al menor con tranquilidad.
- Te voy a masturbar ¿Sabes lo que eso significa? ¿No?
- Estoy entre dos cosas. . .Muéstrame.
El de el piel rojiza dejo su cinturón a un lado para poder arrodillarse sin que ese objeto apretara su pansa, termino estando en cuatro, levantando su cadera y sumergiendo su cabeza para observar con más atención el miembro del contrario. Purple al sentir como el menor empezaba a masajear su parte íntima agarró con mucha fuerza las sabanas, necesitaba agarrarse de algo, sentía un gran alivio de sentir la atención que tanto quería, pero no quería volverse loco y hacerle daño a su pareja, tenía que tranquilizarse un poco, por lo menos no asustar a Red. Las manos de el científico se movían con lentitud, Dios, era una tortura muy placentera para el mutante. Rodeo sus manos alrededor de su pene pero teniendo los pulgares elevados y con esos mismos pulgares masajeaba en forma de círculos la punta, mientras que sus manos al mismo tiempo bajaban y subían, la tensión subió al sentir como Red cambiaba de lugar sus pulgares al bajar y hacer presión en los laterales de su pene, acercando cada vez su cara, teniendo la duda de si meter todo eso dentro de su boca o si eso podría entrar por completo, después de ese masaje agarró los testículos del contrario para después hacer sutilmente con su otra mano con el mismo pulgar para un lado y otro, teniendo la misma lentitud, solo que esta vez se armó de valor y se dispuso a lamer la punta ya masajeaba, a pesar de que Purple la estaba pasando en el cielo, Red se sentía algo antojado, pero tenía que esperar, aunque dudaba de que el de pelaje purpura sepa hacer estos tipos de masajes, además de que no solo se sentía antojado si no que también se sentía como algo pequeño, Purple daba gruñidos graves y solía gemir con una voz ronca por eso Red se sentía el de abajo, era como si Purple tuviera el control. Red decidió soltar esos testículos y agarrar el "tronco", para que empezará a masajear entre círculos todo el pene erecto, la apariencia de su dueño era de locura, él sabe que dijo que tendría que controlarse, pero se sentía demasiado bien, tenía ganas de agarrar a Red y sumergir su pene en las profundidades de la entrada de el de piel roja, es más, ya era demasiado, sentía que su miembro iba a explotar, terminando manchando toda la mano de Red de semen, el de piel roja se limpio ese líquido de su mano con su lengua, mirando al mayor quien todavía parecía estar despierto, así que decidió terminar con sus dudas y empezó a lamer los costados, lo suficiente como para ir chupando la punta y saboreando toda la entre pierna de el mayor, lamía cada parte, de arriba a abajo, incluso metió en su boca las bolas del más alto, Purple al sentir eso apretó una nalga y empujó la cabeza de Red al fondo de todo, llegando a la garganta del contrario de lo largo y ancho que era, en ese momento otra vez vino ese líquido blanco, haciendo que el menor se tragara todo el semen, saco su boca del pene de Purple, tosiendo por haberse tragado eso sin siquiera esperarlo. Red miro la mano que tenía en su cola para después mirar al de pelaje purpura, esté se mordía el labio con fuerza mientras miraba al menor. Red ya tenía las manos cansadas, así que supuso que ya podría descansar, es por eso que se sentó en el regazo del contrario, para empezar a frotarse con el paquete del mutante Purpura, estuvo así por un rato hasta que decidió ver la cara del mayor, este también lo estaba viendo con una cara de pícaro, sus miradas siguieron hasta que Red sintió las manos de Purple en sus caderas, tan pronto se dio cuenta de esto y ya con un saltón entro la punta.
- ¡HA! -jadeo al sentir algo que entraba dentro de él.
Lágrimas salieron de sus ojos al sentir como ya había entrado la primera parte de el miembro de Purple, definitivamente lo iba a partir en dos, empezó a dar saltos mientras le daba una sonrisa dolorosa al mayor que aumentaba la velocidad de los saltos con sus manos, las lágrimas se volvían más gordas mientras que su boca se abría a medida de cada salto, dejando caer gran cantidad de saliva, Purple se dispuso a besarlo apasionadamente, enredando su lengua alrededor de la de Red, a este le costaba mucho respirar por la velocidad de la que iban y por el beso, que cada vez que se alejaba automáticamente otra vez el beso era unido, o al menos eso duro hasta que Purple también se estaba quedando sin aire, en ese momento ahora le complació escuchar los gemidos y jadeos que salía de esa boca y mirar a la belleza de su novio que tenía al frente. Purple elegido bien el momento ya que a ese punto su pene ya había llegado al punto G del del científico, aunque estaba bastante más adelantado su punto G que el que tienen las personas normales, bueno, él era un mutante no un ser humano, los ojos de Red se volvieron blancos mientras los abría demasiado, demostrando una gran sonrisa que no dejaba de babear, empezó a temblar mientras intentaba no recostarse en el pecho del contrario, poniendo con algo de dificultad sus manos en los hombros del mayor, intentando hacer más rápidos y placenteros los saltos dónde entraba cada vez más el pene de Purple, algo cansado recostó su cabeza en unos de los hombros del más alto, provocando más al dominante, este ya sentía chocaba hasta al final que se lo permitía su entrada al gran miembro de su pareja, Purple se entristeció un poco al sentir que ya no podía avanzar más.
- ¿Feliz? -pregunto Red, con una voz rota, tanta saliva que había desperdiciado provoco que estuviera con la garganta seca.
- ¿No podemos hacer otra ronda?
- Purple, estoy cansado, quizás la próxima.
- Me parece justo. . . -respondió levantando las caderas del contrario.
De esa forma Purple saco su entre pierna de la entrada de Red, quien gimió como sus cuerdas vocales se lo permitieron.
- Te amo Red. . . -susurro el mutante purpura.
- Yo también te amo. . .