CAPÍTULO 21: Mamá no llores

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Para facilitar las actividades de Xie Dao Nian, el estudio y el dormitorio que frecuentaba estaban situados en la planta baja. Ji Xiao Nai lo empujó fuera del estudio, dobló una esquina y pronto llegó al comedor.

Tal como lo había dicho Xie Dao Nian, Xie Si ya estaba sentado en la silla especial para niños, sonriendo y esperando con las mejillas apoyadas en sus manos.

Al ver a Ji Xiao Nai, Xie Si inmediatamente saludó emocionado y gritó con voz quebradiza: "¡Mamá y papá, vengan aquí!"

Los sirvientes que esperaban en el comedor se sorprendieron, mirándose unos a otros, incapaces de ocultar la curiosidad en sus ojos, incluso Lu Li tosió torpemente, excepto Fu Qing, que permaneció inexpresivo en su lugar, alejándose como siempre.

El más tímido era Ji Xiao Nai, sólo al ser llamado mamá por el niño que no sabía qué estaba bien, pero al escuchar mamá y papá juntos, como si se confirmara que hay alguna relación especial entre él y Xie Dao Nian...

Esperaba que Xie Dao Nian se ocupara de Xie Si, pero Xie Dao Nian pareció dejar de corregirlo y solo giró la cabeza, sonrió a Ji Xiao Nai en tono de disculpa y dijo suavemente: "Xiao Nai, ¿tienes hambre? Comamos primero, no sé lo que te gusta, así que les he pedido que te preparen algo, así que, si quieres comer algo en específico, díselo al ama de llaves."

El mayordomo era un anciano de pelo gris y sonrisa amable. Al oír las palabras de Xie Dao Nian, se apresuró a inclinarse y dijo con una sonrisa: "El cuarto maestro tiene razón, si el joven maestro tiene algo que quiera comer o desea, sólo dígamelo."

Ji Xiao Nai dudó un momento, sin saber qué decir sobre su incapacidad para hablar, pero Xie Dao Nian pareció darse cuenta de sus preocupaciones y le explicó con voz cálida: "No te preocupes, todos los sirvientes de esta villa han aprendido el lenguaje de señas, así que no habrá ninguna dificultad para comunicarse. El ama de llaves que es el tío Wang, también Lu Li y Fu Qing también conocen el lenguaje, puedes llamarles para cualquier cosa, no seas condescendiente."

Con eso, empujó la silla de ruedas hacia la mesa, acarició la cabecita de Xie Si y le amonestó en voz baja: "Xie Si, mira, eres el único de la familia que aún no ha aprendido el lenguaje de señas, si quieres que el tío Xiao Nai juegue contigo, debes aprenderlo bien, ¿me oyes?"

Xie Si estaba un poco triste y miró a Ji Xiao Nai con resignación: "¿Tengo que aprenderlo?"

Al ser mirado por sus ojos lastimeros, Ji Xiao Nai no pudo soportarlo y estaba a punto de decirle a Xie Dao Nian que podía usar el software de su teléfono para resolver el problema, cuando vio que Xie Dao Nian ya no sonreía y decía firmemente: "Debes."

Ji Xiao Nai : "......"

Bueno, él no podía interferir en la educación del niño por parte de su padre, así que era mejor para él hacerse a un lado y ver el drama. Xie Si ladeó la cabeza pensativo, giró la cabeza para mirar a Ji Xiao Nai y de repente reveló una sonrisa súper linda y dijo seriamente: "¡Mamá, por ti, Xiao Si definitivamente aprenderá el lenguaje de señas!"

Ignorando la palabra "mamá", la apariencia dulce y cariñosa de Xie Si simplemente derritió el corazón de Ji Xiao Nai, y no pudo evitar sonreír también, extendiendo la mano para frotar la cabeza de Xie Si al igual que Xie Dao Nian.

Xie Si aprovechó la oportunidad para abrazar su mano y le suplicó: "Mami, ¿quieres sentarte a mi lado y comer?" Ji Xiao Nai no podía soportar rechazar su súplica, así que asintió con la cabeza. Xie Dao Nian seguía sonriendo ante la interacción entre los dos y le hizo señas a Lu Li para que añadiera una silla entre él y Xie Si.

Lu Li trajo rápidamente una silla y Ji Xiao Nai se sentó entre Xie Dao Nian y Xie Si, a un lado estaba el bebé que decía "mamá" y al otro un hombre apuesto que se comportaba con elegancia, pero no sonreía, no pudo evitar sonrojarse ligeramente.

No tenía amigos en la mansión Xie, los hermanos pequeños, las tías y los tíos de Xie Ji Qing le eran todos muy indiferentes y le despreciaban cada vez que le veían. Después de tres años de ese tipo de vida, había olvidado lo cálido y animado que era comer con otras personas.

Sin darse cuenta, Ji Xiao Nai estaba tan ensimismado en sus pensamientos que el cuenco de gachas que tenía delante cayó en una lágrima de cristal y emitió un suave sonido 'tic'

Xie Dao Nian y Xie Si dejaron de moverse al mismo tiempo. Xie Si tiró cuidadosamente de la manga de Ji Xiao Nai y le preguntó con voz lechosa: "Mamá, ¿por qué lloras? ¿Está muy mala la comida?". Ji Xiao Nai recobró la conciencia e inconscientemente levantó la mano para secarse las lágrimas que tenía en la comisura de los ojos, pero una palma cálida y fuerte le detuvo su movimiento.

Xie Dao Nian le ahuecó la cara, sus dedos con nudillos rozaron las esquinas ligeramente enrojecidas de sus ojos, secando suavemente las lágrimas, sus ojos solemnes y amables, susurrando: "Sé bueno, no pienses en cosas del pasado. Te prometo que a partir de hoy no te volverán a hacer daño y nadie podrá volver a intimidarte. No llores, ¿de acuerdo?"

Ji Xiao Nai miró a Xie Dao Nian aturdido, mirando esos ojos extraordinariamente profundos y brillantes como estrellas, su corazón latió violentamente, la tristeza que sentía hace un momento desapareció sin dejar rastro, todo lo que quedó fue una intensa tensión y palpitaciones.

En ese momento, Xie Si, que se había quedado a un lado, se alteró y alargó la mano para coger la de Ji Xiao Nai haciendo un gesto de descontento: "¡Mamá, ¿por qué sólo hablas con papá y me ignoras?!"

La simple y directa queja del niño llegó a sus oídos, y Ji Xiao Nai despertó como de un sueño, entrando en pánico y apartando la mano de Xie Dao Nian, volviéndose para pellizcar la suave carita de Xie Si y sonriendo disculpándose. Xie Si no era tan difícil de engatusar como había dicho Xie Dao Nian, y Ji Xiao Nai le eligió un pequeño bollo en forma de conejo. El niño le perdonó rápidamente. abrazó y mordisqueó felizmente el bollo.

Ji Xiao Nai miraba fijamente a Xie Si, aparentemente cuidando del niño, pero en realidad intentando evitar las cálidas miradas de Xie Dao Nian detrás de él. No quería que Xie Dao Nian notara su pánico, así que sólo podía mantener la columna rígidamente recta, sin atreverse a mostrar el menor atisbo de vulnerabilidad.

Al ver esto, Xie Dao Nian sonrió débilmente y levantó la mano para acariciar su espalda, diciendo de una manera significativa y tranquilizadora: "No estés nervioso, no es como si fuera a comerte."

Ji Xiao Nai: "......"

Aunque dijo eso, como un omega que ya había sido "comido" por él una vez, Ji Xiao Nai todavía estaba muy nervioso. Afortunadamente, el resto del tiempo, Xie Dao Nian no hizo nada fuera de lo normal, Ji Xiao Nai era tímido y nervioso, no recordaba los malos recuerdos de los últimos tres años, y terminó la comida con una sonrisa en su rostro. Después de la comida, Xie Si siguió obedientemente al ama de llaves para aprender el lenguaje de signos, mientras Xie Dao Nian llamaba a Ji Xiao Nai y se preparaban para salir juntos a comprar ropa.

Ji Xiao Nai no quería molestar a Xie Dao Nian y quería comprar él mismo algunas piezas por internet, pero Xie Dao Nian era un poco terco e insistió en llevarle a la tienda a comprar. Ji Xiao Nai no pudo resistirse a él, así que sólo pudo aceptar su amable oferta una vez más.

Los dos fueron acompañados por Lu Li y salieron en el coche.

Crédito del capítulo: CasandraDeTroya🥰❤🥰❤

El esposo mudo del jefe discapacitado [ABO] FINALIZADO Donde viven las historias. Descúbrelo ahora