The Walking Dead : "Alone" (Daryl Dixon)

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Mi situación en cuanto a Daryl no cambiaba mucho, habían pasado par de días desde nuestra estancia en el CDC.
Una estancia por un lado buena y por el otro devastador, perdimos a Jacky.
Era hora de seguir nuestro camino y debíamos reubicarnos en los vehículos restantes.Daryl se iba en su moto; Carol, Sophia y los Grimes en el auto de Rick, mientras el resto íbamos en la casa rodante de Dale.
Andrea hablaba con Shane con respecto a su arma, Dale y Glenn miraban los posibles caminos a seguir y yo estaba alejada de todos mientras leía uno de los libros que tomé de Jenner sobre medicina. Miré por la ventana y vi a Daryl. Su rostro se mostraba calmado aún cuando el aire le golpeaba a cada momento, llevaba un rato mirándolo y noté cómo hizo una mueca al parecer por un insecto en la boca. Sonreí por ese gesto, traté de que nadie lo notará pero no fue el caso.
- Haré como que no te reíste tan lindo, ni tampoco que no lo hiciste por cierto hombre salvaje que viaja en una motocicleta - sentí a Dale a mi lado.
- ¡Dale!- me asusté - quien maneja.
- Shane- responde - creo que voy a comprobar el hecho de que del odio al amor solo hay escasos pasos.
- No sé a qué te refieres - me acomodé y dejé de mirar hacia afuera - además ni idea del amor, nunca me he enamorado y no pienso hacerlo.
- Bueno señorita ya veremos con el tiempo - se alejó y volvió a conducir.
-Será imposible que decida estar junto a alguien y más sí sigo con eso en mi mente - pensé.
La caravana se detuvo y todos descendimos para descubrir que está se había averiado. Estábamos rodeados de autos abandonados por sus conductores.
- Esto es como un cementerio - mencionó Lori - esto no me gusta.
- Lo sé - le dijo Rick-pero debemos arreglar esto para seguir.
- Por el momento podemos ver qué encontramos entre estos restos que nos pueda servir - argumento Shane-busquen mientras nosotros vigilamos.
Yo no esperé y traté de encontrar lo más necesario, gracias a dios hallé un botiquín con algunas provisiones y algo que necesitaba con urgencias... toallas sanitarias. Que puedo decir soy una mujer y tengo mis días. Agarré una mochila y eché todo lo que necesitaba, encontré también unas flechas y las guardé. Cuando pude darme cuenta estaba la mochila llena de cosas. Me dispuse a regresar cuando comenzaron a alertarnos de caminantes; miré en todas direcciones en busca de un escondite pero no lograba nada. Frente a mi apareció T-Dog con su brazo cortado corrí hacia este y con un trapo le intente cubrir la cortada. Estábamos en eso cuando un zombie se nos acercó y gracias a Daryl salimos librados. Sin hacer ruido tumbó a T-Dog y tiró a el caminante sobre él para tapar su olor; a mí me tomo y acasto de igual forma y mientras me agarraba por la cintura pegandome a él colocó otro muerto sobre nosotros. Sentí como los caminantes llegaron a nosotros y sin darme cuenta me aferré más a él, el notó como temblaba por el terror de ser encontrados y algo me comenzó a calmar...tres de sus dedos tocaban la piel de mi cadera directamente y los movía como si hiciera un masaje para calmarme. Me aferré a su chaleco y mordía mi labio cuando...
- No dejaré que te hagan nada - susurro con su voz gruesa - tranquila yo te cuido.
Mi corazón se aceleró y creo que no fue por el miedo solamente, esas palabras sonaban sinceras y lograron su cometido. Me fui calmando pero no dejé de aferrarme a él; la manada de caminantes había dezaparecido pero aún así el no me soltaba. Su agarré era fuerte hacia mí y puede que sonase estúpido pero, yo tampoco quería que me soltará.
Los gritos de una niña nos devolvieron a la realidad, era Sophia que era perseguida por un caminante. Daryl me ayudó a llevar a T-Dog junto a los otros mientras yo comencé a curarle.
- Lo mordieron- pregunta Shane apuntando lo con su arma.
- No- dije - se cortó su brazo con un cristal, así que ponte a buscar a Sophia y déjame tranquila.
Todos los demás salieron en la búsqueda de la pequeña Sophia, yo me dediqué a curar a T-Dog en lo que los demás habían salido.
- Pensé que iba a morir - confiesa T-Dog - y peor aún, pensé que él me iba a asesinar.
- Pero no lo hiciste y él no lo hizo - terminé de vendarle- nos salvó a ambos, cuando ambos no hemos sido personas de su agrado.
- De su agrado tú - volvió a hablar el moreno- ví como te trató y como te calmó.
-  Solo hizo lo cualquiera hubiera hecho - dije relajada.
- Yo no lo hubiera hecho - argumentó - salvarte sí, pero calmarte o incluso abrazarte como el lo hizo no lo haría, no por cualquier chica.
Ignore las palabras del moreno y caminé hacia Dale, todo estaba tranquilo demasiado para nuestro gusto.
- Creo que ya sé lo que te sucedió- me susurró el anciano - eras como Carol verdad.
- Se podría decir que sí - afirmé en voz baja - pero mi mamá era la verdadera víctima hasta que yo tuve la edad y ella sufrió ese accidente.
- ¿Cuando...que edad tenías?
- La primera golpiza, quizás más joven que Carl- suspiré - aumentaron el doble a los doce con el accidente y no se detuvieron hasta que se convirtió en caminante y devoró a mi madre.
-Muchas personas descuidan lo bueno y otros desean tenerlo - colocó una mano en mi mejilla y limpio una lágrima rebelde - decir que lo lamento sería mucho y algo tardío, solo puedo decir que estoy orgulloso de que nunca perderás esa luz en tu vida.

Sentía dolor al escuchar a Dale hablar, cómo decirle que esa luz ya había sido apagada hacía mucho tiempo...