The Average DC Experience

#68 Buenas noches

"Ahora, di buenas noches..." Comenté mientras apretaba el gatillo y veía al gángster caer al suelo, echando espuma por la boca y con espasmos cuando golpeaba el piso de concreto.

"Haz lo peor que puedas, dice...", comenté con una risa, rodando los ojos debajo de mi casco. Negué con la cabeza ante el matón inconsciente y suspiré con exasperación.

Yo no maté al gángster. De hecho, ni siquiera puse suficiente energía en la bala para noquearlo, pero se desmayó solo por la conmoción y el miedo. Tanto por su bravuconería.

Encontrarme con el tipo fue un golpe de suerte ya que estaba en una de mis patrullas habituales para golpear a los matones y mejorar mis habilidades de combate. Los matones de Black Mask todavía estaban en mi trasero, así que me acostumbré a perseguir a su banda cada vez que salía.

Encontrar al tipo que me disparó en ese entonces fue una ventaja, y me olvidé de todo lo demás cuando vi al matón y comencé a perseguirlo con determinación.

no mentiré Honestamente, no sabía cómo reaccionaría si me volvía a encontrar con el tipo después de que fuera a prisión, pero estaba sorprendentemente tranquilo y ni siquiera sentí la necesidad de matarlo.

Sin embargo, mi mezquindad no me permitió noquearlo y entregarlo al GCPD. No. Eso sería demasiado fácil. Decidí jugar con él en su lugar. Bastante maduro, ¿verdad?

Honestamente, no sabía si era mi entrenamiento con Benjamin el que finalmente se había activado o si nunca odié al tipo lo suficiente como para matarlo en primer lugar, pero ya ni siquiera tengo ganas de torturarlo.

'No es como si pudiera matar al triste pedazo de mierda incluso si quisiera...' reflexioné, sonriendo amargamente bajo mi máscara mientras me giraba hacia el cielo, mirando a la sombra humanoide de orejas puntiagudas de pie sobre una repisa del techo cercana.

Levanté la mano con el arma y agité la mano hacia la figura sombría, y sus brillantes ojos blancos se estrecharon hacia mí mientras se daba la vuelta y se alejaba, desapareciendo en la oscuridad.

'Básicamente podía escuchar la música teatral y amenazante sonando de fondo...' Me reí entre dientes, sacudiendo la cabeza y girándome hacia el matón inconsciente cuando Batman se fue.

'Ni siquiera vale la pena el esfuerzo...' Fruncí el ceño cuando noté una mancha húmeda en los pantalones del matón y agradecí a mi estrella de la suerte que el casco antidisturbios viniera con un sistema de filtrado de aire.

Activando el poder de mi computadora personal, envié un aviso anónimo al GCPD sobre el tipo y suspiré, volviéndome para irme ya que todavía tenía habilidades para trabajar.

...

En algún lugar de Gotham

Cassandra frunció el ceño mientras miraba a los ojos de la pelirroja parada frente a ella. Conocía y recordaba a la mujer y la identificó como ex miembro de la Liga de Asesinos.

Sin embargo, no sabía por qué la mujer estaba aquí en Gotham y por qué apareció ante ella.

—Hola, Cassandra. Ha pasado un tiempo —saludó la serpentina pelirroja, sonriendo mientras miraba a la joven fugitiva con una expresión que uno podría confundir con simpatía si no la conocían.

Cassandra no respondió y simplemente miró a la mujer con aparente cautela, no es que ella pudiera responder verbalmente incluso si quisiera, ya que no sabía cómo hablar.

Como parte de su entrenamiento para convertirse en la máxima asesina, David Cain, su padre, no le enseñó a hablar y solo se comunicaba con ella a través de acciones. Pero eso no fue ni aquí ni allá.