Freedom [ AlanGaipa ]

[7] City

  Cuando estas enamorado y ves a los ojos de la otra persona, tus ojos se vuelven una ciudad de noche, llena de brillo, llena de luces, un verdadero espectáculo para los ojos de tu amado o tu amada.

  Era un espectáculo para Gaipa poder mirar los ojos de alguien que le sonreía sin más y tan solo demostraban una pureza con aquel brillo, como si no fuera una persona capas de lastimar una hoja de algún árbol. —¿Qué ocurre?— Preguntó Alan aún con su sonrisa. —Te ves... increíble.— El contrario alzó una de sus cejas sin poder entender del todo. —¿A qué te refieres?—. Gaipa volvió a mirar aquellos ojos llenos de brillo y sonrió para luego envolver el cuerpo del mas alto en sus brazos. 

Alan prefiró no hablar y tan sólo corresponder aquel abrazo mientras acariciaba sus brazos. —Gaipa...— El nombrado no habló sólo reforzó el abrazo mientras dejaba que su mente y su cuerpo tenga un poco de relajación y respiro.

—Jim ¿este era tu plan?—. —Ya te dije que no, pero salió mejor que lo esperaba.— Wen aún abrazado con su pareja sonrió mirando la escena. —Me alegra poder ver a Alan feliz.—. —Me alegra que Gaipa también se esté dando una oportunidad.— Jim desde su lugar miró a su pareja dejando un beso en su cabeza. —Vamos a casa, Wen.—

—P'Wen.—. —Liming ¿cómo estás?— Heart miró como el barrio estaba decorado y le tocó el brazo a Ming para señalarle el árbol de navidad. —Mhm, el árbol normalmente lo hacen los vecinos con cosas de decoración que sobran de la navidad anterior.— Heart asintió tomando la mano de su novio esperando para que este se despidiera.

—Tío Jim ¿te irás a casa? ¿puede venir Heart?— Jim miró al chico quien aún miraba hacia sus alrededores. —Ming, mejor llevalo a casa, ya es muy tarde.— Wen sonrió de lado y con sus manos le comunicó a Heart que si sus padres no estaban podían ir a su departamento, pero que no hicieran cosas extrañas. —Ming, pueden ir a mi departamento, sin embargo no hagan cosas que saben que no deben hacer ¿okay? A la mañana siguiente lleva Heart a su casa y tú ve a la escuela.— Ming le sacó la lengua a su tío y tomó las llaves de Wen caminando hacia el lo que era primero la casa de Heart para buscar ropa y luego al departamento de Wen.

—Wen, se supone que Ming es mi sobrino y está bajo mi cuidado.—. —Jim, si vas a tener a tu sobrino siempre bajo tu falda, entonces no lo dejes salir nunca, Ming ya tiene 18 años y va para 19, debes dejarlo vivir su vida al menos.— Aquella pareja miró por última vez a la que se había ido y a la que aún estaban en un momento romántico frente al árbol de navidad y se fueron del lugar.

—Es la segunda vez... que me siento seguro en los brazos de alguien, la primera vez fue con mi mamá.— Alan se separó un poco para acariciar las mejillas del contrario y acomodar su cabello. —Es la primera vez... que siento las ganas de protejer a alguien de todo el mal que existe en este mundo.— Gaipa sonrió y acomodó la camisa de Alan que estaba bastante desordenada debido a lo que estaba haciendo en el árbol.

—No te puedo prometer la luna y las estrellas, pero puedo hacerte vivir la aventura más grande de tu vida.— El de menor estatura tomó las manos del contrario y beso estas soltando un suspiro. —Creeme... ya me la estas haciendo vivir.— Fue entonces que ambos se retiraron hacia el departamento de Alan tomados de la mano.