-Está en lo cierto- dice no muy a gusto y yo sonrío satisfecha con mi cometido- bien, como iba diciendo lo que hoy haremos será analizar vuestra capacidad de elección ante diferentes situaciones, por ejemplo, para un baile- de repente las mesas desaparecen y aparecen grandes percheros con muchos, muchos, muchos vestidos de todo tipo de color, forma y estilo, todas miran con asombro y admiración pero yo con aburrimiento y repulsión- veamos de lo que son capaces- nos anima y yo voy mirando a ver si por casualidad hay algún traje de dos piezas o por fortuna un vestido negro, pero, oh, qué sorpresa no hay de ninguno, me paro a un lado de la clase con los brazos cruzados a la espera de que terminen de una vez, cosa que pasa al cabo de un par de minutos- veamos lo que habéis escogido- se acerca a cada una y elogia la elección de cada una hasta que por fin se acerca a mí y me mira con decepción- ¿y tu vestido?-
-No he encontrado lo que yo usaría, ah no, es verdad, nunca he ido a uno porque no me gusta usar ese tipo de vestidos- digo con desgana
-¿Y porqué no te gustan?- pregunta una de las chicas
-Porque simplemente tenemos que vestir con ropa recatada que impide la movilidad completa de una, con colores demasiado llamativos, zapatos diseñados para torturar los pies de una y para agradar la vista de los príncipes y caballeros que nos ven como algo demasiado frágil, delicado y que se debe de proteger, si yo fuera a un baile iría con un traje cómodo para si se necesita luchar poder hacerlo sin preocuparme por si me voy a tropezar con tantos vuelos del vestido- digo mirando a cada una- y por cierto, no hay vestimenta negra, dentro de esas situaciones debería estar también el asistir a un funeral, no creo que sea adecuado asistir a un lugar así con colores tan llamativos y alegres como todos los que he visto- ante esto último miro a Dovey- ¿o las princesas que serán futuras reinas no acuden a estos actos para honrar a los hombres caídos?- le miro y hago un puchero a modo de burla
-Cierto, también asisten- dice nerviosa
-Pues deberían saber qué escoger para esa ocasión- sonrío satisfecha al saber que la he sacado de su zona de confort
-Ya solucionaré eso, ahora quiero que cada una escoja un vestido según su color adecuado y se lo pruebe- todas asienten y se van todas a la zona de probadores y yo me quedo donde estoy hasta que se acerca y me mira de brazos cruzados- ¿y bien?, ¿no vas a hacerlo?-
-Ya lo dije, no hay ninguno de mi agrado y no me pienso vestir con uno de esos vestiditos cursis a no ser que sea un traje- me miro las uñas como si fuera lo más interesante
-Me temo que no va a ser posible, si no lo haces por ti misma pues dejaré que las hadas lo hagan por ti y yo escojo por ti- me acerco y le miro desafiante
-Inténtalo-
Tierra trágame y no me sueltes por favor, estoy horrible, al final ha conseguido lo que ha querido, por culpa de las hadas que no han parado de morderme a pesar de que Lucian las ha intentado apartar de mí lo han inmovilizado y por poco no me arrancan la ropa y me han escogido un horrible vestido violeta patel demasiado ajustado que casi me corta la respiración y con unos incómodos tacones, encima tengo que llevarlo todo el día.
-Querida, estás preciosa- me mira con orgullo
-Querrás decir horrible, esto es realmente ridículo- me quejo, mira mi cabeza y sé lo que piensa- ni lo sueñes, no pienso quitarme el pañuelo-
-Si no lo haces te irá mal-
-Atrévete a quitármelo y lo lamentarás- le amenazo con seriedad, de repente me lo quitan las estúpidas hadas y yo las miro enfurecida- devolvedme el pañuelo- les ordeno y se niegan y yo me cabreo más
-Te lo devolveré al final del día- justo suena la campana de cambio de clase y tomo mis cosas y me largo de la clase mientras aprieto los puños y clavándome las uñas en la palma de las manos haciéndome sangre, en cuanto me voy acercando a la escuela del Mal veo a los demás reírse aumentando mi cabreo y trato de contener mi energía hasta que llego a la clase
El resto del día lo paso aguantando burlas en cada clase por parte de los Siempre y de los Nunca y ahora me dirijo a mi última clase, Talentos especiales con Lady Lesso. A este punto ya he optado por andar sin los zapatos de tacón ya que me estaban haciendo daño. Entro en la clase y la profesora me ve con sorpresa y se dispone a decir algo pero no estoy del mejor humor.
-Por favor, se lo pido, no quiero ningún comentario con respecto a mi vestimenta, es denigrante, ridículo y ya tengo suficiente- le pido cansada y se queda callada, llegan los demás que siguen con lo mismo hasta que Lesso da un golpe contra el suelo con su bastón llamando la atención de todos
-De acuerdo, en esta clase quiero que me enseñen qué es lo mejor que tienen y cómo usarlo contra vuestros enemigos o para cuando encuentren a su némesis, quiero ver todo lo que tengan y veamos si son capaces de impresionarme- nos desafía pero yo no estoy de humor y no me encuentro capacitada para usar mi energía ya que sería una catástrofe, todos intentan sorprenderla o mostrarle sus cualidades, algunos casi lo consiguen o han sorprendido un poco, mientras que otros bueno, no han tenido esa suerte y como siempre yo soy la última- Noctem, tu turno, muéstrame lo que tienes-
-Me temo que no me encuentro en disposición para poder enseñar mis capacidades- trato de mantenerme neutral
-Me temo que no tienes otra opción- finge tener pena
-No va a poder ser- tenso la mandíbula conteniendome
-A lo mejor es que no puede hacer nada- pongo los ojos en blanco al escuchar la voz de la misma que ayer se metió conmigo- pero para ocultar que no tiene nada de especial se hace la dura, ¿no es así, Siempre?- me ve con burla y los demás se ríen
-Deja de meterte con los demás para hacerte sentir especial o superior cuando en la realidad no lo eres- me burlo aún estando en modo neutral, creo que eso le ha dolido
-Cállate princesita, al menos no he sido desterrada lejos de mi familia por haberles decepcionado-
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Nunca+Siempre = Lily (Lady Lesso x chica)
RandomEn un mundo donde todo personaje de cuento, bueno o malo antes de ser relatado necesita ir a una escuela para cumplir su destino como dicta la ley del mundo de los cuentos. Donde no puede haber un puente que conecte ambos lados a partes iguales, bue...