Capítulo 13

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- ¡Tengo las batas chicos! -exclamó Eloise llegando donde estaban ellos, por lo que Colin se separó bruscamente de Penelope sin mediar palabras y no se había odiado nunca más por ello. Estaba maldiciendo a su hermana en todos los idiomas que había escuchado en sus viajes.

- Tan oportuna como siempre Eloise -le dijo con mala cara.

- ¿Cómo has dicho?

- Nada El,no me hagas caso. Vosotras iros a secaros que no podéis enfermar, yo me quedaré un rato aquí -dijo Colin sentándose en la orilla.

- ¿Desde cuándo tú nos tienes que decir lo que debemos hacer Colin? -reclamo Penelope.

- Desde que soy el único hombre a tres metros vuestras. Creo que eso prevalece -Eloise y Penelope lo miraron de tal forma que creía que lo habían asesinado, por lo que Colin carraspeó y siguió hablando- No creo que os apetezca ver cómo me baño en el lago, o alguien quiere ver esa estampa -dijo de forma vacilante hacia Penelope.

- ¡Colin Bridgerton!

- Tranquila Eloise que sabes que lo digo de broma. Baja las armas.

Aunque hubiera sido de broma eso había hecho que Peneloope se pusiera tan roja como el color  de la sangre.

- Vamos dentro El -dijo casi escondiéndose de Colin, parecía que le daba hasta miedo.

Colin vió como su hermana y su futura esposa se alejaban y él se zambulló dentro del lago. No podía dejar de pensar en la estampa de Pen y se odiaba a sí mismo, porque era verla y santo Dios, quería mandar al infierno todas las reglas del cortejo. Por mucho que ella le dijera que no, siempre había algo en su mirada que le pedía que lo hiciera.

- ¿Pero se puede saber qué os ha pasado? -un preocupado Anthony en la puerta esperándolas.

- Sólo nos estábamos divirtiendo y nos hemos caído al lago, nada importante.

- Yo no lo veo así -dijo Kate- Y más cuando Penelope sigue todavía un poco ‘convaleciente’ Y si el frío se le mete en el pecho y deja de respirar que haríamos?

- Colin sacarse los pulmones y dárselos si fuera necesario -dijo Anthony.

- Así no me ayudas vizconde -se dirigió Kate a su marido- En serio, ir a daros un baño caliente y cambiaros, en un rato estará lista la cena.

Ambas asintieron y mientras que subían las escaleras no pudieron evitar reírse.

- ¿Te has dado cuenta que parecemos sus hijas? -Eloise a Pen.

- Tu eres su hermana y su cuñada, pero yo ni eso -respondió Penelope pero se detuvo en seco porque sintió un golpe seco en el pecho, como si le hubieran cortado la respiración por unos segundos, algo que Eloise notó ya que se tuvo que apoyar en ella.

- Pen dime que estás bien -dijo Eloise.

- Si, solo creo que necesito descansar un poco más y no tener exceso de emociones. Creo que voy a secarme y tumbarme un rato antes de la cena si no os importa.

- No te preocupes Pen , le diré a alguien que te suba la cena, tú descansa -sonriendo.

Eloise fue hacia su habitación y Pen se metió en la suya. Su pelo estaba hecho un desastre a causa del agua, por lo que tuvo que quitarse lo poco que tenía recogiéndolo y peinarlo de nuevo. Menos mal que se había llevado cosas de su casa, sino estaba perdida.

Mientras lo peinaba no podía parar de pensar en las palabras que le había dicho Colin ‘Eres el aliento que le falta a mis pulmones para poder respirar, sin ti no puedo’ No quería emocionarse, pero de verdad sería en serio aquello? No, no podía serlo. Colin la había ignorado ¿Por qué ahora iba a ser diferente? No lo sería.

Flawless my dearDonde viven las historias. Descúbrelo ahora