El Amor hace fuertes

Un nuevo camino

Ha pasado un año y se puede decir que por fin nuestros protagonistas viven en paz, ya que durante este tiempo han podido conseguir solucionar todos los problemas del pasado porque por un lado Jeremy y Elena están en la cárcel y han sido condenados a cadena perpetua, por otro lado el padre de Isabel y de Rocky se suicidó cuando se descubrió todo lo que había hecho y ellos se marcharon de la ciudad para empezar de cero en un lugar nuevo. Por el lado de nuestros protagonistas todo va perfecto, James y Verónica son felices en su amor, Luca y Alex hablaron con sus padres y estos están de acuerdo con que quieran tener una relación y por último Diego y Tomás han estado preparando su boda porque en su momento no pudieron hacerlo.

—Wow amor, no me creo que en dos horas se casen nuestros padres por fin— sonrió mirándolo.

—Yo estoy igual princesa, estoy demasiado nervioso— sonrió y la abrazó por la cintura.

—La verdad es que no eres el único James, nuestros padres están bastantes nerviosos también.

—Es que es normal Roni, dentro de media hora Diego va a entrar en esta iglesia y luego entrará Tomás.

—Después de todo lo que hemos pasado, es raro celebrar algo que nos haga tan felices— sonrió.

—Ya nos lo merecíamos amor— dijo con una sonrisa y besó sus labios.

—Tienes razón James— sonrió y correspondió al beso y justo en ese momento empezó a sonar la música y Diego entraba en la iglesia.

Diego llegó al altar con una sonrisa, pero a la vez se encontraba nervioso y sobre todo cuando vio entrar a Tomás

—Muy buenos días a todos, estamos hoy aquí para unir en matrimonio a esta pareja que por motivos de la vida no pudieron casarse antes— miró a los invitados —así que si no hay inconvenientes empezaré con esta celebración— sonrió —Tomás, acepta amar y respetar a Diego hasta que la muerte os separe.

—Si acepto— sonrió mirándolo.

—Diego, acepta amar y respetar a Tomás hasta que la muerte os separe.

—Si acepto— sonrió mirándolo.

—Muy bien, entonces ahora entregaros los anillos— sonrió.

—Yo Tomás, te entrego este anillo a ti Diego como prueba de mi amor hacia ti— sonrió y él puso el anillo.

—Gracias Tomás— sonrió y cogió el otro anillo y lo miró —Yo Diego, te entrego este anillo a ti Tomás como prueba de mi amor hacia ti— lo miró y le puso el anillo.

—Gracias Diego— sonrió.

—Después de esto, por el poder que se me ha dado por la voluntad de Dios y si no hay nadie que se interponga a esta unión yo bendigo esta unión para siempre— sonrió —así que ya puede besar a su marido.

Dicho esto Tomás y Diego se besaron y todos los invitados empezaron a aplaudir de alegría.

—VIVA LOS NOVIOS— gritó con una sonrisa.

—VIVAAAAAAA— respondieron todos los demás.

1 hora después

—Bueno hijos míos portaros bien mientras que nosotros estamos en nuestro viaje por favor— sonrió mirándolos.

—Tranquilo padre— sonrió —Yo cuidaré de Roni, no la dejaré hacer nada raro.

—Oye, que sigo aquí y os estoy escuchando— sonrió —pasaos lo bien papis.

—Tranquila hija, sabemos que te portarás muy bien a que sí— la miró.

—Si padre, no te preocupes— besó su mejilla —anda iros, ya que perderéis el avión

Diego y Tomás metieron la maleta en el coche y luego se fueron al aeropuerto para coger el avión.

—Bueno amor, que te gustaría hacer— lo miró.

—Esto mi linda princesa— sonrió la acercó a él y la empezó a besar.

—Me parece muy buena idea James— correspondió al beso con una sonrisa.