CAPÍTULO 22

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El coche estaba en completo silencio, ni siquiera se atrevía a mirar por el espejo retrovisor para ver a sus hijos. Sabia que ellos no querian estar con su padre y ella no queria alejarse de ellos.

-Ya hemos llegado –Miro atraves del cristal la que habia sido su casa

-¿Por qué tenemos que quedarnos con papá? –Liam la miro molesto

-Cariño, porque su padre tambien quiere estar con ustedes – Calle lo miro con tristeza

-Eso es mentira –Alex se cruzo de brazo –La otra vez solo lo vimos dos veces

-No se pongan asi, solo serán unos dias – Calle suspiro –El domingo tienen un partido por la mañana asi, que tendra que llevarlos. Después se vendrán conmigo a casa y haremos una gran barbacoa

-¿De verdad? –Liam sonrio ilusionado.

-Claro, estara la tía, Mario, Lucia, Laura, sus hijos – Calle sonrio levemente –Incluso le dire a su tia Paula y a Juanpa

-¿Y Poch? –Alex fruncio el ceño

-Claro –ella miro a su hijo con ternura – Poch no puede faltar.

Unos leves golpes en la puerta la sobresaltaron, Sebas estaba fuera, acompañado por la niñera. Calle abrio su puerta y después se dirigio a la parte trasera para sacar a Damian, la niñera se dio prisa en tomarlo, Sebas abrio la otra puerta trasera y espero a que sus hijos mayores bajaran del coche.

-Tienen el partido el domingo a las once – Calle lo miro a lo ojos –No lo olvides

-No lo hare –sonrio –Y me quedare a verlos

-¿Te han absorbido los marcianos? – Calle se acerco a Damian y le dio un beso en la frente –Se bueno cariño –despues miro a sus otros hijos –Vigilen a su hermano y portense bien.

-Si mamá –Liam asintió como todo un hombrecito

-¿Dónde vives ahora? – Sebas pregunto serio

-¿Y a ti que te importa? – Calle fruncio el ceño

-Tengo derecho a saber donde estan mis hijos –El apreto la mandíbula –Y si estan bien cuidados

-Ja, no me hagas reir ¿Quieres? –camino hacia el coche y abrio la puerta –Nos veremos el domingo

Subio a su coche y se dio prisa en salir de alli, no pudo evitar que algunas lagrimas abandonaran sus ojos. No queria alejarse de sus hijos y menos si los dejaba con Sebas, pero no podia hacer nada para impedirlo. Cuando llego a su casa aparco el coche en el garaje y después comenzo a caminar por su calle. Aun era temprano para ir a la casa de Poché, pero la verdad es que no se veia con fuerzas de estar en su casa ella sola.

Como siempre se maravillo al ver la casa de Poché mientras se acercaba, subio las escaleras del porche despacio y después toco el timbre. La puerta se abrio a los pocos minutos y Poché le sonrio.

-¿Estas bien? –Fruncio ceño

-No – Calle dio un paso adelante y se abrazo a ella, rodeando con los brazos su cintura

-Ya esta – Poché acaricio su cabello con una mano mientras con la otra la abrazaba –Pronto estaran de vuelta

-Lo se – Calle se alejo un poco de ella y la miro a los ojos –Llegue temprano.

-Mejor – Poché sonrio y le dio un leve beso en los labios –Podemos cocinar juntas?

-Soy tu invitada ¿y vas a ponerme a cocinar? – Calle sonrio y la observo cerrar la puerta. Por un momento se sintio incomoda, estaban solas, en su casa y hoy no habria interrupciones.

UNA NOVIA PARA MAMÁ (ADAPTACIÓN)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora