CAPÍTULO 31

4K 255 33
                                    

-Augh –llevo la mano a su cabeza después del chocazo con la parte de arriba del horno, arrastro sus rodillas por el suelo, deslizandose hacia atrás y saliendo de aquel artilugio. Suspiro sentandose en el suelo, dejo el trapo a un lado y el producto de limpieza al otro lado –Muy bien ¿Y ahora que limpio?

Miro a su alrededor. ¿Qué tal nada?

Habia limpiado la casa por completo. Busco algo a lo que dedicar su tiempo para olvidarse del resto del mundo y lo consiguio. Hasta el punto de quedarse sin un rincon de esa casa que poder limpiar. Se levanto del suelo y se apoyo en la encimera, miro el frigorifico y sonrio. Lo abrio y saco helado de dulce de leche, cogio una cuchara y se dirigio al salon.

Se sento en el sofa, tomo el mando de la television y la prendio, busco un canal de dibujo animados y comenzo a comer el helado.

Un plan estupendo para un sabado por la tarde.

Seria estupendo si sus hijos y Poché estubieran sentados a su lado.

- Poché –Pronuncio su nombre despacio -¿Qué estaras haciendo ahora? – dejo el helado en la mesilla y tomo el telefono, las ultimas dos llamadas perdidas que tenian de Poché era de algo más de media hora. Respiro profundamente –Tarde o temprano tendremos que hablar –suspiro y pulso su número, cuando iba a dar a llamar el timbre la interrumpio.

Se levanto del sofa y dejo el telefono sobre este, camino tranquilamente hacia la puerta y la abrio.

-¿Y ahora que? –rodo los ojos cansada -¿No tendrias que estar disfrutando de tu fin de semana con los niños?

-Prefiero estar hablando contigo –Y Sebas paso a dentro

-¡No te invite a entrar! –cerro la puerta de mala gana y lo siguio -¿Quieres decirme que venistes a decirme y largarte?

-¿No me invitas a tomar nada? –El sonrio –Tu nunca has sido desagradable con las visitas

-Tu no eres una visita –bufo molesta –Eres una escoria

-Pues está escoria es tu marido -.el apreto la mandibula –Y no te vas a deshacer de mi tan fácilmente

-Eras tu el que queria deshacerse de mi ¿recuerdas? –camino hacia el sofa al oir su telefono sonar, miro la pantalla. Poché. Lo silencio –De mi y de los niños

-Esta bien, me equivoque –el se acerco a ella –Lo siento

-Muy bien, está bien ¿ya? –lo miro con ambas cejas levantadas –Ahora vete y pasa algo de tiempo con tus hijos, a ellos aún puedes recuperarlos.

-A ti no te he perdido – él la miro a los ojos

-Te equivocas –sonrio -.Me perdiste hace mucho Sebas, lo que pasa es que ninguno de los dos nos dimos cuenta

-¿Te crees muy superior ahora? –el se desabrocho la chaqueta –Ahora que eres una escritora famosa, que te acuestas con una entrenadorsucha de futbol. Pues no dejas de ser más que una puta que esta viviendo la vida con una mujer que no es su marido.

-Se acabo –silencio de nuevo su telefono, ahora era su hermana –No tengo por que aguantarte eso. Largo.

-¿Me estas echando? –y dio un paso hacia ella

-Vete Sebas – Calle lo miro a los ojos –Por las buenas

-¿Y si no? –el sonrio

-Llamare a la policia –comenzo a marcar en su telefono, pero este se vio lanzado al suelo por la mano de el -¡¿Te has vuelto loco?!

-¡Tu te has vuelto loca! –la agarro del brazo -¡Soy tu marido! ¡Y a mi no vas a faltarme el respeto! ¡Durante años vivimos juntos, te di todo lo que necesitabas! ¡Y ahora vas a regresar a casa con tus hijos y conmigo!

UNA NOVIA PARA MAMÁ (ADAPTACIÓN)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora