La revelación

88 6 5
                                    

Los dos Caballeros bajaron al suelo para estar cara a cara con sus antiguos compañeros, una vez más.

Shun: "¿Reda? ¿Spica? 

June: "¿Por qué regresaron?"

Reda: "¿De verdad creíste que ya te habías librado de nosotros? 

Spica: "Ya te lo dijimos antes: no volveremos al Santuario sin tu cabeza, Shun"

June: "¡Shun!", dijo tomando su brazo y poniéndose detrás de él.

Shun: "Tranquila, June. No te preocupes. Escuchen, ya peleé contra ustedes y créanme que no me hizo ningún bien haberlos lastimado. Y no quiero volver a hacerlo, así que será mejor que se vayan"

Spica: "Jajaja ¿ves? Con esa actitud tan suave nunca podrías ser un verdadero Caballero del Zodíaco. Ahora prepárate porque te haremos sufrir aún más que la otra vez", dijo mientras preparaba su cadena para atacar.

Seiya: "¡Shun! ¡Déjame ayudarte!", exclamó queriendo intervenir.

Shiryu: "¡No, Seiya!", dijo deteniéndolo. "Esta es una batalla exclusiva de Shun. No es nuestro deber intervenir"

Si bien no estaba del todo de acuerdo con su amigo, al mismo tiempo entendió que tenía razón. Por lo que desistió de intervenir.

Shun: "June, quiero que vayas con Saori y las demás chicas. Manténganse juntas y lejos de esto"

June: "¡¿Estás loco?! ¡No me pienso ir de aquí! ¡Pelearé contigo!"

Shun: "¡Escucha! Ya te lastimaron una vez porque ellos querían desquitarse conmigo. Tú no eres su blanco, soy yo. Y no voy a permitir que te vuelvan a lastimar. Así que esta vez quiero que protejas a Saori y las demás", dijo mirándola a los ojos con la más absoluta determinación.

June lo miró fijamente y se dio cuenta de que hablaba en serio.

June: "Esta bien, Shun. Haré lo que me pides. Pero te advierto que si se pone difícil, vamos a intervenir. Aunque no quieras", advirtió mientras estaba de espaldas a su pareja.

Shun: "Lo sé, June. Y gracias por comprender".

La guerrera obedeció al Caballero de Andrómeda y se unió a Saori y las demás mujeres para protegerlas, mientras que los demás Caballeros se unieron a ellas.

Shun: "Muy bien, ya estoy listo para luchar contra ustedes. Ataquen cuando gusten", dijo mientras se quitaba el saco y la corbata de su traje.

Reda: "Jaja te advierto que esta vez no te será tan fácil. Deberías ponerte tu armadura, al menos. ¡La armadura que por derecho era mía!", dijo antes de lanzar la única cadena que tenía.

Spica: "¡VE POR ÉL, CADENA DE LA NEBULOSA!", gritó antes de que lanzara su única cadena también.

Ambas cadenas fueron en dirección a Shun, quién las esquivó saltando hacia arriba. Pero las cadenas comenzaron a seguirlo. Shun sabía que esta vez no iban a cometer los mismos errores que en aquella oportunidad, por lo que se dedicó a usar su velocidad para esquivar el ataque de las cadenas de sus antiguos compañeros de armas. Hartos de no haber podido atacarlo, Reda y Spica llamaron a sus cadenas. Nuevamente estaban frente a frente.

Reda: "Vaya, insistes con tu infantilismo de no querer pelear. Eso será tu perdición, ¿lo sabes, Shun?"

Shun: "Yo solo alzo mis puños para proteger a las personas que amo y para defender a Atena. No lo hago por gusto personal ni tampoco para probarle algo a los demás"

Nunca Es TardeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora