DESENLACE

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Hola queridos lectores, este va a ser el único capítulo que tendrá un salto de tiempo largo y les pido mil disculpas por eso. Disfruten del capítulo.

——— Hasta que la muerte nos separe... ———

Shyla...

2 meses desde que di a luz...

Dos meses en los que han pasado cosas tan rápido que no espere verme así hoy.

Les voy a resumir un poco de lo que pasó...

Después de que termine de dar a luz a mi bebé, me sacaron de la sala de parto y me llevaron a una de las tantas habitaciones del hospital, y me dejaron descansar para recuperar las fuerzas que había perdido por el parto.

Horas después me levanté por el llanto de un bebé en el cuarto. Gyo la sostenía entre sus brazos moviéndola delicadamente para tratar de calmarla, pero ella seguía llorando con fuerza. Me quedé viendolos un buen rato, se veían tan bonitos juntos. Los dedos de Gyo acariciaban lentamente la carita de Delia, y le hacía sonidos raros con un casi puchero en su boca.

- creo que tiene hambre - hable de una vez por todas.

- ooh, ya despertaste - dijo acercándose - intenté dejarte dormir más tiempo, pero creo que en realidad tiene hambre - finalmente dejando un beso entre mis cejas.

Me acerco a la bebé para sostenerla y lo hice, era tan frágil y tan aguadita que me dio miedo hacerle daño. La cargué con cuidado y le pedí que me ayudara acomodando la almohada en mi espalda para poderle dar de comer. No sabía cómo hacerlo pero lo intente, la recosté en mi brazo derecho y con mi otra mano saque mi seno derecho para luego ponérselo en la boca. Inmediatamente se prendió a él y succionaba despacito.

Abrió sus ojitos y pude ver unos muy parecidos a los míos, eran grandes y pestañudos, tenían un color avellana increíble, pero un poco más oscuros. Tenía cejas tupidas y pobladas al igual que su cabello, era abundante en su pequeña cabecita y mis dedos entraban entre las pequeñas hebras de cabellos que estaban en su cabeza.

...

Una semana después de dar a luz, estábamos en casa de mi madre y así mismo mis tres amigos, Raphael, mi madre y José estaban en la sala. Gyo no estaba porque había salido con Isaac a comprar unas cosas para lo que mi madre iba a hacer, no tenía idea de porque iba a cocinar algo grande si solo estábamos los conocidos. Sin embargo no pregunté nada y deje que su felicidad con origen desconocido siguiera en pie.

Ella estaba caminando de un lado para otro, diciéndole algo a uno y al otro, ordenando les que empezarán a ir a comprar cosas para la comida y actuaba de manera extraña, al igual que mis amigos, ellos nunca se encerraban a solas en la habitación conmigo, siempre estábamos en la sala porque era más espacioso, pero sin embargo ellos querían estar acalorandose en la pequeña habitación que solía ser mía de pequeña.

Conversando de cosas estúpidas, dándole de comer a Delia, y haciendo bromas de mal gusto, racistas o agrias, decidí preguntar lo que me había estado enojando desde hace horas.

- que mierda está pasando que no quieren decirme?

- de que hablas Shyla? No pasa nada jaja - dijo una Sol completamente nerviosa.

- no, desde la tarde están que hacen cosas raras frente a mi, como si yo fuese una bruta que no se da cuenta de las cosas - dije sentando erguida con mi bebé en brazos.

- enserio no pasa nada, sólo que estamos emocionados por... La comida que va a hacer tu madre! - dijo Erick.

- sí!, eso mismo, gracias por recordármelo Erick ahora estoy feliz de nuevo - exclamó Sol.

IRREVERSIBLE+18 [ COMPLETO ] - En EdiciónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora