Jeon Jungkook era un omega... poco convencional.
No lo malinterpreten, seguía siendo como una bella flor, pero por circunstancias de su vida... se vió obligado a comportarse fuera del patrón de lo que era "un omega normal".
Por su contra parte, Kim...
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El celo de Taehyung: Parte 2 (OJO--> escenas sexuales MUY subidas de tono, se recomienda discreción🔞)
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Si Jeon Jungkook pudiera elegir una cosa que pudiera saborear durante toda su vida, sería sin duda alguna: la lengua de Kim Taehyung cuando estaba en celo.
En si, aquel falo sin hueso era tan dulzón como una paleta de fresas, como comer un pastel de frutos rojos a mascadas, o aun mejor, como una paleta fría de frutos del bosque en pleno y caluroso verano...
Si, Kim Taehyung tenía así de deliciosa su boca y saliva en estos momentos, por eso Jungkook estaba devorando con un necesitado beso a su lindo y sabroso omega.
El beso ya había comenzado a aumentar completamente a un nivel más animal, donde sus salivas y lenguas se mezclaban como si fueran una sola, como en una danza llena de deseo y ganas de devorarse mutuamente, lo cual tenía completamente tembloroso al necesitado Taehyung, mientras sentía como Jungkook devoraba su lengua y boca al mismo tiempo que lo sujetaba fuertemente por la cintura y manoseaba su piel húmeda por debajo de su camisa blanca con cuidado y anhelo.
Poco a poco, y sin romper aquel beso necesitado de ambos omegas, Taehyung comenzó a tener control de su cuerpo, terminando finalmente encima de Jungkook, a horcajadas de su regazo, envolviéndolo posesivamente con sus brazos detrás del cuello del pelimorado, para acercarlo a un más hacía a él y embriagarse por completo con el aroma tropical de su novio, el cual lo tenía en el séptimo cielo, sin temor alguno de caer de este en picada.
Las manos lechosas y fortachonas del omega pelimorado, recorrían por completo la delicada espalda del castaño, sintiendo la forma de su elegante cintura entre sus dedos, la cual apretaba con sutileza, para así acercar a su caramelito más hacia él y poseerlo por completo entre sus brazos, porque quería eso, quería que ambos se transformarán en uno solo esa noche, en una mente, en un corazón... en un deseo cumplido.
Taehyung se apartó del beso ligeramente, manteniendo sus frentes unidas mientras sus ojos se encontraban, rosado intenso y un turquesa cristalino, ambos omegas se sentían en ese instante, con la presencia del humano latente en su interior. Kim quería más, mucho más de Jeon, por lo que sin romper el contacto visual, Taehyung dijo algo que dejo en completo transe a Jungkook.
Así que mientras el caramelito se frotaba ligeramente bajo el regazo de Jeon, con su espalda sensualmente arqueada y envolviendo el cuello de su omega con posesividad, su deseo más animal fue dejado infraganti en la previa de un acto carnal que estaba a punto de darse entre esos dos.
— Deme un cachorrito, omega— pronunció Kim con ese tono de voz gangoso y sensual— Ponga un cachorrito aquí, ¿si?— siguió, quitando uno de sus brazos del cuello de Jungkook para tocarse el vientre en círculos, mirando de forma lascivia al pelimorado.
