Las familias Osorio y Bondoni son amigos desde hace muchos años, sus hijos han crecido juntos y son mejores amigos.
Emilio es el típico hombre mujeriego que sólo busca placer sin compromiso alguno con ninguna chica y las que se hacen llamar sus nov...
Sian no podía creer a quién estaba viendo, Eleazar estaba en su puerta, los nervios invadieron inmediatamente su cuerpo y las acostumbradas mariposas en el estómago comenzaron a sentirse.
Sus mirada se cruzaron y parecía cómo si nunca hubiese pasado el tiempo, el amor al parecer aún estaba intacto y eso ponía a Sian aún más nervioso. Con el poco valor que tomó, le habló a Eleazar
- Eleazar...¿qué haces aquí? no te esperaba, no creí que te volvería a ver...
- Lo sé y lamento haber llegado así, sé que me debes estar odiando, pero necesito hablar contigo, si me permites
Sian se lo pensó por un momento, y a pesar de que llegó bastante tranquilo tenía un poco de miedo de que le hiciera algo
- Está bien, pero no puede ser aquí, comprenderás que después de todo lo que ha pasado entre nosotros me siento inseguro estando sólo contigo
- Lo entiendo y no tengo problema en vernos en otra parte, podemos ir al Starbucks del centro comercial, es un lugar concurrido
Sian sólo asintió y envío a Eleazar para allá, él subió a bañarme, perfumarse y prepararse para hablar con su eterno amor, porque aunque lo negara y tratara de engañarse él siempre había amado a Eleazar
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Una vez terminado, salió a toda prisa hasta el centro comercial y al llegar al Starbucks caminó hasta la mesa dónde estaba Eleazar, tomó asiento con todos los nervios a flor de piel, no sabía cómo empezar esa conversión, así que esperó a que Eleazar comenzara todo
- Gracias por venir Sian, realmente quiero hablar contigo
- Espero que sea importante Eleazar, no creo que después de tanto tiempo tengamos algo de que hablar.
- Si Sian, ha pasado mucho tiempo, pero quiero que sepas que he cambiado, soy un hombre nuevo. Tiempo después de irme me dí cuenta de que todavía te amaba, pero sabía que no podía regresar teniendo la actitud que tenía, así que busqué ayuda Sian, tomé terapia y he mejorado mi carácter, ya no soy aquel hombre agresivo que era antes, me sé controlar ya no te haré daño Sian, ni a tí ni a nadie, me dí cuenta de que me había convertido en una porquería y me estaba odiando día tras día por haberte tratado tan mal y una de las cosas por las que regresé fué para pedirte perdón. Sé que fuí lo peor Sian y tú merecías...te mereces el mundo...perdóname por favor Sian, perdón por haber sido tan miserable y por haberte dañado tanto
A éste punto ambos se encontraban llorando, Eleazar por desespero de que Sian lo perdonara y Sian lloraba de felicidad, jamás pensó que Eleazar le pidiera perdón, y verlo tan cambiado le dió mucha felicidad y paz
- Eleazar por favor no llores
Sian tomó las manos de Eleazar
- No tienes que llorar, te perdoné hace mucho tiempo, siempre supe que eras un buen hombre y a pesar de todo lo que me hiciste no te odio ni te odié tampoco
