Part Of My Plan // Adaptación Emiliaco // M-PREG

Capítulo 8

- Para serte sincero no esperaba que me hicieras esa pregunta Joaquín, pero siento que puedo confiar en tí. Así que, si tú te desahogaste conmigo, ¿porqué no he de hacerlo yo contigo?

Joaquín sólo asintió y dejó que Sian hablara y contara sus penas.

- Estoy ya bastante recuperado, ó eso quiero creer..

Sian suspiró con algo de tristeza, pero se mantuvo fuerte.

- Hace unos 6 meses acabé una relación que tuve por 7 años.

Joaquín abrió los ojos sumamente sorprendido, pero no quiso interrumpir así que dejó que Sian continuara hablando.

- Lo único bueno de todo ésto es que mi relación no acabó por una infidelidad, pero creo que la causa fué igual ó más fuerte que eso... Eleazar es un chico asombroso, es verdaderamente increíble, un gran ser humano, pero me temo que no es muy bueno en cuestión de relaciones. Es sumamente desconfiado, no confía ni en él mismo y para confiar en alguien más se necesita de muchísimo, cada segundo revisaba mi celular, mis correos, al llegar a la casa olía mi ropa y preguntaba si había estado con otro chico, siempre había una pelea por sus celos obsesivos y sin sentido. Nunca en nuestros 7 años de relación lo engañé, lo amaba demasiado y si estuve tanto tiempo con él era porque confiaba en sus palabras, confiaba cuándo me decía "cambiaré por el amor que te tengo" , pero eso nunca pasó, cada día era peor que el anterior, cada minuto que pasaba era más tóxico y posesivo. Dejé de salir con amistades, dejé de trabajar, dejé de vestirme cómo solía hacerlo porque él siempre encontraba un pero. Él sólo me tenía en la casa encerrado, sin hacer nada y yo lo hacía por complacerlo, porque pensaba que así se arreglaría todo y sus actitud cambiarían, pero ni eso funcionó. Me dí cuenta de que nuestra relación ya no funcionaba y lo único que nos "unía" era el sexo. No hacíamos nada juntos, sólo teníamos sexo y lo demás no existía.

Joaquín estaba sumamente atento a lo que Sian decía y estaba en completa sorpresa, no encontraba las palabras correctas para comentar, así que decidió quedarse callado.

- Un día ví sus maletas en la sala de estar y le pregunté que pasaba y él me respondió que se iría, que sabía que había sido muy malo conmigo y que ya no quería seguir dañándome porque yo no merecía eso, me dijo que me deseaba lo mejor, que lo olvidara para siempre y que lo perdonara, me dió las gracias por el amor incondicional que le dí y por tantas oportunidades que nunca aprovechó. Desde ese día no he vuelto a saber nada de él, no sé si está bien ó mal, no sé dónde está, cambió su número de celular y no he podido comunicarme con él para saber cómo le ha ido, pensarás que soy un tonto, pero a pesar de todo lo que me hizo yo llegué a amarlo y aunque ya no siento nada por él tampoco quisiera verlo mal. Ya lo he perdonado. Compartí muchas cosas hermosas con él y siempre que lo recuerdo sólo pienso en todos los buenos momentos que pasamos.

Joaquín estaba en sorpresa total, no sabía que decir exactamente, pero lo intentó, aunque fuera un poco.

- No creo que seas tonto Sian, de hecho, creo que eres una gran persona. Fuiste capaz de perdonar una cosa cómo esa y no guardas rencor en tu corazón por él, lo cuál me parece muy bonito de tu parte. Espero que Eleazar esté bien dónde quiera que esté y espero que tú también lo estés.

- Muchas gracias por eso Joaco, yo ya me siento mucho mejor, ya no me duele hablar de él, creo que lo he superado, pienso que realmente ya había perdido el amor por él hace mucho, pero estoy tratando de recuperar la confianza que tenía en mí mismo y los recuerdos que guardo de Eleazar son sólo los buenos.

- Me alegra mucho Sian, desde ahora tienes un amigo, puedes contar conmigo para lo que necesites ¿vale?

Sian sonrió con ternura y continuaron hablando, decidieron cambiar el tema, pues ya no querían hablar de cosas tristes y para ser honestos, ambos se sentían sumamente confiados y cómodos compartiendo con el otro.