Postrado en la cama, desnudo y con la sábana sobre su caderas y los brazos bajo la almohada dónde tenía su cabeza estaba Daniel lánguido después de haber tenido sexo de manera tan vigorosa durante toda la noche sin descanso y es que como podía detenerme si cada una de sus reacciones me parecía exquisitas y mi cordura se perdía, sus gemidos, sus movimientos y todo él era una insinuación a monopolizar cada parte de su cuerpo, aún no había terminado con él.
Me acerqué con cautela temiendo despertarlo y quitar aquella excitante visión, con cada paso que daba desabotonaba mi camisa, me senté a un costado suyo e incliné mi cabeza para acercarme a su cuello y comenzar a besarlo. Dulces y gentiles besos que no iba acordé a lo que pretendía hacerlo con cuidado levanté mi mano y toque su blanca espalda que tenía pequeños chupetones de la noche anterior con la yema de mis dedos me deslice por su columna hasta llegar a su dilatada y húmeda entrada aún sin dejar de besarlo.
—hng aa mh ,¿que.. que haces? — su cuerpo se estremecía y pequeños gemido salía de sus rosados labios
—Nada — seguí moviendo mi dedo dentro suyo mientras mordía suavemente su cuello, estaba tan húmedo y resbaloso que un segundo dígito entró con facilidad
—mentiroso, ah aah, es...espera ah— intento levantarse pero tome sus muñecas y jale de ellas para que se quedara en su lugar —ah abusivo—
Reí por aquella linda protesta ,seguí estimulando aquella zona tan estrecha ,disfrutando de esos gemidos tan eróticos .
—ah am aaah — sin poder soportarlo más calle sus gemidos besando sus rosados labios
Daniel
Besos en mi nuca me despertaron ,exquisitas corrientes que terminaban en mi cuello y vientre. Sus dedos acababan profundo en mi estrecha intimidad
—¿N No te c cansas?—Gemí sobre sus labios que recién me besaban
—De ti... Nunca— Sus dedos arremetieron con gran entusiasmo tocando aquel dulce punto— Nunca es suficiente—
—Fueron más de cuatro horas—Susurre en su oído ya que tenía los labios sobre mi hombro— Voy a desfallecer —Ignorando toda súplica volvió a tocar mi punto dulce haciéndome gemir
—Este lugar me incita a estar dentro, una y otra vez, duro y sin consideración alguna ... torturarte hasta el delirio y hacértelo hasta que desfallezcas — Saco sus dedos y beso mi columna nuevamente y sentí como su miembro entrando, estirando y hundiéndose poco a poco en mi para después expresar con calma —Estás un poco inflamado aquí... es adorable—
—tú... eres malo, ha ha ha— estaba muy profundo, muy duro y persistente sin darme descanso.
—quiero estar muy dentro tuyo— al escucharlo mi cuerpo se estremeció —parece que te gusta la idea, me estás aparentando aún más —
Sentí su cuerpo vibrar encima mío, su pecho pegado a mi espalda, sus latidos eran fuertes, poderosos y ansiosos, sus besos y mordidas eran excitantes recorrían mi cuerpo con gran anhelo y devoción.
Giro mi cuerpo con el aún dentro la sensación fue extraña provocando espasmos y vibraciones desde ese lugar pero mirar sus ojos azul índigo en éxtasis pero...
Mi mañana transcurrió entre gemidos y duras penetraciones, para cuando me desperté de nuevo estaba en el agua.
—buenos días — un beso en mi cuello siguió a aquella voz —¿Cómo te sientes?— su mano bajó hasta mi entrada
—basta, tú... en serio — sus dedos entraron profundo —soy un doncel, no hace falta — dos de sus dedos hurgaron dentro mío
—si hace falta, me vine mucho en este lugar —sus piernas detenían las mías para que no pudiese cerrarlas —aun está muy lleno de mi —
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Secretos Peligrosos
Любовные романыLa poca paciencia de un gran empresario. La ingenuidad de un lindo Doncel impertinente. Los secretos del pasado que los une y pequeñas mentirillas piadosas... Acaso nuestros Protagonista ¿podrán llevarse bien? si bien es cierto que del odio al amo...