Mi persona mágica (FreenBecky)

8.

Freen's pov

Han pasado dos días desde lo ocurrido en la casa de Nop. Y fueron los dos días más extraños e incómodos de mi vida. Especialmente cuando estaba sola con Becky.

Hubo momentos de silencio, pocas palabras, pocas miradas, y me parece que los progresos realizados hasta ahora fueron completamente inútiles. Siento que hemos vuelto al principio, cuando ella parecía despreciarme y no soportarme.

No hizo más que ignorarme, y yo hice lo mismo. Me limité a observarla desde lejos para asegurarme de que estaba a salvo.

No tenemos nada de qué hablar, porque sé que ese beso no tiene ningún significado, porque sé que ella lo hizo sólo para que yo no descubriera lo que escondía.

Y además, todavía no lo he descubierto.

En estos últimos días me ha parecido cada vez más sospechosa y extraña. A menudo recibe llamadas telefónicas y mensajes de alguien, siempre habla en voz baja y cada vez que me acerco a ella, cierra la conversación y finge que no ha pasado nada. ¿Será que tiene un amante?

Bueno, Freen, pero ¿a ti qué diablos te importa?No es asunto mío, no soy yo el cornudo aquí.
Pero cómo me molesta este pensamiento. Tengo que expulsarlo de inmediato.

Esta noche estoy en mi apartamento. Tengo mucho trabajo que hacer. Tengo que aprovechar la ausencia de Nop y los pocos compromisos de Becky para poder progresar en el caso. El tiempo pasa y yo no tengo mucho.

Pero siento que no estoy avanzando y que siempre estoy a punto y a la cabeza. Es más difícil de lo esperado.

Becky está en su apartamento. Sinceramente no sé lo que está haciendo. Probablemente otra conversación secreta con su amante.

No es que me importe. Que haga lo que quiera.

"¡Mierda! No puedo trabajar si ella no sale de mi cabeza"

Decido salir al jardín para respirar, y para despejar mi mente. Es inútil seguir razonando sobre algo tan complicado si no puedo sacármela de la cabeza.

Maldita Becky y su hermosura.

Camino lentamente por el jardín, es una noche bastante tranquila y hay un viento ligero muy refrescante. Perfecto para mi dolor de cabeza.

Cierro los ojos y trato de relajarme, tratando de no pensar en la mujer que hace un tiempo me quita el sueño.

Y de repente, un ruido. Y un grito. Es Becky. Inmediatamente abro los ojos y, sin dudarlo, me apresuro a su apartamento.

Ella está en peligro.

Llego en un abrir y cerrar de ojos a la habitación de la morenita, que estaba asustada sentada en su cama. Y ahí se encontraba un hombre, que en cuanto me vio se escapó por la ventana.

No dudé ni un segundo y me lancé a la persecución de este último. Todavía no había entendido como diablos había entrado sin que yo me diera cuenta.

Ciertamente estaba desarmado, ya que se estaba escapando.

Aproveché de mis habilidades y con un movimiento digno de los mejores, me lancé sobre el cuerpo del hombre que inevitablemente cayó al suelo.

Le quité el pasamontañas negro que llevaba mientras él se quejaba y me suplicaba que lo dejara ir.

"¿Quién te envió? ¡Habla!"

Él seguía aplastando palabras sin sentido, y entonces le doy un gancho derecho golpeándolo en la mandíbula para callarlo.

"Dime enseguida quien te envió o te mataré"