Mi persona mágica (FreenBecky)

9.

Becky's pov

Freen me toma como una novia, teniendo mucho cuidado de no tocar mi herida, y me saca de allí.

"Tranquila, Beck, estás a salvo"

Mi pecho se aprieta cuando me susurra estas palabras, sintiendo su aliento en mi cuello. Y la culpa sigue devorándome, viéndola tan preocupada por un problema en el que me puse yo sola.

Me hace sentarme en el coche, haciéndome extender la pierna y apoyarla sobre ella.

Luego, coge una maleta de primeros auxilios, buscando agua oxigenada, gasa y un vendaje.

"¿Por qué tienes una maleta de primeros auxilios en tu coche?"

"Qué te sorprende? Siempre hay que estar preparados en caso de necesidad. Y ahora no te muevas, tengo que quitarte la navaja, va a doler un poco"

Ella estira la mano para sacar la navaja, y yo la detengo de inmediato.

"¡Para!

"¿Qué pasa?"

"Me duele"

Lo digo lloriqueando, sin poder detener las lágrimas.

"Está bien. Lo entiendo. Pero tengo que quitarlo, tengo que limpiar la herida para evitar que se forme una infección"

Sigo mirándola como un cachorro golpeado, pero ella no se mueve. Se queda arrodillada delante de mí con mi pierna sobre su rodilla, mirándome a los ojos. Su mirada es tan reconfortante y me transmite paz.

Intento mover la pierna, pero inmediatamente me golpea un dolor muy fuerte que me hace gritar y llorar aún más.

Ella extiende una mano sobre mi cara, y con un gesto familiar me seca los ojos.
Ella permanece muy tranquila a pesar de mis quejas, y yo no entiendo como es posible.

Ósea, ¿no ve que me estoy muriendo por el dolor?

"Becky, ni siquiera te he tocado, estás haciendo un drama. No te mueves"

Respiro con agitación y ella notando mi nerviosismo, suspira.

"Te lo quitaré, si sientes dolor, muerdeme la mano. No te preocupes por hacerme daño, voy a aguantar."

Acerca su mano a mi boca. ¿Es en serio?

"Respira Becky, toma respiraciones profundas"

Su voz es como el canto de las sirenas para mí, sobre todo cuando habla en voz baja. Hago lo que me dice y con un gesto rápido y decidido me quita la navaja de la pierna, haciéndome sentir las estrellas. Y yo muerdo su mano asfixiando un grito de dolor.

En su rostro se forma una expresión de dolor, pero ella soporta exactamente como había prometido, apretando sus dientes. No grita ni llora, y cuando por fin dejo su mano, noto que está sangrando ligeramente y que mis dientes están tatuados en su piel.

Tal vez he exagerado.

"Oh, ¡Dios! Lo siento mucho Freen..."

"Tranquila, todo bien"

No presta atención a su mano manchada de sangre, sino a mi pierna, que en cambio está perdiendo aún más sangre, y yo ni siquiera lo había notado.

Toma el agua oxigenada y la derrama sobre la gasa, para luego frotar muy suavemente sobre la herida. Me encantan sus expresiones. Está muy concentrada en lo que está haciendo, y puedo notar su ceja corrugada.