Freen's pov
Mi deseo de darle un puñetazo en la cara a Nop había aumentado enormemente después de la confesión de mi princesa. Sin embargo, no puedo ocultar que me siento aliviada. Es cierto que Becky ha sido víctima de una relación violenta y tóxica, y ha tenido que sufrir cosas atroces y terribles; pero saber que Nop nunca ha podido tocarla íntimamente me tranquiliza mucho.
Me alivia que Becky nunca haya experimentado totalmente un abuso sexual, a pesar de que ha habido varios intentos. Y ahora es mi tarea cuidar de ella, de su corazón y de su cuerpo, para hacerle olvidar el monstruo que tenía a su lado.
Tengo que agradecer a Irin la próxima vez que la vea, si nunca hubiera llegado a tiempo ni siquiera me atrevo a imaginar lo que podría haber pasado...
Observo el rostro relajado y perfecto de la mujer que secuestró mi corazón hace años, y que hoy es todavía su única dueña. Con el dedo le levanto un mechón de pelo que accidentalmente le cubría parte de la frente, mientras su pecho se levanta y baja lentamente al ritmo de un sueño. Después de su confesión, fue muy difícil para ella recuperarse, probablemente las imágenes y los recuerdos del pasado volvieron a su mente, haciéndole revivir momentos que olvidaría muy agradablemente. Y luego, agotada por el viaje y por sus lágrimas, se quedó dormida en mis brazos.
No pude dormir, es tarde en la noche pero no logro tomar sueño; todo lo que puedo hacer es admirar y contemplar la belleza de la mujer que duerme en mi pecho, como si tuviera miedo de que le pueda pasar algo, y sintiera la necesidad de velar por ella.
Mi dulce princesa, te prometo que siempre voy a protegerte, y nunca permitiré que alguien te haga daño. Daría mi vida por la tuya.
Cuanto más la miro, más me pregunto cómo se puede hacer daño a una criatura tan tierna. Becky es un regalo de Dios, y no merece todo el dolor con el que ha tenido que vivir durante todos estos años. Si pudiera, me tomaría todo su dolor para verla sonreír todos los días y para liberarla del dolor, su pesada carga invisible.
Después de algunos minutos, me vienen a la mente las imágenes de lo que sucedió anoche, cuando de repente nos encontremos en la cama la una encima de la otra, y el recuerdo de su rostro asustado y dudoso se apoderan de mi cabeza.
Me asusté muchísimo.
Pensé que había hecho algo mal, y a pesar de que en realidad era ella la que empezó el beso, pensé que había hecho algo que ella no quería y que me había pasado demasiado, y me sentí terriblemente culpable.
Pero fue aún peor cuando me confesó por qué se alejó de mi cuerpo, y me sentí como un animal, por ser excesivamente grosera cuando me puse sobre su cuerpo. Me dejé llevar por la emoción, porque cuando se trata de Becky me cuesta resistirme, y aunque he sido buena hasta ahora, empiezo a tener dificultades. Becky es como un imán que me atrae hacia sí misma, y yo no puedo evitarlo.
Pero debería haber pensado en ella, y debería haber sido más sensible hacia ella, debería haber sido al menos más delicada y debería haber pedido permiso.
Necesito una ducha fría, para liberar la mente de estos pensamientos torturadores y para bajar la calentura por lo que ocurrió antes.
Dios, soy tan patetica.
Y teniendo cuidado de no despertar a Becky que duerme como un angelito, me levanto de la cama y entro en el baño, para ducharme a las tres de la mañana.
El agua que entra en contacto con mi cuerpo me permite finalmente relajarme, y toda la tensión acumulada en las últimas semanas me abandona por un momento. Cuando salgo de la ducha, me seco y busco mi ropa.
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Mi persona mágica (FreenBecky)
RomanceRebecca Armstrong es una chica de 22 años, recién cumplidos. El día de su cumpleaños, pasa algo que pone en peligro su vida, y cuando su novio, Nop, se da cuenta de que ella es el objetivo de sus rivales, decide contratar a una guardaespaldas para p...