Si Seungcheol tenía algo claro en esta vida,era que el amor a primera vista no existía. Ese tipo de cosas para jóvenes adolescentes ya no eran su tipo o eso pensó hasta que un día kkuma había decidido escapar en medio del parque que rodeaba el rio Han.
¿Cómo era posible que le hiciera eso? Su pequeña hija peluda corría despavorida al parecer sin rumbo y por consecuencia el veinteañero detrás; Nunca creyó que ese pequeño cuerpo podría correr tan rápido y ser tan ágil.
— Kkuma por favor detente - cheol la llamaba desde atrás sin mirar nada más, pero la mala suerte lo seguía o más bien se le cruzó, cuando tiró a una chica que paseaba en su bicicleta.
Lo primero en escucharse fueron los quejidos de ambos, más de la pobre chica que había quedado bajo su transporte y el muchacho que al menos le sacaba medio cuerpo, estaba por sacarlo de encima de ella cuando él pareció recordar algo y volver a correr, pisando nuevamente a la pobre muchacha.
— ¡IDIOTA! - Ae-Chan quería partirle la cara, era una bestia, un animal - maldito troglodita, mono funcional, unicelular. Mira como me ha dejado - miró sus piernas, ahora, llenas de magulladuras y piedrecitas, su brazo derecho no estaba en la mejor condición al igual que su mano pisada. Quería levantarse, más el dolor repentino que empezó a sentir le impidió realizarlo y antes de pasar cualquier vergüenza, Ae-Chan prefirió quedar tirada a la espera de un milagro.
Por su parte, Cheol había logrado atrapar a la pequeña bestia la cual se salvó del reto cuando recordó a la muchacha, asustado devolvió sus pasos en la dirección por la cual corrió, encontrando a los pocos segundos el cuerpo aún tirado. Sintió como la presión lo abandonaba y su imaginación creaba cientos de escenarios donde tendría que explicar cómo había matado a la muchacha luego de caerle encima.
Se acercó lentamente, la única vez que sintió tanto miedo fue cuando su madre le había encontrado las revistas pornos bajo su cama, tomo a kkuma en sus brazos y pico el hombro de la muchacha pero al no recibir una respuesta volvió a entrar en pánico con una mano busco su celular y llamo a una ambulancia, la cual no tardo nada en llegar, la muchacha estaba desmayada según el paramédico podría ser debido al dolor de la mano que al parecer estaba quebrada, no se preocupo por la bicicleta podría comprar otra en compensación pidió acompañar a la muchacha todo para correr con los gasto del daño que había causado.
— Le avisaré a Joshua para que venga por tí - le habló a Kkuma, se fijó en el rostro de la joven, lucía pálido y tenía una mueca de dolor pero aún así, Seungcheol sintió como sus mejillas se tornan rojas al mirarla, pasó su mano con frustración por su cara - No puedes estar así luego de dejarla en una ambulancia Seungcheol.
Ae-Chan, volvía a cobrar razón de su cuerpo el cuál dolía y se sentía entumecimiento pero con un calor acogedor. Abrió sus ojos pero lo único que vio fue al troglodita que la tiro durmiendo en un sofá, trato de tomar un cojín con su mano derecha pero notó que está se encontraba enyesada así que con la otra apunto para darle en toda la cara. Despertó asustado pero verla despierta pareció ser un gran alivio.
— Creí que te había matado - confesó
— Pues es lo que haré a penas me den el alta - Ae-Chan estaba indignada- ¿Acaso eres idiota? ¿Por qué corrías así en medio de la noche en un parque?
— ¡Lo lamento mucho! - su reverencia fue rápida e inesperada, causando una pequeña risa en Ae-Chan y nuevamente un pequeño sonrojo en él - Soy Choi Seungcheol. Nuevamente pido disculpas por lo que pasó, mi perrita se soltó de su cadena y salió corriendo. Así que solamente la seguí.
— Soy Yoon Ae-Chan - Cheol se levantó a mirarla, se fijó en cabello oscuro y sus ojos similares a los de Hoshi, lo cual de causó una inexplicable ternura- lamento lo del cojín. - y nuevamente la encontró bonita, porque al momento de sonreír sus mejillas formaban margaritas. Quiso golpearse al sentir algo más que mariposas en el estómago, eran como rinoceronte golpeando cada parte de su tórax. Pero Ae-Chan igual sentía como se movía algo dentro de ella al notar como el troglodita tenía una batalla interna - Tierno.
