Sus padres de nuevo discutían, el los escuchaba desde su habitación.
Siempre era lo mismo, entendía el porque no se separaban sus progenitores; seguían juntos para mantener las apariencias y para que la empresa no se viniera abajo.Ante el público debían aparentar ser una familia feliz, comprensiva, el modelo de familia que todo el mundo debía seguir y con el todo soñaban.
Ante los espectadores eran la familia perfecta y soñada, si supieran que cuando nadie observaban, no eran eso que veían. Todo era una mentira.
Los gritos se escucharon aún más fuertes, alcanzo sus auriculares se los puso y puso Dollhouse de Melanie Martínez; subió todo el volumen de su celular y pronto dejo de escuchar.
Siempre que escuchaba esa canción, se preguntaba si Melanie habrá visto a su familia o conociera su situación, ya que describía perfectamente lo que pasaba con su familia día a día, la canción termino y cambio a otra, así estuvo por un tiempo, hasta que se quedó dormido, deseando que pronto ese infierno en el que vivía terminará.
-Ya no soporto a el viejo Tenko, te digo que deberíamos escaparnos tu y yo, lejos de nuestras familias y quitarnos los apellidos- dijo el chico pelinegro que acababa de llegar.
-Yo tampoco soporto a mis padres Touya- dijo en un tono cansado y fastidiado, despegó su vista de su cuaderno y miro a su amigo -tu idea me tienta mucho-.
Touya sonrió al escuchar las palabras de su amigo, le empezó a relatar su plan con más detalles. Pronto el profesor de esa clase entro, y tuvieron que dejar su plática.
Touya y Tenko eran amigos, desde que sus padres los presentaron en una fiesta, ambos odiaban la vida que llevaban. No soportaban todo el teatro que se montaban sus familias, desde hace tiempo Touya le dijo a Tenko que escaparan, este por su parte dijo que era idea descabellada; hasta este momento que al fin acepto escuchar los detalles del plan de su amigo.
-Y así es como lo haremos- finalizó con una sonrisa el pelinegro, mientras guardaba sus cosas para irse.
-Y crees ¿qué funcione?- pregunto el peliazul.
-Debe funcionar, tu y yo sabemos muy bien que sino escapamos, tu terminarás colgado y yo matando a ese viejo-.
Era una noche tranquila y fría, el invierno se acercaba pronto, eran pasadas las 2 am. Tenko se levantó de su cama, tratando de hacer el menor ruido posible, agarró una mochila, empezó a meter un poco de ropa, artículos de uso personal, y el dinero que hace meses ocultaba.
Hoy era el día que acordó con Touya escapar de sus familias, y con ello, escapar de la vida tan horrenda que vivían.
Al terminar de empacar, salió de la que era su habitación, con sumo cuidado bajo las escaleras y se dirigió a la entrada principal para salir, abrió la puerta con sumo cuidado y la cerro tratando de no hacer ruido.Al salir corrió, al percatarse que estaba alejado de su casa paro, tomo un poco de aire y empezó a caminar despacio. Se dirigía al centro de la ciudad, ahí lo vería Touya para irse a un lugar lejano en donde sus padres no los encontrarán.
Al encontrarse ambos chicos, se dirigieron a la estación de trenes, tomaron el primer tren que salía, sin siquiera ver para dónde se dirigía, y así empezaron su vida de libertad, sin tener que seguir órdenes, sin tener que fingir y actuar ante todos, sin tener que ser perfectos para todos, sin tener que vivir en una gran mentira.
Sabían que sería difícil para dos chicos de 17 años, vivir solos y sin las comodidades que estaban acostumbrados hasta hace unas horas, pero era más difícil tener que seguir con las vidas que llevaban.
Touya sacó una manta que llevaba, tapo a Tenko y a el, se abrazaron y se dispusieron a dormir, sería un viaje de un par de horas, lo mejor era dormir, cuando despertarán sabían que llegarían a su destinó.
Yo tampoco tengo buena relación con mis papás, pero bueno.
Espero que las personas que lleguen a leer esto, se encuentren bien, tomen agua, coman a sus horas y si estás pasando por una situación difícil te doy un abrazo virtual con mucho cariño💞
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Run away
FanfictionTenko y Touya se cansaron de fingir, de tener que actuar, de aparentar que eran perfectos. Decidieron huir de todo.