KatsuSoba [TodoDeku Week 2023]

In another life

I wish i'd met you sooner

Shoto sabe con claridad que sus compañeros no pueden pasar más de cinco minutos sin armar un escándalo o meterse en problemas.

Es algo a lo que se ha habituado, sin embargo.

Así que no le sorprende escuchar la conmoción que lo recibe una vez que las puertas del ascensor le abren paso a la sala común.

Pero hay algo distinto esta vez.

Sus pasos se apresuran con curiosidad cuando escucha, particularmente a las chicas, soltar un largo "aaaww", meloso y emocionado.

La última vez que escuchó eso, Shoto no fue lo suficientemente rápido y terminó por perderse el truco que el conejito de Koda había hecho.

Esta vez no iba a perdérselo por nada del mundo.

Oh, y por supuesto que era un conejito el que acaparaba la atención de la clase entera. Pero no el que Shoto esperaba.

En la entrada del edificio, Bakugo era casi asfixiado entre sus amigos, la irritación palpable en su mirada fúrica mientras Kirishima susurraba algo en su oído. Y luego Shoto desvió su mirada hacia abajo, ahí donde las chicas estaban acuclilladas.

—Fue un maldito accidente— escuchó decir a Bakugo antes de que recibiera un golpe en la cabeza por parte de Kaminari.

—¡No hables así frente al niño!

Shoto se detuvo, sin apartar su vista del pequeño que se escondía tras la pierna de Bakugo.

La confusión, curiosidad y muchas, muuuchas preguntas le azoraron, porque Shoto reconocía esos grandes ojos jade, mejillas pecosas, rizos verdes y sonrisa nerviosa.

Y aunque pareciera una locura, aunque fuera imposible, no había duda.

Ese niño era Midoriya.

O bueno, quizá era un pariente cercano.

Pero antes de que Shoto montara toda una MUY buena y bien fundada teoría sobre un hermano perdido de Midoriya, Bakugo aclaró de mala gana que en su camino al supermercado habían ayudado a una niña perdida que en medio de su desesperación por haber perdido a sus padres, descontroló su quirk... y bueno, todos sabían que Midoriya era propenso a ponerse en situaciones problemáticas.

—No durará mucho, no es permanente— aclaró entre dientes. Aizawa ya lo había regañado, injustamente solo a él, porque, según lo que le contó a Kirishima, EraserHead tuvo una muy obvia e injusta preferencia con el mini-Deku, y el único que tuvo que cargar con la mirada asesina de su profesor fue él.

Su molestia no pudo durar mucho; unos tirones en su pantalón lo hicieron bajar la vista, el rubio chasqueó la lengua antes de ponerse a la altura del mini-nerd. El niño se acercó a su oído y susurró lo que seguramente quería preguntar.