XVI

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—¡Figure!.— exclamó Seek, moviéndolo de un lado a otro.
—¡Ah!.— se sentó rápidamente, exaltado.
—¡¿Que paso Seek?!.—
—¡Mira lo que encontré!.— corrió hacia el segundo piso y señaló la puerta abierta.
—¿Qué? — dijo aún adormilado — ¿Abriste una puerta?.—
—Abri la puerta.—
—.. ¡Ah! ¡Abriste la puerta!.— exclamó vivaz.
—Aun así, parece que sigue habiendo más habitaciones.. me preguntó cuántas más habrá por delante.—
—Vamos.—
—¿Ahora?.—
—¡Claro! ¿Por qué no?.—
—Pues...  Uh.. bien, vamos.—

Y así, ambas entidades se pusieron en marcha, pasaron la puerta 51,52,53; en esta había un tipo de tienda, dirigida por una especie de pulpo azul, claro, fueron cuidadosos y pasaron con su forma humana, tenían tantas preguntas que hacer, pero decidieron continuar su viaje.

Puerta 54,55,56,57... Hasta llegar a la 70, realmente no había nada muy interesante, solo cofres, ya vacíos por los demás jugadores, pero aparte de eso no había nada nuevo o extraordinario que pudiese llamar la atención de Seek o Figure.

—Todo esto para nada.— se quejo el pelinegro.
—Supongo que ir a explorar no fue una buena idea después de todo.—
—Volvamos.—
—¿Ya?.—
—¿Hay algo más que quieras hacer?.—
—...No.—
—Entonces regresemos, estoy cansado.—
—Pense que tú especialidad era correr.—
—Asi es, pero me siento agotado, tuve que buscar libros y ordenar un código.—
—Hm.—

Finalmente, después de horas volvieron a la biblioteca, lo único nuevo e interesante podría ser la tienda de "Jeff", pero ninguno de los dos quería hablar del tema.

—¿Y bien?.—
—¿Ahora qué?.—
—No hay nada, ni siquiera sabemos si en algún momento las habitaciones terminan.—
—No pueden ser infinitas.—
—¿Entonces?.—
—¡No lo sé!.— exclamó cansado Figure—¿Cómo esperas que conozca algo de lo que no tengo idea?.—
—...—
—Solo.. descansemos.. ¿bien?.—
—Bien..—

Seek se retiró a su habitación, dejando solo a un exhausto Figure.

¿Ahora qué?, ¿qué espera que yo haga?, ni siquiera sabía que hubieran más de 60 habitaciones, y 70 ni siquiera es el número final!.—

















—Estoy agotado... Dios, ni siquiera se que hacer o incluso pensar, nunca imaginé que hubiesen tantas puertas, y Jeff.. no sabía que había una entidad así.. aunque ahora que lo pienso.. ¿no es el un tipo de traidor?, pues está ayudando a los jugadores con sus raros artefactos, aunque casi no tenía nada, solo una linterna y encendedor.. ¿debería decirle a los demás?. Ugh.. descansaré, solo un rato, ya no quiero pensar más.— cerró sus ojos, dejando su mente en blanco y durmió, al parecer se estaba "humanizando" demasiado, y ni siquiera pasaba tiempo con humanos, si no con una entidad. Además que todavía debía de cumplir su parte del trato que había hecho anteriormente, sentía que habían pasado meses, y aún está a en deuda. Odiaba ese sentimiento.

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