•Pesadillas•

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lovlyamelie

Otra noche, esta no era lluviosa o fría, era muy normal, una en la que nadie se imaginaria que algo malo pudiera pasar. Ya casi era hora de ir a dormir, los jóvenes estaban en la cabaña, Vee miraba la ventana, pensativa, Willow le hacia unas trenzas a T/n antes de dormir, Amity leía un libro de "La Buena Bruja Azura" sentada en el sofá y Luz estaba a su lado, mientras los chicos, Gus y Hunter, probablemente platicaban de ningún tema en específico en el ático, ninguno había hecho nada interesante ese día.

—Hace un tiempo que no tocas tu violin T/n —comentó Willow.

—No me siento con muchas ganas de hacerlo, la verdad —respondió, pensando en su violin, y en el arco que le dio su xadre antes de lo que pasó el día de la unidad.

El recuerdo de ese día, su xadre con el brazo lleno de grietas con luz saliendo de el, sufriendo, Eda llorando con elle en su regazo, los líderes de aquelarre igual que Raine a su lado, Darius y Eberwolf, no era una bonita experiencia.

—¿Tocas el violin? —preguntó Vee, mostrando interés.

T/n asintió y suspiró, haciendo aparecer su violin y arco.

—Deberías tocar algo, para distraerte, siempre te ves muy tranquila cuando lo haces —sugirió Willow.

—¿En serio? —la otra chica le asintió—, esta bien, si tú lo dices.

T/n acomodó su violin para tocarlo cuando de repente llegaron Gus y Hunter.

—Dice Camila que vengan a dormir.. ¿interrumpimos algo? —preguntó Gus.

Willow negó con la cabeza.

—T/n iba a tocar algo en su violin, ¿quieren oír?

Los chicos se sentaron en el piso, T/n decidió tocar la canción que su xadre le había enseñado.

El día que lo hizo, le contó que solía tocarla con su madre cuando eran jovenes, en esos tiempos la chica no sabía que su madre era Eda, la Dama Búho.

T/n tenía unos ocho años, hace poco le había regalado su xadre su primer violin, aún estaba aprendiendo lo básico, aunque tenía un talento natural, justo como Raine. La niña ya se había aprendido lo más básico facilmente y su xadre decidió probar que tan buena podía ser.

—¿Quieres algo difícil mi niña? —ella asintió rápidamente como respuesta— Bien, te voy a enseñar una canción que tu madre y yo tocábamos de jovenes.

—¿Cómo de mi edad? —preguntó la niña.

—Un poco más grandes, pero eres igual que ella, inteligente y talentosa.

Le dio dos palmadas en la cabeza, Raine con su propio violin empezó a entonar la canción, nombrada como "Rapsodia de Raine", de forma lenta para que la niña imitara sus movimientos, le tenía paciencia y ella falló muy pocas veces.

—¿Lo hice bien? —preguntó emocionada.

—Lo hiciste grandioso T/n —la elogió.

—Quieto ser como tú y como mamá de grande xadá.

Serás mejor, mi pequeña violinista —le revolvió el cabello a la niña.

—Oye, no me hagas así, yo si me despeino, no estoy pelona como tú.

—Oye, yo no estoy pelone —le reclamó riéndose.

Luz, que se estaba quedando dormida, se despertó al escuchar la melodía, era tan relajante que casi se duerme otra vez.

Mientras T/n tocaba la canción, se dio cuenta que el ambiente se tornó cálido y con algunos puntos de luz flotando en el aire, había magia en el, como si estuvieran en las islas hirvientes.

—Y eso fue la Rapsodia de Raine —terminó de tocar.

—Eso fue hermoso —mencionó Camila, nadie notó que estaba recargada en el marco de la puerta.

—Gracias.

Esa noche fueron a dormir tranquilos, pero T/n tenía una inquietud, algo le dijo que no se quedara dormida, pero estaba tan cansada..

Parecía tener un sueño lucido, se sentía tan real, estaba en el día de la unidad, pero algo era diferente, no había nadie, solo un pequeño Búho.

¿BÚHO?

Bestia.

BESTIA BÚHO.

T/n se agachó para acariciarla, parecía asustada, pero no de ella, de algo detrás de ella, se volteó rápidamente, ahora se encontraba en un barranco, nuevamente con la bestia Búho, esta tenía un hilo rojo amarrado a su pata, y el hilo también estaba amarrado a su tobillo, ella cargó a la bestia y se asomó por el barranco, viendo una playa, volvió a darse la vuelta y había un ser encapuchado, con una estrella cubriendo su cara.

—Tú no eres ella.

—¿Quien eres..

—No deberías estar aquí —se rió sarcásticamente.

—Esto no es un sueño..

—¿Se ve como uno?

—Esto es una pesadilla, debo despertar, debo..

—Despertar.

—¡¿Qué quieres?!

Ese ser por alguna razón le provocaba un intenso miedo a la chica.

Ella cerró los ojos, dando un paso atrás, el ser jugó con un mechón suelto de su cabello.

—Nos volveremos a ver, violinista.

Una sonrisa ladina se pudo ver en el rostro del ser.

La chica, añadió una pregunta reuniendo fuerzas del fondo de sus ser.

—¿Quien eres? —repitió.

—Uno más de ellos de los que no se pudieron deshacer.

—¿Qué..?

—Muchas preguntas, me pones ansioso niña —se iba a ir pero volvió con ella—, presiento que algo malo pasara pronto, ten cuidado.

—¡Oye, pero-

Y la empujó al barranco, y se despertó.

Corrió al baño a mojarse la cara y creyó verse a sí misma con plumas un segundo. Lo único que quedó de ese sueño fueron recuerdos borrosos, pero la dejaron preocupada un par de días.

•—•—•—•

Extraño a mi ex, fin del capítulo.

(No de me ocurrió nada más, perdón 😿).







𝑴𝒚 𝒗𝒊𝒐𝒍𝒊𝒏𝒊𝒔𝒕 | 𝑯𝒖𝒏𝒕𝒆𝒓 𝒙 𝑳𝒆𝒄𝒕𝒐𝒓𝒂Donde viven las historias. Descúbrelo ahora