𝑴𝒚 𝒗𝒊𝒐𝒍𝒊𝒏𝒊𝒔𝒕 | 𝑯𝒖𝒏𝒕𝒆𝒓 𝒙 𝑳𝒆𝒄𝒕𝒐𝒓𝒂

•De un solo hombre•

lovlyamelie

•-Narradora

Golpeó la mesa con el puño cerrado, estaba temblando de frustración mientras Darius y Raine observaban todo detenidamente, esperando que se calmara un poco.

—Edric, sal, por favor hijo —pidió Alador, en cuanto su hijo salió de la habitación Alador lanzó todas las cosas encima de la mesa en un arrebato de rabia.

Darius lo tomó de las manos para que no se jalara el cabello mientras Raine intentaba calmarlo con palabras.

El artefacto borrador de sigilos no había funcionado, de nuevo. Alador se sentía realmente frustrado, tenía que hacer que funcionará, toda su vida vivió haciendo algo, construyendo abomatones o armas, no sabía cómo vivir sin hacerlo, sin sentir que ayuda a los demás, esto era muy difícil para él.

—Tranquilo Alador, yo sé que te esforzaste mucho en esto pero al menos ya sabemos donde está el error y podemos repararlo, la próxima vez estará bien o mejor, lo prometo ¿sí? —habló Raine, Alador abrazaba a Darius mientras le escuchaba a le barde, por alguna razón la voz de este le parecía muy tranquilizante, como si sus palabras tuvieran magia—. ¿Estás mejor? —preguntó elle después de unos segundos, Alador asintió.

—¿Hoy dormimos en tu casa? —Alador susurró en el oído de Darius, algo triste, nunca le había pedido eso, siempre dormían en la casa de Alador, pero hoy él se sentía algo triste y no quería llegar así a su casa con sus hijos.

—Sí mi amor, sí.. —musitó Darius, estaba algo decepcionado consigo mismo, no supo como ayudar a Alador y Raine tuvo que hablar por él, nunca ha sido bueno en las charlas emocionales o para calmar a alguien, tal vez alguna vez lo fue, pero es una habilidad que perdió con el tiempo casi por completo.

Alador le dio un piquito a Darius, buscando confortarse en sus labios, Darius empezó a dejar besos suaves en su boca y mejillas.

—¿Quieren ir por un trago? —preguntó Alador.

—No me gusta tomar —respondió Raine.

—Pero no fuera tu despedida de soltere por que ahí sí..

—Cállate Darius —siseó le peliceleste, recordando aquel día tan vergonzoso.

—Uy, perdón, no te me ofendas niñite.

~𝄞~

Dejó la copa sobre la barra después de darle un sorbo a la bebida, un vino barato de uva mezclado con otra bebida alcohólica para ser más fuerte.

—Que quede claro que solo los acompaño por que son un par de irresponsables que sin supervisión son un peligro para la seguridad pública —aclaró Raine, pidiendo otro trago.

—Lo que digas, pajarite —murmuró Darius el apodo.

Con que así quieres jugar Deamonne.. pensó Raine.

—¿Cómo me dijiste? —preguntó indignade.

—Pajarite cantore, ¿o no me escuchaste? Tanto presumes tener una buena audición y estás medio sorde..

—Llámame así de nuevo, te reto.. —lo miro reclamante, señalandolo con un solo dedo, Alador estaba recargado en la barra en medio de elles dos.

—Pajarite —y empezó a silbar imitando a un pájaro.