𝑴𝒚 𝒗𝒊𝒐𝒍𝒊𝒏𝒊𝒔𝒕 | 𝑯𝒖𝒏𝒕𝒆𝒓 𝒙 𝑳𝒆𝒄𝒕𝒐𝒓𝒂

•6•

•Hunter•

La voz de Darius me sobresaltó estaba en la biblioteca, pensativo, recargando la cabeza sobre un libro en la mesa.

Miraba a la ventana, últimamente me sentía extraño, creo que él tenia razón, no dejo de pensar en T/n, y lo admito, estoy enamorado de ella.

Mierda, 'enamorado', antes pensaba que las relaciones y eso eran un desperdicio de tiempo y ahora me veo, dibujandola en mi libreta, su violin, las estrellas, anote el libro que le gusta para comprarlo y leerlo más tarde.

—¿Que haces niño? —apareció detrás de mi y casi caigo de mi silla del susto, miro de reojo lo que hacía en mi libreta y suspiró—, ¿Como te va con tu novia?

—Uno, ¡¿Por qué mierda me sigues?! Y dos, ¡No es mi novia, maldita sea!

—Tampoco te enojes, estarás en un rango más alto que el mio pero soy un adulto, ¿nunca has escuchado eso de respetar a tus mayores?

Volteé los ojos con disgusto.

—¿Que quieres? —pregunté, indignado.

Había una misión que olvide completamente, no era habitual en mi ser tan distraído, y al parecer la misión sería con este anciano de cabello falso, a veces pienso que bajo esa baba de abominable que tiene en la cabeza esta calvo.

Mientras caminábamos por los pasillos se le ocurrió empezar a meter el tema de T/n.

—Es lamentable verte hacer esos dibujitos pateticos —para ella no son pateticos pensé—, solo díselo niño, eres muy frustante. Si yo tuviera un hijo y fuera como tú estaría decepcionado.

—No lo entiendes, seguramente nunca has pasado por algo así, apuesto a que siempre fuiste un amargado.

Volvió a suspirar, —Tal vez soy amargado pero no un miedoso.

—¿Ah, si? —lo reté con mi tono de voz—, ¿y porque sigues soltero Darius?

Se quedó sin palabras, no pudo responder con un argumento en contra de mi pregunta.

—Necesitamos a alguien del aquelarre de los bardos o que utilice ese tipo de magia para esta misión, veré si Raine esta disponible..

Empezó a llamarlo sin ninguna respuesta.

Me vino una idea a la cabeza.

—Conozco a alguien.. —musité—, T/n Whispers, ella es muy buena.

—Para mi que buscas excusas para pasar tiempo con ella —le di un codazo.

—Es en serio, ya he ido a una misión antes con ella, trabajamos bien juntos.

—¿Cual misión? si se puede saber.

Me quedé callado, se supone que él no podía saber de eso.

La misión era de interrogación y cambié de opinión, porque no quería que ella supiera como tratábamos a los reclusos en el conformatorio.

—Te propongo algo, hoy su xadre vendrá más tarde con ella, si le confiesas tus sentimientos te daré mil caracoles —lo miré con cara de incredulidad—, lo juro, un verdadero hombre siempre mantiene su palabra.

—Esta bien, es más, la invitare a salir.

—Espero no te retractes como cobarde —musitó.
                                   

~𝄞~

No supe como saludarla, no nos veíamos desde la pijamada, pude oler su perfume de durazno cuando me abrazó, era un aroma agridulce, me empalagaba totalmente de una buena manera, era adictivo.

Mientras los adultos cumplían la misión que tenían encargada nos quedamos afuera de la habitación, hablando en los pasillos.

Me revolvió el cabello y me lo acomode con la mano.

—Espero esto no suene raro pero te viste demasiado lindo cuando hiciste eso con tu pelo, en serio.

—Yo siempre me veo lindo, aunque no tanto como tú —se puso roja e intenté mantenerme lo más natural posible para que no notará mi nerviosismo—, oye, te tengo que decir algo.

—Yo también —la deje hablar conmigo, quería invitarme a una fiesta con dos de sus amigos, se llamaban Edric y Emira.

—Eso se escucha ilegal y para mayores de edad.

—Tienes razón en las dos cosas, pero.. estaría bien salir los dos por primera vez, no en una de tus misiones o mis pijamadas secretas si no más bien un lugar real.

—Pienso que es poco profesional que el Guardia Dorado este en un lugar de ese tipo —comenté.

—Nadie sabrá que eres el Guardia Dorado —me tomó de la mano—, ¿estas libre ese día?

Asentí, de tanto hablar hasta olvide lo que le iba a decir.

Cuando Darius me preguntó si tuve el valor de hacerlo no pude mentir, empezó a burlarse de mi y yo solo me puse la mano en la frente.

—Titan, si no me muero por alguna misión voy a morirme por tu culpa, no puedo creer que seas tan estúpido —se rió, después de unos segundos recuperó la compostura.

Obviamente no le conté la parte ilegal y eso, que podría salir mal en esa fiesta igual.

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Capítulo cortito, no me gusta como quedó este y el próximo y por eso no me animaba a subirlos, si algo les disgusta o así me avisan porfa.

He estado pensando que cuando termine este fanfic haré otro pero con un protagonista chico, algo así de "Edric x T/n", ¿que les parece?