Mi Verdadera Herencia

Capítulo 11

Entro en mi recamara y comienzo a empacar lo que me falta, siento mi cuerpo temblar mas sin embargo trato de calmarlo aunque me es un poco difícil, escucho que la puerta de mi cuarto se abre y me imagino lo que viene a continuación mas sin embargo no me trevo a mirar a mis espaldas, escucho un coche arrancar y salir rápidamente de casa cierro los ojos.

-Me puedes decir ¿Qué fue eso que pasó hace un rato? 

-No tengo ganas de hablar ahorita madre

-Sabes heriste los sentimientos de ese muchacho -ruedo los ojos "Si supieras madre"

-No creo que eso sucediera y de ser sí te aseguro que ya anda buscando con quién calmar lo herido que lo dejé -mi madre suelta un suspiro y se va, me giro para cerrar la puerta y mi mejor amiga está arrecostada en ella viéndome con cara de pocos amigos -Si vienes en el mismo plan que mi madre te advierto que te puedes ir

-Tranquila fiera yo vengo en paz, aunque no estoy contenta de lo que le dijiste en el despacho soy consiente de lo que se viene, así que estoy de tu lado -entra al cuarto y cierra la puerta tras ella

-Hay muchas cosas que están en juego y aunque nuestra madre no lo sabe y no lo sabrá no quiero que el plan salga mal

-Hablando de eso tengo unos contactos allá -ruedo los ojos

-No me imagino que clase de "contactos"

-Oye vamos tampoco así, bueno mira la cosa es que ya tenemos la ropa que necesitamos, nos llevamos lo que compramos y allá tendremos el resto, aparte de eso ellos nos ayudarán ciertas cosas -me giro para verla y levanta las manos -Quieta tampoco así no son "esas cosas" -me encamino a la ventana y pienso en cuando llegamos aquí y ahora que te toca devolverme para el lugar que juré no volver a poner un pie, miro al cielo y cierro los ojos "Padre por favor ayúdame"  

-¿Ya tienes todas tus cosas en las maletas? 

-Sí, solo me falta echar un vistazo por si me falta algo más, pero creo que todo lo necesario ya está empacado, debería de ir hacer eso en este momento así que nos vemos dentro de poquito -la miro sobre mis hombros y le sonrió.

Sale del cuarto y me deja sola, miro de nuevo para la ventana y un sentimiento de nostalgia se instala en mi pecho "Tengo demasiados recuerdos no gratos de esa familia, todo lo que esa señora nos hizo después de la muerte de mi padre, el no querer dejar a mi madre sola y sobre todo no quiero irme con ese sujeto que desde que llegó solo a traído problemas" abro la ventana y dejo que el viento de mi hermoso pueblo pegue en mi rostro y suelto todas mis preocupaciones en un suspiro "Tengo demasiados presentimientos en mi pecho que no puedo decir si son buenos o malos, sé que no es buena idea que la ultima noche que paso en casa mi madre esté enojada conmigo, pero no quiero que se dé cuenta de mi plan, a como tampoco le quiero comentar lo sucedido con ese tipo" parpadeo varias veces para no permitir que las lagrimas salgan de mis ojos, veo la luz de un coche aproximarse a mi casa y el sentimiento de esperanza se instala en mi pecho "¿Qué se supone que haga contigo?" estaciona su coche y veo que se baja con la ropa desarreglada, como si sintiera mi mirada levanta la suya y da directamente con la mia, nos quedamos así por un rato y veo que está herido y por alguna extraña razón deseo abrazarlo y pedirle disculpas por lo que le dije anterior mente, pero sé que no podré mas que nunca necesito llevar acabo mi plan y eso no incluye diversiones de una sola noche, aparta su mirada y entra a la casa, cierro la ventana y decido acostarme ya que la siguiente día tengo que estar descansada, me acuesto en la cama y me dejo ir en lo brazos de Morfeo.

-Hija, cariño despierta -siento unas leves caricias en mi mejilla y al abrir los ojos veo a mi madre, me levanto y la abrazo -Vamos arriba pequeña que dentro de poco se tienen que ir.