BIENVENIDA A HOGWARTS

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Después de una gran entrada por parte de la nueva estudiante de quinto año, la profesora Weasley procedió a colocarle el sombrero seleccionador; al cabo de unos minutos el sombrero gritó --"SLITHERYN"--, todo el alumnado en el gran comedor aplaudieron y lanzaron vivas al aíre, fue hasta que el director Black habló con voz fuerte que todos callarón --"bién, jovenes supongo que tienen mucho que hacer antes de las clases de mañana"-- los alumnos seguian observando a la nueva de quinto año, el director Black se aclaró la garganta y dijo una vez más --"¡dige!, que de seguro tienen cosas que hacer antes de las clases de mañana"-- hizo un ademán para que se retirarán del gran comedor.

--"Que gusto conocerla finalmente,"-- se dirigió a la joven frente a ella --"soy la profesora Weas..."-- fue interrumpida por el director --"profesora Weasley,"-- observo al nuevo elemento de Slitheryn --"puedo pedirle que guíe a la nueva estudiante a su dormitorio"-- le dijo a la profesora más como una orden que como un favor --"claro profesor Black"-- su voz era suave y constante --"por aquí señorita"-- la joven siguió a la profesora en silencio, contemplando a su alrededor, todo lo que la rodeaba erá tan grande, tan mágico como salido de un cuento de hadas, de esos que solia leer en los libros que sus padres restauraban.

Al llegar a la entrada de la sala común de Slitheryn la profesora Weasley le indicó la contraseña para que pudiera ingresar --"Vendré mañana temprano por usted para indicarle el camino a su salón de clases, duerma bién"-- se depidió la profesora.

La joven entró a su sala común y caminó lentamente por las escaleras viendo cada detalle del lugar, contempló las decoraciones y las molduras de serpiente que engalanaban el lugar, pero lo que más llamó su atención fue ver las enormes ventanas que dejaban contemplar un hermoso fondo acuático, caminó hasta los ventanales y se perdió por un momento en aquella espectacular vista. Algunos Slitheryns que todavía estaban en la sala común observaban a la chica y especulaban a que familia magica pertenecía y porque había entrado a estudiar en el quinto año. Fue hasta que un prefecto le indicó cual era su dormitorio que se apartó del lugar. Al entrar a su dormitorio sus compañeras ya dormían, así que se puso el pijama y se acosto a descansar.

Al otro día despertó y lo primero que notó es que estaba sola en la habitación --¡me quedé dormida!-- sobresaltada se levantó de inmediato para alistarse con la túnica y refrescarse un poco antes de ir en busca de la Profesora Weasley, salió del dormitorió encaminandose a la salida de la sala común para ir a los sanitarios, con las instrucciones algo confusas de un prefectó logró llegar al baño de damas, entró para terminar de asearce, --"aaajjj"-- suspiró viendose al espejo --"creí que no se notaría mucho"-- durante el enfrentamiento que tuvieron ella y el profesor Fig con Ranrok en la camara doce en Gringots ella había salido lastimada de su rostro, aunque el profesor Fig le habia sanado la herida no se habia percatado de la gran marca que habia quedado en ella --"haber como se lo explico a mis padres cuando me vuelvan a ver"-- guardó sus cosas en su bolsa y salió del baño distraidamente acomodandose su cabello para tratar de disimular la cicatriz en su rostro. No había dado ni un par de pasos cuando sintó que su cuerpo chocaba bruscamente contra otra persona, el hecho de ir ella distraida y la otra persona ir con bastante prisa dió como resultado un choque bastante caótico entre ellos haciendo que ambos terminara en el suelo con las cosas de la chica y la otra persona regadas por el piso y con ellos en una posición bastante incomoda, en especial para la joven que de alguna manera hizo que ella terminara sobre la otra persona.

--"¡¡¡QUITATE DE ENCIMA!!!"-- sonó agresivamente una voz de varon empujando a la chica hacia un lado --"¡disculpa no fue mi intención!"-- se apresuró a disculparse --"dejamé ayudarte"-- hizo el intento de ayudarle cuando él retiró su brazo del toque de la chica --"¡no necesito tu ayuda!"-- la chica se encogió de hombros ante la ostilidad en la voz del joven, observó como él buscaba algo desesperadamente en el suelo y pudo percatarse de la ausencia de brillo en su mirada y al contrario había una tormenta salvaje en ellos, --"lo siento, encerio, no era mi intención que esto pasara"-- la armonia y sencibilidad en la voz de la chica hizo que el joven detuviera su búsqueda y tratara de dirigir su cabeza en dirección de la joven --"tu voz"-- dijo él más sereno y sosegado que al principio --"eres la nueva de quinto año"-- afirmó --"sí, soy la nueva de quinto"-- comenzó a recoger sus cosas regadas por el suelo cuando encontró una varita perdida de un tono negro ebano, bastante bien pulida con un diseño sobervio y considerablemente rígida, la tomó en sus manos dandose cuenta que al tacto era suave y que parecía que se podia romper facilmente, muy diferente a como se veía a simple vista --"¿esta es tu varita?"-- preguntó nerviosa acercando la varita a la mano del chico que había reanudado su búsqueda --"sí, es mía"-- tomó su varita evitando tocar la mano de su compañera y de imnediato ella vió un tintineo rojo que emanaba de la varita del chico como si fuera un radar --"gracias, ahora ¿me puedes pasar mi libro?"-- dijo poniendose de pie --"con gusto"-- ella se apresuró a recoger sus cosas, tomo el libro que había caido abierto cerca de la puerta del baño --"¡braille!"-- exclamo ella con una sonrisa en su rostro poniendose de un salto en pie --"¿conoces la escritura?"-- contesto el joven sorprendido, porque por primera vez alguíen sabía su método de lectura y no lo habían llamado "libro de puntitos".

El Legado De SlitherynDonde viven las historias. Descúbrelo ahora