REGALO

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Durante las primeras semanas de Noviembre las nevadas se habían intencificado más, los pasillos exteriores del castillo estaban cubiertos de una capa gruesa de nieve, los arboles que antes se movian con el viento y liberaban sus hojas naranjas yacían privadas de ellas, siendo sustituidas por cantidades descomunales de nieve, los día soleados y de tonos rosados-naranjas se habían ido, para ser sustituidos por días mas oscuros con luces pálidas y gélidas, a los ojos de alguien que nunca haya visto una nevada o solo la nieve pensaría que se trata del comienzo de una novela de terror en medio de enormes montañas nevadas.

Por fortuna para los estudiantes de Hogwarts y los pueblerinos de Hogsmade incluidos los pueblos aledaños no les era ageno esos paisajes, pues los lugares se comenzaban a vestir de luces de colores, coronas en las puertas y hermosos pinos adornados de diversos artículos de ocasión.

--"¿Alguno sabe porque Naty nos pidio que la viéramos en el jardin central a esta hora de la noche, cuando el frío es más intenso?"-- Ominis caminaba en medio de Sebastian y Susan envuelto en una frasada, llevaba un gorro de frío, guantes, el abrigo y bufanda que Susan le había dado y unos botines especiales de frío --"No tengo idea amigo, pero apuesto que es importante"-- Sebastian abrió la puerta de la torre oscura para que sus amigos pasaran --"Ten cuidado Ominis, hay mucha nieve en el patio"-- Susan lo tomó de la mano en cuanto entraron al sitio, la nieve les llegaba practicamente hasta las rodillas, los chicos fueron recibidos por un airecito frío y el cantar de lechuzas a lo lejos --"Amigos que bueno que llegaron"-- la voz de Naty se escuchó cerca de la fuente que estaba en el jardín central, los chicos se acercaron a Naty --"¿Ominis estás bién?"-- preguntó Naty al ver a su amigo más palido que de costumbre y con las mejillas rojas --"No me gusta el frío Naty, ya lo sabes"-- la chica sonrió --"lo sé, pero no pensé que te afectara tanto, bueno esto será rápido"-- Sebastian y Susan intercambiaron miradas de pregunta --"tomen una y ponganla debajo de su lengua, no la saquen de ahí hasta la proxima luna llena o no funcionará"-- los chicos tomaron una hoja de la mano de Naty --"¿un mes?, ¿que pretendes hacer Natsai Onai?"-- preguntó Ominis no pudiendo distinguir el tipo de hoja que tenía en su mano --"es una hoja de mandragora"-- contestó Naty ante la interrogante de Ominis y la interrogante silenciosa de sus otros dos amigos --"por cierto, veo que controlas mejor tu poder Ominis, gracias por no leer mi mente"-- Ominis hizo una mueca entre molesto y curioso --"¿para que necesitamos una hoja de mandragora bajo la lengua Naty?"-- insistió Susan a su amiga --"creo que yo sé para que es, pero Naty, aquí no está permitido"-- contestó Sebastian --"¿y desde cuando te preocupa romper las reglas Seb?"-- preguntó con ironía en la voz la joven Griffyndor, Sebastian gruño en respuesta a la ironía de su amiga --"este será mi regalo de navidad para usted chicos"-- Ominis y Susan quedaron con más preguntas que respuestas en su semblante --"la otra parte se las daré en poco más de un mes, que es cuando habrá una tormenta electrica, ¡oh! deberán repetir estas palabras todos los días..." Naty les dió unas palabras que parecían trabalenguas anotadas en un pedaso de pergamino --"ya verán que le gustará el regalo, por cierto sino lo han adivinado la hoja de mandragora es un ingrediente de la poción para convertirse en animagos"-- Susan sonrió con la respuesta de Naty, pero Ominis dudo en si ponerse feliz o preguntarse si al ser ciego y no saber cómo lucen los animales podría convertirse en un animago, Sebastian también sonrió al ver que su deducción era correcta --"Naty, ¿tu también eres animago, cierto?, recuerdo que lo mencionaste el día que te acompañé a ver a la profesora Onai"-- Susan puso la hoja de mandragora bajo su lengua, su expresión se tornó algo incomoda al sentir la textura y el tamaño de la hoja --"asi es, soy animago, en Uagadu nos enseñan a convertirnos en animagos, por lo general tomamos la forma de los animales que hay en Africa, muero de curiosidad por ver en que animal se transformaran ustedes"-- Sebastian procedió a poner la hoja debajo de su lengua y al igual que Susan tuvo una sensación extraña --"y tu Ominis, ¿no quieres convertirte en animago?"-- preguntó Naty al chico que aún tenía la hoja en su mano y un rostro que denotaba preocupación y duda --"si, solo... que..."-- los tres chicos entendieron la preocupación de Ominis --"deshcuida Ominish..."-- Susan no agunto la risa cuando escuchó su voz extraña al hablar --"Shushan tu vozh"-- todos volvieron a reir al escuchar la voz de Sebastian que también hablaba raro --"deberan tratar de hablar lo más normal posible para que nadie se de cuenta"-- dijo Naty riendo todavia --"puesh eshto shera algo difishil de lograr"-- Susan trato de hablar lo más normal posible --"Ominis te aseguro que tu..."-- dudó en decir la palabra ciego "--...falta de visión no será un obstáculo para que consigas convertirte en un animago"-- Naty alentó a su amigo --"¿como puedes estar segura Naty?, si no sé cómo lusco si quiera yo"-- Susan lo abrazo y al abrazo se unió Sebastian y Naty --"solo lo sé, podrás hacerlo"-- Ominis tomó la hoja y aún con duda la puso debajo de su lengua, acto seguido volvieron a reir al escuchar sus voces raras con la hoja bajo su lengua.

El Legado De SlitherynDonde viven las historias. Descúbrelo ahora