Genshin impact - Reader One Shots

👹𝚇𝚒𝚊𝚘 - #2

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"NARRADO EN SEGUNDA PERSONA

Situación:- qué pasaría si presencias el dolor de su Karma

"tal vez aquel Adeptus Xiao no es tan frío como crees"

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Aquella visita a Liyue no fue la única que tuviste, tras tu éxito en Mondstadt empezaste a viajar con más frecuencia, aunque no te disgustaba para nada ya que podías pasar más tiempo en la Posada Wangshu y poder ver a aquel Adeptus de cabello azul oscuro, siempre lo llamabas de la misma forma con un palo recién hecho de tofu de alemdras añadiéndole cada vez un nuevo ingrediente, cosa que al adeptus nunca le había molestado, al contrario, parecía que le gustaba bastante ese nuevo sabor qué le proporcionabas.

En el tiempo qué te quedabas en aquella posada y podías ver a aquel Adeptus siempre aprobechaban para hablar de miles de cosas, en especial sobre aquellos vinos qué creabas, el recorrido qué días hacer cada mes para traer tu mercancía ya que no permitías qué nadie más la tocará, sobre tu hermano Un joven erudito experto en botánica que desempeña el cargo de guarda forestal en el Bosque Avidya, el cual te sobreprotegia bastante extrema al ser lo último que le quedaba en el mundo, pensabas más de una vez que aquel Adeptus se molestaba por tus charlas tan largas y repetitivas, pero aparecer este las disfrutaba mucho, también llegó a contarse algo más sobre el, sobre sus hermanos Yaksha, su visión, su antiguo nombre, los sueños qué devoraba y en especial sobre su Karma y como este le provocaba un dolor tan intenso qué siemple mete lo volvia loco por el dolor que le provocaba, cosa qué no creíste ver jamás, casi siempre que el dolor que le provocaba su Karma se hacía presente cuando tu ya lo estabas en la posada.

Esta vez sería diferente.

Era casi uno de tus últimos días en aquella posada así que querías aprovechar para estar con Xiao y hablarle del nuevo sabor de vino con el que estabas experimentando, un vino con algunas almendras el cual llamarías "Tentación De Yaksha" en honor a aquel chico que no podías sacarte de tu cabeza, pero no importaba cuando lo llamaras este no aparecia ¿estará ocupado? Pensaste despreocupada aun sostén viendo el plato de tofu qué le habias preparado como de costumbre, era bastante extraño qué este no respondiera aquel llamado la primera vez lo que hizo que la preocupación empezará a crecer en tu interior ¿y si le había pasado algo? No, no no puede ser así, es un adeptus, el es más poderoso qué cualquiera que conozcas, pero por alguna razón tenias un mal presentimiento en tu pecho, como una punzada qué perforaba tu pecho de lado a lado.

- ¡Adeptus Xiao!

Gritaste nuevamente en el balcón con la esperanza de que este apareciera como siempre a tu lado o sobre el techo de la posada, pero aún no habia nada, hasta que derrepente una rafaga de viento apareció tras de ti, sabias quien era perfectamente así que estabas por voltearte, para verlo y preguntarle que había pasado, pero antes de que pudieras reaccionar aquel Adeptus puso tus manos sobre tus hombros recargando su cabeza en tu espalda escondiendo su rostro miestras soltaba pequeños gruñidos qué gracias a tus largos oídos podías escuchar perfectamente ¿qué le estaba pasado?.

- ¡Xiao! ¡¿Estas bien que te-!?

- no... Me mires -interrumpió- porfavor... Haaa... No me mires

Quedaste confundida al escuchar su voz temblorosa miestras ponía sus manos torpemente en sus hombros tratando de sostenerse miestras su manos temblaban y no paraba de gruñir, relamnete no entendías qué estaba pasando o que debías hacer ¿esto era su Karma? ¿Que debías hacer?, relamnete era una situación que te ponía entre la espada y la pared, sabias que tenias que hacer algo pero si girabas el se enojaría con tigo y en este estado no sabes de lo que es capaz.

Pero el que no arriesga no gana ¿verdad?.

Giraste rápidamente aferrando a aquel Yaksha a tu pecho dejando su cabeza en tu hombro miestras podías aun escuchar como este se quejaba por el dolor que sentía, simplemente acariciaste su espalda miestras este desesperado mordía tu hombro haciendo que empezará a salir sangre, no te quejaste, simplemente seguiste acariciando su espalda tratando de calmarlo.

- tranquilo Xiao... Tranquilo, todo está bien....

Susurraste miestras este se empezaba a calmar lentamente soltando tu hombro aun aferrandose a ti, duraron así un rato hasta notar que se había desmayado en tus brazos, suspiraste tratando de cargarlo llevándolo a tu habitación, lo recargaste delicadamente en tu cama para que pudiera descansar miestras lo veías fijamente, para ser un chico que casi siempre te trataba con frialdad verlo en ese estado tan vulnerable te hacia sentir extraída y aun más cuando lo tenias al frente completamente dormido era un sentimiento extraño.

Pasaron varias horas y el permanecía dormido, tu no te separaste ni un momento de el, solamente cuando vendaste aquella fuerte mordida qué seguía sangrando aun después de vendarla, hasta que el adeptus despertó.

- ¿Cómo te sientes?

Te acercaste a él lentamente miestras aquel Adeptus aun estando en la cama giro a verte algo confundido, trato de levantarse pero se lo impediste rápidamente.

- oye, oye, no te apresures, aun debes recuperarte

- ¿qué paso? -contesto frío y algo debil-

- estabas mal así que yo te traje a mi habitación para que pudieras recuperarte, se que la medicina humana no tiene efecto en ti, así que solo se me ocurrió traerte a mi cuarto.

-... ¿Que te paso en el hombro?

- oh ¿esto? No es nada, no te preocupes ¿está bien?

- te lastime ¿no es así?

La habitación se quedo en silencio un segundo miestras este se sentaba en aquella cama poniendo su mano en su frente tratando de volver en si mismo, después de todo su cuerpo se sentía débil como se lo habías dicho.

- nah, no es nada, me lastime esta mañana -mentiste- ven, debes comer algo

El resto del día cuidate a Xiao el cual no volvió a hablar, tal vez sabía que el te había lastimado o se sentía culpable por que lo vieras así, nunca lo sabrias, los adeptus son basta te misteriosos.

En la noche Xiao se fue de tu cuarto sin decir ni una palabra, lo que te dejo bastante confundida, pero tal vez mañana podrías saber como estaba, así que solo te dispusiste a dormir.