¿Por que cambiaste tanto?

Capítulo 12 (Final)

El coronel noto el dolor en sus palabras, se quedó en su lugar para sentarse viendo al gemelo que aun no bajaba el arma por temor a que se acerque.

—¿Por qué cambiaste tanto?—Preguntó el coronel con lastima.

—Todos contaban conmigo, me obligue a mi mismo a cambiar para manejar este sitio, sin mi hermano, sin el coronel Quaritch—Siguió hablando con tono doloroso—Me sentía como un envase vacío.

—Eres fuerte, derrumbarte ante personas no es lo tuyo—Contestó serio.

—Y lo se, creeme que lo se—Dijo aguantando las ganas de llorar—Todos cuentan contigo, esperan ver una figura que demuestre seriedad, respeto y admiración—Apreto arma con rabia—Trate de olvidarlo muchas veces pero la culpa me lo impide, es un sentimiento que se que no entenderás, y no sabes cuanto me lastima ver a otro que se comporta de la misma manera frente a mi—Confesó dejando circular una lagrimas—Deja de comportarte como, dejame en paz, deja de verme, deja de tocarme.

—No sabía que te sentías asi—Añadió el coronel con la mirada baja—No recuerdo ni su muerte, pero si tengo aquí en mi pecho ese amor tan profundo que tiene por ti—Agarro su camisa con fuerza para darse valor—Soy sincero contigo—El gemelo dejo de escapar un grito ahogado por el llanto, el coronel y él se vieron fijamente, Quaritch decía con la mirada que le crea.

—He sido tan inmaduro—Tiro el arma al suelo para tapar su cara llorando—¿Por qué soy así?

—No es tu culpa—Afirmó el coronel acercándose a él, temeroso de que lo rechazará extendio sus manos para apretarlo a su pecho, acarició la cabeza del humano—No espero que me aceptes rápido pero que seas consciente que te amo y aun en este cuerpo lo haré hasta que mis huesos salgan y mi sangre se acabe.

—Déjame de decir eso—Se intentó apartar pero avatar desea aun más sentir su calor, así que no lo suelta—Por favor.

—No quiero—Lo apreto más a él, llevo su mano izquierda a los muslos del chico que ya empezaba a tener sospechas—Una vez mas—Tomo el mentón del humano para besarlo metiendo su lengua en la pequeña boca del gemelo que pataliaba para soltarse, empujabas con sus dos manos la cara del Coronel que tocaba sus piernas apretando su cintura, el azul se separó sacando su larga lengua del pobre niño que tosió un poco por el tamaño—Tan lindo.

—Suéltame, bajame—Ordenó con la cara roja y tosiendo, el avatar le sonrio aun más para besar la cara del gemelo que lo golpea para nada débil en su rostro.

—No, quiero más, ahora que te tengo tan cerca—Susurro para dejar besos en el cuello del chico metiendo su otra mano por la camisa manoseando su pecho.

—Para—Se intentó soltar pero el avatar se negaba levantando la camisa del chico para lamer con su rasposa lengua su piel—Me duele.

—Perdón mi niño—Contestó para sentarse en el suelo con el chico en su regazo, intento huir pero no tuvo éxito por que lo acercó más a él—Me estas matando con esa cara—Apreto los cachetes con suavidad.

—Si me sueltas olvidaré todo esto—Aviso con una falsa sonrisa.

—No quiero que olvides nada de este dia—Susurro coqueto, el humano negó con la cabeza ante la idea de tener que hacerlo aqui—No lo meteré hasta que estés listo.

—Para nada dejaré que lo pongas, primero me romperás las caderas antes de hacer eso—Negó asustado, el avatar se movio para que rozara su miembro que se levantó casi haciendo gritar al gemelo—Va a partirme con esa cosa.

El avatar se le burló mostrando sus dientes por la cara que puso el gemelo al sentir semejante bestia que tiene en sus pantalones, esta vez no trato de huir cuando el coronel lo levanto en brazos mientras el gemelo aguanta las ganas de llorar.