One Shots | My hero academia

Los polos opuestos se atraen 🥦Izuku Midoriya🥦

One Shot creado e ideado por mi.

Espero les guste este.

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El amor es confuso muchas veces. Estar enamorado de alguien que no pareciera estarlo de ti es algo difícil de aceptar. Es devastador creer no estar al nivel de la otra persona como para que siquiera sepa de tu existencia. Sentir esa presión en el pecho cada vez que lo ves con otra chica, riendo, alegre y conviviendo con ella. Mientras que contigo pocas veces habla y cuando lo hace dice cosas sin sentido intentado alejarse de ti.

Izuku es un chico encantador y gentil desde que lo conoces, pero conmigo era diferente. Siempre pareciera estar escondiéndose de mi, tratando de hablar lo menos posible conmigo. Como si me odiara, el pensar qué tal vez lo haga me apretujaba el corazón. Y aun así no podía odiarlo de regreso, si quiera era capaz de guardarle rencor alguno. Al verlo en la escuela todos los días, su sonrisa, sus ojos verdes al igual que su cabellera, sus mejillas adornadas con pecas, todo de él era bonito.

Estábamos en clase, la heroína Midnight explicaba lo que realizaríamos en esa sesión. Me encontraba sentada hasta el fondo del salón, en la esquina pegada a los ventanales. No prestaba atención a lo que la heroína comentaba a la clase, estar hasta el fondo del salón a un lado de los ventanales tenía sus ventajas, los profesores no se fijaban en lo que hacías o si estabas prestando o no atención a lo que decían y podías relajarte viendo la imagen de los árboles mudando de hojas por el cambio de estaciones. El sonido de fondo no me desconcentraba de observar la flora al exterior de la academia, las hojas aún verdes y fuertes de los árboles me recordaron al cabello de aquel pecoso que siempre rondaba en mi mente, me centré en ver el reflejo del vidrio, logrando localizarlo y admirarlo de forma discreta, sus ojos esmeralda, junto con su piel de porcelana, algo tenia el que me hacía quererlo cada vez más cuando lo admiraba.

—Midoriya y ______ serán la pareja número 4. — decretó la profesora.

Mis sentidos se pusieron de punta al escuchar mi nombre junto al del pecoso, quien me miraba de una forma indescriptible. Seguramente no querrá trabajar conmigo. No sobresalgo demasiado en clase, con quien mejor me llevo es Kirishima y Katsuki, mayormente con el pelirrojo.

Las clases pasaron lento, pero terminaron tan pronto se escuchó el timbre por toda la academia. Todos salieron del salón hacia la cafetería, pero no vi salir a Izuku con Uraraka e Iida, lo cual muy raro de él.

—Kiri, si quieren adelántense, se me olvidó algo en él aula. — le dije a él y a Bakugō, quien como siempre, se la vive de malas.

—No nos importa, gnomo./ Si no te preocupes.— dijeron los dos al mismo tiempo.

—Gracias, Kiri. Y tu... No me llames así, Sr. Bombitas. — antes de que el rubio pueda reclamarme me giré y empecé a caminar en dirección contraria a ellos, caminar rápido, por cualquier cosa. —. ¡Los alcanzó allí!

Seguí caminando hacia el salón, sólo se escuchaban mis zapatos tocar el suelo cada vez que caminaba, todos los demás estudiantes lo más seguro sería que estuvieran en la cafetería, solo a mi se me ocurre regresar por curiosa. Me acerco a la puerta del salón dispuesta a pasar por la gran puerta de madera, pero me detengo al escuchar voces dentro del aula.

—Bueno joven Midoriya, ¿que es lo que necesita decirme? — cuestionó Midnight.

—Sobre el proyecto en parejas. — escuché decir a Izuku.

—¿Que ha pasado con el proyecto? — inquirió la maestra.

Un silencio se mantuvo por un momento. Estaba parada a un lado de la puerta, sin emitir ningún sonido, cuidando de que nadie viniera y me descubriera asechando.