She Devil<Kj & tú>

Luna

— no quiero hablar contigo, no quiero verte — ella solo repetía eso mientras trataba de acercarme — déjame sola.

— está bien, me iré—dije y levanté las manos para que vea que ya no tenía intenciones de tocarla —  pero en la noche hablaremos, solo cálmate y recuerda que soy Kenny tu esposa la misma que te ama.

Dije bajito pero ella lloraba incontrolable mente.

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Salí de la habitación y Vi que tenía una llamada de Benito.

— hola amor — dijo contento — como te fue ayer en casa?

— no me digas así — dije sería — y con lo otro no es de tu interés.

— que mal humor te cargas mujer— dijo — será que podemos vernos hoy?

— no — sone más tanjante de lo que pensé — es más ni hoy, ni mañana. Esto se acabó Benito.

— como que se acabó — dijo molesto — yo no sé que te dijo la bruja de tu esposa pero no tienes que pagarla conmigo.

— primero respeta a mi esposa o no respondo y segundo es una decisión tomada — dije y colgué.

El intento llamarme incontable número de veces pero en ninguna conteste, prepare la comida favorita de Katy y espere a que ella bajara.

No lo hizo, en ningún momento ya era de noche y ella no había probado bocado en todo el día. No quiero que se enfermé por lo que le prepare un buen emparedado y lo subí con una limonada.

Antes llame a Kim.

— hola — dije apenas contestaron la llamada.

— hola kenny— dijo mi hermana — que raro tu llamando.

— si lo sé, este puedes hacerme un favor — dije nerviosa.

— siempre que este a mi alcancé cuenta conmigo — dijo y escuchaba los gritos de los niños.

— podrías por favor quedarte con las niñas hasta mañana — digo y escucho un suspiro de parte de ella.

— están peleando otra vez?— dijo y ahora fue mi turno de suspirar.

— es más complicado que eso Kim — dije y la escuché decir mierda — está vez me pase de la raya y no creo que ella me perdone.

— okey, hablaré con khloe para que se las lleve porque sabes que con los míos me basta y sobra — dijo y yo asentí aunque ella no pueda verme.

— gracias, te avisó— colgué la llamada.

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Subí con la comida y toque la puerta pero ella no quiso abrir.

— Katy ábreme — dije con firmeza

Ella no decía nada y tampoco se escuchaba ruido por lo que me preocupe y abrí la puerta.

Me la encontré sentada en el pequeño balcón de esa habitación y ella estaba ida mirando la luna.

Dejé la comida encima de la cómoda y me acerque a ella con mucha cautela para no asustarla.

— Katy — dije una vez estuve en el marco de la puerta que dividía el balcón con la habitación — no has comido nada.

— no tengo hambre — dijo con frialdad — no quiero nada que venga de tí.

Eso sí que dolió, pero me acerqué un poco más.

— no quiero que te enfermes así que ven y come un poco — dije y trate de tomar su mano pero en un acto de reflejo la alejo — no me trates de esa manera tan fría.

— como se supone que debo tratarte kendall— dijo sin quitar ni un segundo la mirada de la luna — sabes me siento como la luna, muy linda pero fría y sola.

— entremos y hablamos como adultas — dije calmada — solo eso te pido cariño.

Pov Katy

Todo el día estuve encerrada en estas cuatros paredes porque ella no tenía pensado salir como suele hacer.

Mi teléfono estaba en esa habitación y no quería entrar ahí, sentía que si lo hacía me iba a despedazar sin siquiera quererlo.

Ahora la tengo aquí implorando me para que hablemos.

Accedí porque se lo terca que es y no quiero que insista hasta que lleguen las niñas.

— ¿qué quieres hablar?—  dije tratando de contener la calma y sin hacer mucho contacto visual con ella — y solo espero que luego de eso me dejes sola.

— puedes decirme— ella estaba nerviosa lo sabía porque veía como sus piernas se movían sin parará — ¿qué fue lo que pasó anoche?

— lo diré una sola vez y solo porque se que esto no lo puedo callar por mucho tiempo — digo con un nudo en la garganta — no quiero volver a caer en ese hueco en el que estuve muchos años.

— tranquila puedes tomarte tu tiempo — dijo de manera sumisa — antes que nada quiero decirte que no estaba en mis cinco sentidos anoche y es porque  estaba drogada, hasta hace nada me llegó un flashback y lo recordé.

— cállate — dije y sentí mi primera lágrima salir —  llegaste muy enojada anoche, la razón no la sé — hize una pausa para tomar aire.

Estaba en el sofá de la sala leyendo un libro cuando llegaste y estabas muy alterada, me quitaste el libro de las manos y lo tiraste al piso. Te pregunté que por qué venías así y tu respuesta fue que era mi culpa.

No quise armar un escándalo en la sala porque Karina estaba dormida y Katherine acababa de llegar así que de seguro seguía despierta, subí a la habitación y me seguiste de manera rápida, me aventaste a la cama y te dije que me soltarás forcejeamos un rato pero según tú yo quería que alguien me tocará y por más que te pedí que me dejaras dijiste que no lo harías por qué era tu esposa, sin pensarlo me dañaste la camisa de mi pijama y lo hiciste Kendall abusaste de mi hasta sacarte y dormirte. Juro que nunca antes te había tenido tanto miedo— dije mientras lloraba en el transcurso, por primera vez la Vi y ella estaba llorando.

Ella se levanto de la cama y se arrodilló delante de mi — perdóname, cariño yo no quise —decia mientras lágrimas salían de sus ojos.— te juro que nada justifica mi comportamiento tan miserable pero no era yo. No era la Kenny que conoces.

— eso ya no importa — dije y  limpie mis lágrimas — los recuerdos volvieron Kendall, volvió mi odio hacía mi cuerpo, volvió esos malos pensamientos y de manera más fuerte sabes por qué. Porque contigo sabía que sin importar tus comportamientos de mierda, no me obligarías a estar contigo. Pero me equivoqué.

— Katy te juro por nuestras hijas y por el amor que te tengo que yo no lo hice con razonamiento de mis actos — decía mientras sus manos temblaban — yo jamás te haría algo que te dañe.

— te equivocas, así como se te ocurre jurar por algo que no sientes — dije triste — tú no sientes amor, esa es una palabra muy grande para ti y lo sabes, tú nunca me has amado de verdad. Porque siempre me dañas y yo soy la idiota que se deja dañar por ti.

—claro que te amo y te he amado siempre — dijo y yo no podía seguirla escuchando — te amo desde aquella vez dónde te Vi sentada a la orilla de la playa apreciando el atardecer.

— sabes pensé que apresar de que yo no cubría tantas cosas para ti, estaba a salvó contigo — dije con un nudo mucho más grande en mi garganta — pero en cambio eres la única que cada vez me mata con sus acciones y palabras.

— perdóname mi amor, por favor te prometo que voy a cambiar — dijo y reí con algo de dolor — yo no quiero perderte, yo sin ti me muero.

— siempre me dices lo mismo y no cambias, ya no te creo — dije y ella nego — si sigo contigo es porque no quiero hacerle más daño a las niñas pero lo nuestro acaba aquí. Viviremos juntas, pero cada quien con su vida.