O.Y

2

TAEHYUNG

No puedo creer que vuelva al lugar donde crecí.
Forest Pines no fue un camino de rosas para mí la primera vez.

No estoy muy seguro de por qué creo que me va a ir mejor la segunda vez.

Pero a pesar de todas mis dudas, empaco mis cosas en maletas y me subo al carro. Me acomodo para conducir hasta el lugar de donde vengo. El lugar que he evitado durante mucho tiempo. Seis años, para ser exactos.

Mi teléfono suena cuando entro en la autopista para lo que será el viaje más largo de mi vida. Un viaje por el carril de la memoria.

—Hola —respondo presionando el botón en mi volante.

La voz de mi mejor amigo llena el vehículo.

—¡Qué pasa chico! —dice, haciéndome sonreír
inmediatamente. Gracias a Dios, al menos esa relación sobrevivió al final del bachillerato. No sé qué habría hecho si también me hubiera dejado.

—¿Qué pasa, Jimin? —digo, tratando de enmascarar la tristeza en mi voz.

—Ya sabes, viviendo como un rey, bebiendo piñas coladas Junto a la playa —dice emocionado. Realmente ha estado viviendo la vida… Ojalá yo también lo hubiera hecho.

—¿Por qué me dejaste titularme como profesor? —le pregunto, sabiendo que nunca podría permitirme vivir la vida que Jimin vive con mi salario. Por otra parte, no podrías pagarme lo suficiente para hacer lo que él hace.

—Porque pensabas que la administración de empresas no era para ti —dice recordándomelo.

Asiento con la cabeza. Yo pensaba eso. Todavía lo hago. La enseñanza es mi pasión.

—Todavía desearía estar al lado de la playa en este momento con suficientes bebidas para calmar mis pensamientos —le digo.

—No es todo lo que parece. —No sé nada de eso. Jimin siempre está tramando algo, siempre en una nueva aventura.

—¿Dónde estás? —pregunto. Es otoño aquí en el noreste, por lo que definitivamente no está en esta parte del mundo.

—¡México! Me encanta estar aquí —exclama.

—Mira, definitivamente no puedes quejarte de tu trabajo.

—Todavía puedo. Tengo una reunión con un cliente esta noche, así que solo descansaré hasta entonces —dice.

—¿Esta noche? Es domingo. ¿Dónde es está reunión con tu cliente? —pregunto, preguntándome qué tipo de cliente quiere
reunirse en un fin de semana.

—Un club cerca de aquí… y antes de que digas algo, no es mi culpa que el cliente tenga varios y quiera mostrarme los alrededores para que pueda ver su negocio antes de hablar sobre cómo hacerlo crecer.

—Hacer crecer su negocio, tú dices —bromeo, desviándome para tomar la carretera que me lleva directamente a Forest Pines.

—Muy gracioso, TaeTae. De todos modos, te llamé y aquí estás tratando de distraerme de lo que quería preguntarte—. No me salió la jugada. Sabía que estaba llamando por esto, porla mudanza. Mi mejor amigo no lo olvidaría. No después de todas las lágrimas que me vio llorar.

Finjo no saber de qué está hablando.

—Solo quiero saber sobre tu última aventura —le digo, tratando de alejarnos del verdadero motivo detrás de su llamada.

—Mientras desvía preguntas sobre las tuyas —agrega.

—Realmente no voy a emprender una aventura —le digo.