《La Doctora || Dibu Martinez》

Capitulo 5 - En la misma noche

La boda de Alejandro y Kate es un asunto lujoso. La ceremonia se lleva a cabo en una iglesia grande, católica, por supuesto, y la recepción en un hotel caro, lo suficientemente grande como para albergar a sus grandes familias argentinas e inglesas.

Cumple con sus deberes de padrino y entrega los anillos en el momento adecuado y pronuncia un discurso para felicitar a la feliz pareja.

Es un buen día, una ocasión feliz, pero Emiliano está distraído, como suele estar estos días.

En el área de fumadores fuera del lugar, le da una calada a un cigarrillo mientras observa que la fiesta continúa a través de la ventana. Los novios se sientan en la mesa principal, radiantes de felicidad, el enorme vestido de Kate se desliza alrededor de ellos junto con las copas de champán en la mesa. Una fila de hombres y sus esposas se acercan a la mesa.

De vuelta al interior del local, toma un trago de la barra y se apoya en ella. Tiene dos cigarros metidos en su bolsillo, listos para cuando la recepción termine y su hermano quiera fumar.

Alejandro se une a él en el bar, pide un trago para los dos y observa a su nueva esposa al otro lado de la habitación, con una pequeña sonrisa en su rostro.

-Es una buena sensación, Dibu. Quiero que experimentes este tipo de felicidad-

-Estoy trabajando en eso-

Puede sentir a Alejandro mirándolo fijamente, preguntándose de qué mierda estaba hablando. Nunca le habló de la doctora Artigas.

Se vuelve hacia su hermano, con la bebida en su mano.

-Un brindis por tu novia- Levanta su copa en el aire. -¡Salud!-

Alejandro inclina su vaso hacia él. -¡Salud!-

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Al otro lado de la ciudad, en Birmingham, Dolores sale de su bar favorito y camina hacia su auto en el estacionamiento del bar, con el bolso colgado del hombro. Se siente sonrojada por el único cóctel que tomó, pero aún tiene la mente lo suficientemente clara como para manejar a casa.

Se acerca a su auto en la esquina más alejada del lote, oscuro por la falta de alumbrado público. Apuntando sus llaves al auto, lo abre, y es entonces cuando lo ve, emergiendo de las sombras.

La luz tenue no le da la vista más clara, pero puede distinguir sus rasgos. Con el pelo oscuro, una barba incipiente cubriendo su barbilla. Sus manos están metidas en los bolsillos de su campera verde y saca una para revelar un arma que apunta directamente hacia ella.

Sus manos inmediatamente se elevan en el aire, su bolso colgando de su muñeca y sus llaves agarradas con fuerza en su mano derecha.

-Por favor no me hagas nada-

-Te voy a matar hija de puta-

Su mano está temblando, el arma temblando con ella. Se acerca y Dolores puede ver la mirada frenética en su rostro, como si hubiera estado usando drogas.

-¿Con quién te estás cogiendo?- exige, extendiendo su otra mano en su cuello.
-Quedate quieta porque te hago mierda acá-

Ella sabe que solo debe obedecer, decirle lo que quiere escuchar, subirse al coche con él hasta su casa. En cambio, presiona el botón de la llave de su auto para liberar la de metal y se la pasa por la cara. Golpea su ojo y mejilla y grita de dolor, la sangre se filtra de la pequeña herida en su pómulo.

—La concha de tu madre —sisea, y luego la culata de su arma choca contra su propia mejilla, con fuerza, enviándola al suelo.

Ella lo registra vagamente pateándola en el estómago, y huyendo, pero sus ojos se cierran antes de que pueda intentar levantarse y hacer algo.

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Cuando se despierta, todavía está en el suelo, con el asfalto del estacionamiento pegado a su cara. Lucha por incorporarse hasta quedar sentada y se agarra un lado de la cara mientras el dolor le atraviesa el pómulo. Distantemente, reconoce que también siente dolor en su vientre, pero eso se siente leve en comparación.

Sus rodillas están cortadas y magulladas por la caída. Sus llaves todavía están ahí, tiradas a su lado en el piso. No tiene idea de cuánto tiempo estuvo así.

Se levanta con piernas temblorosas, entra hacia el bar balanceándose precariamente sobre sus talones, y se tambalea hacia la barra. Uno de los camareros la ve de inmediato y corre a su lado.

-¿Estás bien?-

-¿Podes llamar a la policía? Me asaltaron.-

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Espero q les guste hermanas👁👄👁