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Finalmente había llegado la gran noche donde la escuela ofrecería su tan famoso baile de los enamorados, donde los estudiantes podían pasar un agradable rato con sus parejas o amistades, bebiendo ponche especial y bailando en el gimnasio ahora decorado con corazones y rosas por todas partes.
Seoho comodó el moño de su traje y tomó un gran respiro. Revisó el reloj en su muñeca, viendo que era hora de partir hacia la escuela en donde se vería con Keonhee.
ㅡ¿Geonhak? ¿Ya vienes? ㅡpreguntó sosteniendo el celular entre su oreja y hombro mientras se aplicaba perfume y tomaba su saco.
ㅡYa estoy llegando, sal ㅡrespondió su amigo, viéndolo apenas abrió la puerta.
ㅡ¿Listo? ㅡuna sonrisa nerviosa apareció en los labios de Seoho antes de asentir, partiendo hacia la escuela con Geonhak, quien le contaba cualquier cosa para distraerlo de sus nervios, los mismo que volvieron a aparecer cuando divisó a su cita esperándolo en la entrada.
ㅡ¡Seoho! ㅡKeonhee agitó ambos brazos en el aire, gritando el nombre del chico, quien sonrió enorme al verlo lucir un traje idéntico al suyo.
ㅡHola, Keonhee ㅡse acercó a saludarlo, ofreciéndole una linda rosa que había comprado camino a la escuela.
ㅡEs preciosa, gracias ㅡKeonhee sacó de su bolsillo dos prendedores con rosas en ellos, colocando uno en la solapa del traje de Seoho y el otro en el suyoㅡ. Es un detalle de mi mamá, dijo que sería buena idea entrar combinados.
ㅡGracias, me encanta ㅡSeoho tomó con timidez la mano del otroㅡ. ¿Entramos?
Caminaron hacia el gimnasio, admirando la bonita decoración del pasillo que los llevaba hasta su destino, deteniéndose en la puerta del mismo para poder tomarse una foto en el arco de los enamorados, luciendo sus prendedores y bonitas sonrisas.
Pronto, se encontraron con sus amigos disfrutando de la tarde-noche y bailaron hasta que comenzaron a sentirse cansados, yendo entonces por ponche y eligiendo un lugar fuera de la pista de baile para no estorbar.
ㅡ¿Te la estás pasando bien? ㅡpreguntó Seoho.
Keonhee asintió con una enorme sonrisaㅡ. Gracias por invitarme, nunca había venido porque nadie me había invitado.
Seoho mostró su enorme sorpresa, haciendo reír a Keonheeㅡ. No te invité antes porque pensaba que ya lo habían hecho.
ㅡDebiste de aprovechar la oportunidad desde antes, así, hubiésemos venido como novios en este baile ㅡbromeó Keonhee.
El sonrojo inundó rápidamente el rostro de Seoho, cubriéndose con ambas manos para alejar su bochornoㅡ. Dudé muchísimo poder invitarte ahora ¿Cómo sueltas eso de la nada?
ㅡUps, lo siento ㅡKeonhee abaniqueo un poco de aire con sus manos para disminuir también su sonrojo.
ㅡPero ahora que lo mencionas ㅡSeoho lo miró, aclarándose la garganta y tomando fuerza para decirloㅡ. Keonhee, me gustas demasiado. Adoro ver tu sonrisa y escuchar tu risa, me encanta cuando miro tus ojos y veo el universo en ellos; el tiempo contigo siempre me parece muy corto, apenas nos despedimos deseo verte de nuevo. Eres mi sol de cada día, tu presencia me alegra y me haces muy feliz solo por el hecho de existir.
ㅡSeoho... ㅡKeonhee tomó las manos del contrario con una sonrisa que demostraba lo feliz que estaba.
ㅡ¿Puedo ser tu novio? ㅡpreguntóㅡ, por favor, dime que si.
Keonhee rió y se acercó a Seoho, dejando un beso pequeño en sus labiosㅡ. Sólo si tu me aceptas como tu novio.
ㅡ¿Bromeas? Es lo que más quiero ㅡSeoho abrazó a Keonhee, separándose pronto para llevarlo con él hacia la pista de baile, aprovechando que sonaba una canción lenta y cursi.
Cuando terminó el baile y caminaban hacia sus casas, Seoho recordó que aún tenía que agradecerle a Geonhak -seguramente lo invitaría a comer- por toda su ayuda. Al final, fue gracias a la grandiosa idea de Geonhak de dejar cartas en el casillero de Keonhee que este fuera su Valentín cada uno de los próximos días en su historia llena de conejitos rosas y nubes esponjosas.
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Agradecimientos
Si llegaste hasta esta parte de la historia, me gustaría agradecerte por haberla leído, espero que la hayas disfrutado y que te haya sacado una sonrisa.
Amor cliché del bueno, bonito y rosita.
Te invito a pasar por mi perfil por si quieres leer otra de mis historias.
