Primeras veces #1

Contrato

Grecia

Todo estaba perfecto ahora. Mis primeras 2 horas saliendo oficialmente con Aless me hacían sentir aún que todo era irreal, que era una de ese tipo de relaciones que estaban destinadas a ser, jamás me había sentido así con nadie, era algo que inclusive me daba miedo que aumentara. Hasta que mi manager me llamó cuando estábamos quedándonos dormidas en su cama después de platicar de nosotras, de un par de planes, de existir. Tomé el celular antes de que pudiera despertar a Aless quien se movió un poco en la cama haciéndome caer en la realidad y una verdad que tenía que decirle próximamente.

—¿Bueno?

—Tienes que ir al aeropuerto de inmediato.

Me paré de la cama lentamente, dándome cuenta de que Aless ya estaba perdida entre sus sábanas y salí de su habitación intentando de no hacer ruido para despertar a las demás que hace horas nos habían dicho que se iban a ir a dormir ellas, pero no sé si en sus habitaciones o en la sala.

Busqué mi bolsa y mis zapatos por toda la habitación, entre todas las flores que había traído. Cuando me dicen que es "inmediato", es inmediato y no hay forma de cambiar esa hora, ni siquiera pensar en discutir con ellos a este punto del partido.

—¿Qué pasa? ¿Por qué la urgencia?

Preguntar antes de empezar a moverme no es opción, cuando se trata de trabajo, se necesita la disposición en todo momento. No todo es siempre sencillo.

—Cambiaron la fecha de la conferencia de prensa a mañana por temas de logística, ya que salió a la luz las nuevas posiciones y una de las jugadoras del equipo ya mostró que se cambiará de equipo, todos se están preguntando quién ocupará su lugar, quieren hacer oficial el que ya te tienen en el equipo mañana en la tarde de España, que es en menos tiempo, más porque ya va a empezar la temporada. Esto no fue culpa de ellos, fue de sus exjugadoras, así que esta es emergencia.

Carajo. Carajo. Carajo.

Me puse los zapatos lo más rápido posible sacando también la llave de mi auto, poniéndola en mi boca para hacer esto más rápido. Tengo que solucionar esto, pero también tengo que encontrar el momento en el que le voy a decir a Aless al respecto.

—¿Lo proyectarán inmediatamente?

—¿Eso que importa? Estarás oficialmente en Real Madrid, ya no serán solo palabras, Grecia.

—Que hay muchas personas que no saben lo que voy a hacer, que necesito darles las noticias antes de que todo salga a la luz.

Un silencio incómodo, en el fondo se escuchaban gritos, ya todos estaban viajando a Madrid y yo no podía salir ni de la casa.

—Hablaremos de esto cuando llegues aquí. Además, es más temas personales con respecto a tus familiares o cualquier pareja que tengas, que por cierto ¿sabes que si tienes una pareja tienen que firmar un acuerdo de confidencialidad?

—Bien, yo tengo que arreglar una cosa a la vez.

Colgué, terminando de ponerme los tacones y buscando el interruptor para abrir la puerta.

—¿Grecia?

Su voz me asustó haciéndome saltar, al voltear, Alessandra estaba tallándose los ojos, me aclaré la garganta y le sonreí para darle un beso rápido en los labios.

—Lo siento, cariño, me llamaron del trabajo, tengo que... tengo que resolver unos asuntos de publicidad para una nueva campaña y después tengo que resolver algo de un departamento en España que mis papás quieren vender. Esto no estaba en mis planes, perdóname.