Acuerdos

14 4 0
                                    

G r e c i a

La vi salir y no pude ir detrás de ella. Tanta vergüenza, tanta pena por no poder decirle las cosas desde el principio. Era todo lo que pude haber evitado, incluyendo su mirada y su corazón roto.

Vi como sus ojos se cristalizaban y no pude hacer nada más que quedarme ahí parada sin saber qué hacer. Sin saber cómo reaccionar. Simplemente... deje que se fuera con mi corazón en una de sus manos mientras que tomaba el suyo de vuelta. Como si me hubiera quitado el suyo. Me haya arrebatado ese privilegio, con justa razón, pero se sentía tan extraño...

Fueron unos segundos eternos en los cuales solo escuchaba el latido de mi corazón...Uno que estaba sufriendo las consecuencias de mis acciones, de todo mi miedo y de todo mi egoísmo de querer hacer las cosas sola.

—Grecia.

Tamara me movía un poco mientras que yo regresaba a una realidad donde Aless necesitaba espacio, que se había ido y por algo que yo arruiné.

—¿Qué pasó?

—Ni yo tengo puta idea.

Ni siquiera podía escuchar con fuerza mi voz, es como si todo lo que yo era me lo arrebataron.

—¿Terminaron?

—¿Cómo chingados va a terminar algo que ni siquiera empezó?

Pateé el bote de basura mientras que las lágrimas empezaron a brotar de mis ojos, el pecho comenzó a dolerme. Al diablo, me iría de la fiesta, yo no puedo ni siquiera verla, no sé a dónde fue y ahora no quiero ni siquiera que me digan felicidades por la gran noticia, no podía tener ningún contacto humano. Todo esto debería de ser diferente si yo nunca me hubiera enamorado de Aless, si ella no se hubiera atravesado en mi camino ahora mismo estaría celebrando con botellas de champagne y gritando que había logrado mi sueño junto a ella.

Lo logré, carajo, lo logré.

Y yo solo podía pensar en lo desastroso que se va a volver todo esto. Sé que ella no me debía nada, ni yo a ella, pero después de la gran conexión que teníamos, le debía el mundo entero desgraciadamente. O al menos una explicación.

"Felicidades"

¿Quién carajos decide felicitar a su pareja cuando se acaba de enterar que se va a ir del país por un post de Instagram y no por la persona?

Ella.

Porque más que por ella, vio por todo lo que le he contado, por todo lo que hemos pasado, todo lo que sabía que quería lograr, por todo... Ella decidió estar feliz.

Carajo.

Me paré, mareada, más de lo que quisiera admitir y sin medir bien la puerta.

—¿A dónde vas?

—No lo sé.

—Grecia-

Tamara intentó de tomarme de la mano, pero yo la alejé y la vi furiosa.

—No voy a ir detrás de ella o armaré un escándalo, ella me pidió tiempo o lo que sea. Además, no pienso hacer esto con tanto alcohol en el sistema, sé que no va a resultar bien.

—Tampoco puedes manejar.

Me recargué en la puerta suspirando. Puros peros por aquí, tampoco podía marcarle a mi hermano, estaba en una cena importante.

—Carajo...

Sentí sus manos en mis brazos, presionándolos, como intentando que regresara en mí, intentando de que no huyera como lo hago de costumbre. Ya he estado en muchos escándalos por manejar ebria, pero también porque aparezco borracha en la calle. Ahora que tengo el contrato con el Real Madrid, no puede salir nada, no me puedo arriesgar ahora que he conseguido el contrato.

Primeras veces #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora