25° PARTE

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***

Había sido difícil, pero aquí estaban.
La familia Pawat, y cuando hablan de la familia Pawat, solo se refieren a los hermanos.

– Tu padre falleció.

– Lo sé.

– ¿No tienes pena o algo?

– No.

La mirada de Nanon era de incredulidad. ¿Cómo es que Ohm no puede tener ni un sentimiento por sus padres?

– Sinceramente no siento nada. Jamás me mostró algo de cariño, solo me vió como un proyecto y nada más.

– ¿Tampoco extrañas a tu madre?

– Creo que ninguno extraña a su madre.

Apo, quien estaba escuchando la conversación desde hace un momento, se acercó a Ohm y Nanon.

– Yo sí la extraño –Nanon habló.

– ¿En serio?

– Mi madre era hermosa y me amaba.
Apo sonrió y miró a su hermano mayor.

– Earth a veces la echa de menos. Tengo muy pocos recuerdos de ella. Nos crió hasta los 4 años, luego nuestro padre hizo de nosotros, lo mismo que hizo con Ohm. La única diferencia es que a Ohm lo dejó disfrutar más tiempo de su libertad.

– Por cierto... –Earth habló desde su lugar, mirando a Ohm– Tú tenías más hermanos.

Ohm se quedó callado. Jamás preguntó por ellos. Solo se había concentrado en lo mal que su padre lo trató, que se olvidó del dolor de sus hermanos menores.

– Veo que no sabes nada de ellos.

'Espero que estén bien'

– Por cierto –Esta vez Earth miró a Apo, tratando de cambiar de tema o de objetivo– No hables de terceros cuando no están cerca –Dijo, refiriéndose al asunto de que extrañaba mucho a su madre y Apo que mencionó.

Apo sonrió.

– Max! –Gritó Ohm, llamando a su hermano– Tu madre ¿es la misma que Apo y Earth?

– No, es otra.

– Pero eran familia con la mamá de Apo y Earth.

Max se acercó a los demás chicos.

– Creo que no, la verdad no tengo idea. Earth ¿Tu madre y mi madre son familia? –Preguntó Max a Earth.

– Pues no lo sé. Solo sé que eran de un mismo pueblo.

Nanon miraba a los cuatro hermanos.
– Es extraño.

– ¿Qué es extraño?

– Verlos reunidos a todos ustedes. Se odiaban y ahora están aquí.

– El hecho que nos veas juntos, no significa que nos amemos.

– Apo tiene razón, solo estamos aquí porque en un día nos debe llegar el dinero y tenemos que repartirlo en partes iguales.

– ¿Quién tuvo la grandiosa idea de encadenarnos a todos?

Todos movieron sus pies y miraron sus cadenas.

– Era eso porque uno de nosotros se puede largar con el dinero, dejándonos a los demás en la ruina.

Todos se rieron al escuchar el sonido de las cadenas en el suelo.

– Drake ¿con quién compartirás tu parte del dinero?

– Con mi madre.

– ¿Tu madre está viva?

(TERMINADA) MILICIA CELESTIAL Donde viven las historias. Descúbrelo ahora