Capitulo cinco - Rei Ikari

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Kaworu llegó a la azotea, donde vio a Rei completamente sola, comiendo su almuerzo tranquilamente en una esquina, el de ojos rojos sonrió para sus adentros y se acercó con sus manos en sus bolsillos, donde guardaba su navaja.

-Así que... Rei Ikari no?- Saludó simple, Rei lo miró un segundo, y luego volvió a prestar atención a su almuerzo.-Nunca te han dicho que es de mala educación ignorar a alguien?- siguió Kaworu en un tono burlón. -Padre dice que no debo hablar con maricones.- Esas palabras le cayeron al chico como un jarro de agua fría.

Kaworu se dió media vuelta, y entonces todo le quedó claro, era culpa del padre de Shinji, quien siempre amó más a su hija que al castaño, entonces, tomó una decisión apresurada.

La noche cayó, Shinji, que seguía encerrado en su habitación, empezó a escuchar la voz de su padre, claramente alterado, quien daba voces por teléfono. -Como que no la han encontrado aún?!- gritaba con rabia a quien sea que estuviera al otro lado de la línea, Shinji comenzó a preocuparse, así que pegó su oído a la puerta de su habitación.-Sois unos incompetentes! Sois conscientes de lo que pago yo de impuestos?! Y aún así no podéis encontrar a mi hija?!-.

A Shinji le dió un vuelco el corazón, el sabe que no es muy cercano con su hermana, pero aún así la aprecia mucho, escuchó pasos hacia la habitación, así que se despegó de la puerta y se sentó en su escritorio, como si estuviera leyendo documentos del colegio, entonces, entró su padre aún con el teléfono en la mano.-Tu hermana... Rei... Ha desaparecido, mañana irás al colegio mientras ayudo a la policía a buscarla.- Dijo Gendo en un tono completamente neutro, como si la conversación que escuchó por teléfono no hubiese sucedido.   

La cara de Shinji era un desastre, lágrimas salían de sus ojos mientras no paraba de balbucear incoherencias, su padre, en cambio, seguía con su rostro impasible mirando a su primogénito llorar.

Kaworu estaba en su apartamento, arrancando una foto de Rei que tenía en el corcho con las fotos de Shinji y sus conocidos, hizo una bola de papel con la fotografía y la tiró a la basura, luego, siguió examinando el corcho, se fijó en la fotografía de Nakayama, la amiga rubia de Asuka, posteriormente la foto de la mencionada pelirroja, después a la de Kensuke y a la de Tōji, que iban juntas, entonces, con un rotulador rojo hizo un gran círculo en la cara de la alemana, sonriendo ampliamente.

-Así que me quieres hacer competencia eh, esto ya estaba ganado desde el principio.- Rió Kaworu para sus adentros.

Después se dirigió a la cocina, preparó su cena e hizo el recuento de dinero de la beca para la semana, cuando recibió una llamada inesperada, era Shinji.

-Perdona por haber faltado hoy a clases Kaworu, es solo...- El castaño hizo una pausa.- Las cosas se han puesto feas en casa, lo podemos hablar mañana luego del colegio? Si quieres podemos ir a tu casa.- Habló Shinji a través del teléfono, el albino reía para sus adentros, mientras consolaba a su pareja diciéndole que todo saldría bien y organizando los planes para mañana.

°•Obsesión insana•°Donde viven las historias. Descúbrelo ahora