Capitulo seis - Consecuencias

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La policía no tardó en hallar pruebas sobre la desaparición de Rei Ikari, lo primero que hallaron fueron marcas de algún objeto grande siendo arrastrado hacia el incinerador escolar, este tenía restos de plástico que venían de una bolsa grande de basura, pero el contenido solo era mera especulación, las cosas de Rei seguían intactas en su taquilla y su almuerzo estaba tirado en el suelo de la azotea.

Tenía unas leves manchas de sangre.

El caso se hizo público como asesinato y los medios empezaron a hacer repercusión, rápidamente el noticiero diario habló sobre el tema.

Se hicieron entrevistas a la familia afectada y se cerró la academia por unos días en pos de la investigación.

Shinji se encontraba devastado, no podía creer que su hermana se hubiera ido para siempre, todas las emociones acumuladas en un día no se podían controlar, salió de su casa completamente desanimado, sacó su walkman y caminó hacia la casa de Kaworu, con quien había quedado el día anterior.

Al llegar a la puerta de la casa de su pareja, tocó el timbre y el albino le abrió, Shinji rápidamente se abalanzó sobre Kaworu en un necesitado abrazo que el contrario correspondió sin rechistar.

Un par de horas después, la pareja estaba en el comedor de la casa, comiendo pastelitos que el de pelo grisáceo compró, mientras consolaba a su pareja que se hallaba en una fuerte crisis después de todo el caos que era su vida en ese momento, no había pasado ni medio año desde que su madre falleció y ahora había perdido a su hermana también, le dolía el pecho y lágrimas no paraban de salir como cascadas de sus ojos.

Lo único que podía hacer Kaworu era consolar al castaño, le dolía en el alma verlo así, él sabía que la culpa era suya, pues el fué quien mató a Rei en un arrebato, pues quería hacer sufrir al padre de Shinji, pero en ese momento no contaba con la reacción de su pareja.

Su mente se justificaba con que era culpa de Gendo, por no apoyar a su hijo, culpa de Rei, por insultar a su hermano, que nadie tenía la culpa, pues lo hizo sin pensarlo, pero su corazón lo tenía claro.

El era el culpable de la muerte de Rei Ikari.

La tarde pasó con Shinji siendo consolado por Kaworu, a quien la culpa lo acuchillaba por dentro.

-Muchas gracias Kaworu, no se que haría yo sin ti.- Las palabras de su amado acabaron de destrozarle, al punto de que estuvo a punto de confesar su crimen, pero su mente actuó antes, pensando en cómo el castaño lo odiaría y abandonaría, eso le daba más miedo que la cárcel.

-Shinji... Yo siempre estaré ahí para ti.- Respondió finalmente el de ojos rojos luego de una pausa, un huracan atormentaba su mente y hacia lo posible para que su pareja o sospechase nada.

Kaworu tuvo la idea de sacar su piano electrónico para relajar al castaño, comenzó a tocar una pieza improvisada mientras Shinji le veía fascinado, su pareja le incitó a unirse.

Empezaron con un simple dueto en el que el castaño seguía el ritmo a su pareja con notas simples hasta que se acostumbró al piano y la improvisación se hizo más compleja.

Siguieron tocando hasta el anochecer cuando a Shinji se le ocurrió una idea.
-Puedo...quedarme aquí a dormir por hoy?-.

A Kaworu le pilló por sorpresa

°•Obsesión insana•°Donde viven las historias. Descúbrelo ahora