Mi adicción | Adaptación AG『+16』

7

____ Bonnet.

Tratando de disimular miré hacia la mesa en dónde estaba, pero el muy maldito se había cambiado de sitio, lo tenía justo delante de mí, solo para que pudiera verlo bien. No entendía que pudo haber pasado. La noche anterior había sido genial, incluso, pensé que estábamos en un punto en donde los dos nos encontrábamos a gusto, bueno, él más que yo, pero por eso no entendía esa reacción hacia mí. "¿Será por qué está con la rubia?" me cuestione en mis adentros, haciéndome pensar que posiblemente era su novia. Se me encogió el corazón solo de pensarlo.

Dediqué toda mi atención a Abel, quien nos estaba contando el último caso que había ganado como el abogado que era. En realidad, no me estaba enterando de nada, la mirada penetrante de Aidan al otro lado hacía que fuera incapaz de concentrarme. A pesar de no enterarme de nada, sonreí, no quería que él notara que sus miradas me tenían perdida.

Después de eso, los cuatro salimos a la pista a bailar. Fabián me tomó de la mano y los dos nos balanceamos al ritmo de la música, no había coqueteo, ni arrumacos, ni nada que se le pareciera, al menos eso era por mi parte. Sabía que si yo quisiera, Fabián no tendría ningún problema en acompañarme a casa o llevarme a su hotel. Pero no era lo que yo quería.

- ¿Se puede saber qué te pasa? - La canción ya había terminado, y July estaba delante de mí, mirándome interrogante. - Te he observado desde hace rato, pareces ausente. ¿Estás bien? -

- Vaya, no se te escapa ni una. - Dije riendo. - Él está aquí. - Volví a hablar refiriéndome a Aidan.

- ¿Si? ¿Dónde? -

- Está en la zona VIP, muy cerca de nuestra mesa. -

- ¿Y cuál es el problema? -

- El problema es que me ha visto y ha actuado como si no me conociera. - Murmuré algo molesta.

- ¿Ha pasado algo entre ustedes que yo no sepa? -

- No, ayer cuándo nos despedimos todo estaba bien, o al menos daba esa impresión. Está con un grupo de gente, entre ellos hay una rubia espectacular que no para de manosearle. -

- ¿Estás celosa? - Preguntó y yo solo pude asentir. - ¿Puede ser que él también lo esté? -

- ¿Él celoso? ¿Pero por qué? -

- Dios, ____. Fabián no se ha separado de ti en ningún momento. -

- No, no creo que sea por eso. Lo vi tonteando con esa chica, hasta puede que sea su novia. Joder, July. ¡Si hasta lo salude con la cabeza! Fue entonces cuando él me miró de esa manera, como si no me conociera. Que esté así por Fabián es una tontería, él y yo no estamos saliendo, solo follamos. - Le dije esto último en un susurro, para que así nadie más que ella me oyera. - Solo hemos estado juntos un par de veces, no puede ser por eso. -

- Pero tú estás celosa, ¿Por qué él no puede estarlo? -

- Sí, admito que estoy algo celosa, pero aún así lo saludé, ¿Notas la diferencia? ¡Él me ignoró! - Dije cada vez más molesta. - ¿Por qué? -

- No lo sé amiga, pero no parece que Aidan sea de los que se quedan callados por mucho tiempo. Vamos, los demás estarán preguntándose dónde estamos. - Me sujetó del brazo y tiró de mí para que la siguiera.

Después de todo ya eran las tres de la mañana, y el grupo decidió ir a una fiesta que había en el puerto, pero yo pasé. Estaba muy cansada, no tenía la cabeza para más fiestas y prefería ir a casa para dormir.

Antes de salir todos juntos de American World, le eché un último vistazo a Aidan, quien seguía con la rubia pegada a él como una lapa. Me despedí del grupo en la puerta y pedí un Uber para que me llevara a casa.