Dee ... ¡¿Tiene una Sugar Mommy?! (Metal Family)

capitulo 12.

Sábado en la mañana. El día más esperado por muchas personas, la semana había pasado con extrema rapidez, Deniska ocupándose de hacer todo lo posible para que el salón estuviera listo, las mesas, cubiertos, comida, personal y todo lo que tendría en la fiesta.

Mientras que Dee, el rubio aún seguía con ese debate en su mente, pero no tanto como para olvidar sus obligaciones como estudiantes. Desde ayer, tuvo que mentir les a sus padres que se había ganado dos boletos para el concierto en un concurso y llevaría a Heavy por su cumpleaños.

Ahora el rubio estaba hablando con su padre de que hacer en caso que pasará algo antes, durante y después del concierto.

- Y por nada en el mundo vayas a los baños... Y ten cuidado con las cosas que tiren.- y así termino la lección de Glam.- ¿Alguna duda?- pregunto mientras entregaba su hijo una pequeña mochila con las cosas necesarias para alguna emergencia.

-Ninguna.- hablo Dee colocando la mochila en sus piernas.

-Mi número está registrado en el teléfono que hay adentro, cualquier cosa me puedes llamar... Aunque estaré en el estacionamiento.- Glam sentía nervios, si bien, sabía que Dee y Heavy podía cuidarse bien. Tenía ese típico nervios de padres en dejar ir a sus hijos en lugares con grandes posibilidades de que algo malo pasará.

-Gracias pa...- Dee se paró de su asiento ahora acomodándose la mochila en uno de sus hombros.- Iré a casa de un amigo antes, le prometi que ayudaría con una tarea.- otra mentira, le había prometido a Deniska que iría a su casa para ayudarla.- Estaré aquí media hora antes de irnos.- se despidió mientras se dirigía a la puerta de la oficina de su padre.

-¿Puedes decir a Heavy que venga? Ahora necesito hablar con él.- Pidió su padre y Dee solo solto un de acuerdo.

El rubio menor fue hacer lo que su padre pidió, también dejo la mochila en su cuarto, y rápidamente se fue ante las preguntas de Heavy de por qué su padre necesitaba hablar con él. Durante el camino estuvo pateando una lata que se encontró por ahí. El debate estaba presente ¿Que era lo que sentía por Deniska? Lo primero que sintió cuando la conoció fue indiferencia, después de todo él quería el dinero para los boletos, de ahí se convirtió en una admiración.

Apesar de que ella había sido criada por una familia de alto prestigio. Ella no se le subió el ego de cualquier persona que nace en una cuna de oro, decidió hacer su propia fortuna creando aquella línea de hoteles que ahora era una de las recomendadas para los extranjeros.

Y ahora con lo que pasó hace días, aún lo perseguía e incluso en sus sueños, aunque por alguna razón estaban algo subidos de tono. Trato de olvidarse de eso por un momento al darse cuánta de que estaba por llegar a la zona. Saludo a los guardias que, hasta se les hacía normal ver a Dee, lo dejaron pasar sin mucha dificultad.

-¡Ya llegué!- se anuncio el rubio cerrando la puerta.

-¡En mi cuarto!- grito la mujer desde la planta baja.

Dee se puso tieso, pero rápidamente subió las escaleras, después de todo no sabía si la mujer ya tenía prisa o no. Llegó a la puerta donde pertenecía el cuarto de la dueña de la casa, tocó dos veces y entro cuando escucho un pase.

- Espero que no estés apu.... Rada...- Dee rápidamente cerro la puerta para no seguir viendo.

De lo poco que vio, era que Deniska estaba sentada en su tocador con una bata de seda corta, pero mostraba algo de más por qué la mujer tenía la pierna cruzada, y eso que Deniska tenía puesto unas medias negras más arriba de la rodilla.

-¿Dee?- la mujer abrió la puerta confundida, pero Dee se pego a la pared del frente.- ¿Que te pasa? Has estado más raro de lo usual.- comento con la cadera a un lado.