Ya es viernes por fin. La semana ha transcurrido normal, clases largas y aburridas, patios cortos con Valerie y prácticamente ninguna interacción con Domenico aparte de un "buenos días" o "hasta mañana".
Hoy tenemos clase hasta las once, así que Valerie y yo hemos decidido ir a la biblioteca hasta la hora de comer.
Ya en la biblioteca nos hemos sentado en una mesa bastante apartada para que no nos moleste nadie, hemos ido a por un par de libros que necesitamos para estudiar y hemos hecho los deberes que nos han mandado para el fin de semana y estudiado para el examen de matemáticas del lunes. No había muchos deberes y las matemáticas las llevamos bastante bien, así que todo esto solo nos ha tomado un par de horas.
Al acabar hemos ido a una cafetería a tomar algo, ya que es muy pronto para ir a comer, allí nos hemos encontrado a unas compañeras de clase y nos hemos sentado con ellas, la conversación no ha sido muy interesante, hemos hablado sobre los deberes que nos han mandado, los exámenes de esa semana y que todas estamos de acuerdo en que el profesor de italiano debería jubilarse.
Cuando he llegado a casa he comido con Giulia y le he explicado sobre Valerie mi nueva amiga lo bien que congeniamos y la conexión y confianza que tenemos aun conociéndonos de hace unas pocas semanas, Giulia me ha explicado cómo le ha ido a ella la semana y las amigas que ha hecho. Hemos pasado toda la tarde hablando de que nos parece el instituto y la gente de aquí. Ya me iba a dormir cuando Valerie me ha escrito diciéndome de hacer algún plan el fin de semana, obviamente he aceptado, hemos quedado el sábado para comer en algún restaurante.
Ya es sábado, hoy he quedado con Valerie. Me he levantado temprano y lo primero que he hecho es bajar a desayunar. Por suerte no hay nadie despierto, así que podré desayunar tranquila. Después del desayuno ya me he dado una ducha y me he vestido cómoda para estar por casa hasta la hora de comer. Valerie y yo hemos quedado a las dos en un restaurante chino, sobre la una yo ya estoy lista y le quiero pedir a mi padre que me lleve, ya que está algo lejos.
—Papá, ¿te importaría llevarme al centro? He quedado para comer.
—¿Con quién se supone que has quedado?
—Con una amiga.... Se llama Valerie, es nueva en el instituto.
—¿A qué hora hay que llevarte?
—Sobre la una y media está bien.
—Vale, ves arreglandote que en veinte minutos salimos de casa.
Cuando he llegado al restaurante Valerie llevaba un rato esperando, al verme ha venido corriendo hacia mí y me ha abrazado. Nos hemos despedido de mi padre y hemos entrado al restaurante, al entrar nos ha atendido un chico y nos ha llevado hacia la única mesa que hay disponible. Una vez sentadas hemos pedido, yo he pedido arroz tres delicias y pollo con almendras y Valerie arroz tres delicias y rollitos de primavera y para acompañar hemos pedido pan chino. Cuando hemos terminado hemos pagado y hemos salido del restaurante.
—Estaba buenísimo, tenemos que volver. Dice Valerie con entusiasmo.
—Sí, aparte de estar bueno es muy barato, la próxima vez tenemos que venir con más gente.
—Vale, para la próxima invitamos a Domenico y que venga tu hermana si quiere también.
—Me parece perfecto.
Hemos pasado por delante del campo de fútbol del barrio y hemos visto a Domenico. Nos ha pedido que si por favor podemos esperar a que acabe de entrenar, que le quedan veinte minutos y así puede pasar la tarde con nosotras.
Cuando Domenico ha terminado el entreno, ha venido con nosotras y hemos ido a dar una vuelta, Hemos terminado pasando la tarde en una cafetería conociéndonos un poco más y hablando sobre nosotros. Ya se estaba haciendo tarde, así que decidimos volver a casa, a Valerie la vienen a buscar en coche, así que Domenico y yo nos vamos para la estación de metro. De camino, empiezan a caer gotas y nos empezamos a preocupar porque no llevamos paraguas. Corremos hasta el metro, no estaba muy lejos, así que hemos llegado rápido.
Ya hemos llegado a nuestro barrio, no tengo llaves y lo peor de todo es que mi familia se ha ido a cenar fuera y ahora sí está empezando a llover fuerte.
—¿No entras Bianca?
Me dice cuando ya estamos en mi porche.
—Es que.... Se me han olvidado las llaves y no hay nadie en casa. Esperaré hasta que lleguen, gracias por acompañarme.
—No te vas a quedar aquí sola, entra a mi casa que te dejaré algo de ropa seca en lo que la tuya seca.
—Gracias...
Mi familia no ha tardado mucho en llegar a casa, Giulia me ha escrito para que sepa que ya han llegado y le he pedido que me espere en la puerta, cuando me ha visto salir de la casa de Domenico me ha mirado con una expresión de sorpresa, pero no ha dicho nada hasta subir a nuestras habitaciones.
—¿Qué hacías en casa de Domenico? Me pregunta impaciente.
— Nada, nos ha pillado la lluvia y como no tenía llaves me ha dejado entrar a su casa y me ha dejado ropa seca.
Se empieza a reír y yo me voy a mi habitación para ponerme el pijama y entrar en calor. Estoy viendo un rato la tele cuando me llega un mensaje de Valerie.
Valerie: ¡Cuéntame todo! ¿Qué ha pasado?
Bianca: Nada, solo hemos subido a su casa para refugiarnos de la lluvia, ha sido muy amable la verdad.
Valerie: Tía que bien, me alegro mucho. Por fin te estás acercando a él como querías.
Bianca: La verdad que sí, pero tampoco quiero ilusionarme....
Valerie: Arriésgate tía, sigue intentándolo y al final conseguirás salir con él. Ya verás.
No paro de pensar, realmente no sé si seguir intentándolo. Me empieza a gustar Domenico, pero me da miedo que no sienta nada por mí y que se burle.... Pero estos días he notado cierto interés. Creo que me arriesgaré y lo seguiré intentando.
ESTÁS LEYENDO
FIRST LOVE
RomanceBianca una joven que debido al trabajo de su padre está constantemente mudándose entra a un nuevo instituto en Milán, Italia en el cual conoce a Domenico, un chico misterioso que consigue captar la atención de Bianca